Ewangelizacja

Rosa Pich: «El Cielo en la Tierra es posible, con sacrificio, humor y caos»

La madre de 18 hijos Rosa Pich, transforma el dolor de sus pérdidas en enseñanza y alegría en su nuevo libro ‘También hay cielo'.

Teresa Aguado Peña-27 de wrzesień de 2025-Czas czytania: 4 minuty
Rosa Pich

©Cortesía del autor

Rosa Pich, madre de 18 hijos —tres de ellos ya en el cielo— y viuda, es un torbellino de alegría, fe y energía contagiosa. En su nuevo libro «También hay cielo», demuestra que se puede reír en medio del dolor, y que este se puede transformar en enseñanza. Con su famoso “caos organizado”, Rosa convierte cada día en un espectáculo de vida familiar mostrándolo en sus redes con el objetivo de aportar «un granito de esperanza» para todos aquellos que lo necesiten.

Desde sus primeros años de matrimonio, Rosa y su esposo decidieron dejar su familia en manos de la providencia. “No decidimos si tener uno, dos, tres… Sí que hablamos de querer una familia numerosa, pero al final es lo que Dios te da”, recuerda.

Su experiencia personal no ha sido fácil: al nacer su tercer hijo, falleció a los diez días, y cuatro meses después murió el segundo, ambos con problemas de corazón. Los médicos les recomendaron no tener más hijos, asegurando que podrían morir todos, e incluso que la mayor viviría solo hasta los tres años. Aun así, Rosa y Chema decidieron seguir adelante: “Nadie se mete en tu cama, vamos a hacer lo que nos dé la real gana”, dice Rosa, y así asumieron el riesgo y confiaron.

Rosa y sus hijos en una foto familiar ©Imagen de sus redes sociales

Para Rosa, cada hijo es un regalo inmerecido de Dios, un don temporal que los padres reciben para educar y acompañar, sabiendo que pronto seguirán su propio camino. Destaca la enorme responsabilidad que implica tener la libertad de decidir formar una familia: “Dios nos da la libertad…, si papá y mamá decimos que no, no van a nacer”, señala, subrayando que la decisión de traer un hijo al mundo es solo de los padres, y que esta responsabilidad trasciende la vida terrenal. Cada hijo exige entrega, sacrificio y servicio: aunque a veces los pequeños detalles de la crianza parecen abrumadores, Rosa recuerda que se trata de un acto de adoración y amor, un dar constante que fortalece el vínculo familiar.

Educar en la fe

Rosa explica que en su casa hay una vida de piedad: “Vamos a Misa los domingos, y los días que podemos entre semana, también. En casa se reza el Rosario”, sin que los niños decidan si participar o no, al igual que “no le dejas decidir si quiere ir al colegio”. Rosa muestra a sus hijos cómo integrar lo espiritual en lo cotidiano. “Los hijos tienen que ver a los padres rezar”, asegura, destacando que la espiritualidad se aprende sobre todo con el ejemplo.

Sin embargo, al crecer, los hijos toman sus propias decisiones: “tenemos que dejar que se equivoquen”. Cada hijo tiene su propia identidad, y aunque la educación en la fe es constante, ella respeta que, llegado un momento, los hijos decidan por sí mismos. “Tú educas en casa una fe vivida desde la cuna, pero al final tienes que respetar”, explica.

La pérdida

A pesar de haber vivido la muerte de tres hijos y la de su marido, Rosa, en su nuevo libro ‘También hay Cielo’, afirma que ha sido «muy mimada por el Señor». Ve el dolor como una oportunidad para transformarlo en algo más fértil, en una enseñanza. Por eso, resalta la importancia de afrontar la realidad y no huir de ella. Cuando ve que esta le supera, sabe a quién recurrir: «Señor, ayúdame. Dame fuerzas porque sola no puedo». Comenta que hemos sido creados para ser felices aquí en la Tierra, «aunque a veces se nos olvide».

También hay Cielo

Autor: Rosa Pich
Redakcja: Alabada
Rok: diciembre 2024
Liczba stron: 90

‘Influencer’ por casualidad

Compartir su testimonio y la manera en que Dios ha obrado en su vida le resulta algo natural. Cuenta que comenzó en Instagram casi por casualidad, siguiendo la sugerencia de un hijo, y que nunca buscó fama ni seguidores. Para ella, la clave está en mostrar la vida tal cual es, con sus alegrías, sus caídas y sus desafíos, como cuando su hijo Rafa enfrentó el cáncer: “el Señor ha querido mostrar a través de mi cuenta… otra manera de ver la enfermedad… sacar un lado un poco más humano y dar un granito de esperanza”. Rosa cree que, a través de su ejemplo y testimonio, puede transmitir consuelo, esperanza y motivación, ayudando a otros a enfrentar dificultades cotidianas y a valorar la vida familiar como un espacio donde la fe y la entrega se viven con autenticidad.

Con más de 123.000 seguidores en su cuenta @comoserfelizconunodostreshijos, sus publicaciones muestran tanto el caos como la diversión de convivir con 15 hijos. Es a lo que ella llama un «caos organizado»: un equilibrio entre el desorden inevitable de una familia numerosa y su alegría desbordante. Rosa Pich cree que la gente la sigue porque refleja la vida real, sin filtros, mostrando tanto los retos como las risas, los juegos improvisados y las anécdotas que llenan su hogar. Ese caos, lejos de ser negativo, genera optimismo, creatividad y cercanía, y transmite que, aunque la vida no sea perfecta, la convivencia familiar puede ser divertida, enriquecedora y profundamente humana.

Więcej
Biuletyn informacyjny La Brújula Zostaw nam swój e-mail i otrzymuj co tydzień najnowsze wiadomości z katolickim punktem widzenia.