España

Mons. Argüello: “normalizar el aborto es normalizar el darwinismo social” 

La plenaria de los obispos españoles ha comenzado este martes, un día después de la vista de la Comisión Ejecutiva al Papa León XIV, con varios temas sobresalientes.

Maria José Atienza·18 de noviembre de 2025·Tiempo de lectura: 4 minutos
Mons. Argüello aborto

Mons. Luis Argüello ©Conferencia Episcopal Española

Los obispos españoles se reúnen en Madrid hasta el próximo viernes. Se trata de la primera asamblea bajo el pontificado del Papa agustino, que el lunes 17 de noviembre recibió a los miembros de la Comisión Ejecutiva. 

En su tradicional discurso de apertura, el presidente los obispos españoles, Luis Argüello, no ha evitado varios de los temas que marcan estos días de reunión tanto porque sean materia de trabajo como por la actualidad bajo la que se desarrolla esta Plenaria. 

El renacer católico ¿moda manipulable?

Uno de los temas que Argüello no ha querido olvidar es el renacer espiritual que, en los últimos años, parece haber tomado fuerza en España. En este sentido, ha destacado que “Existen señales que advierten de que lo católico está de moda o, si se prefiere, de que hay una vuelta a coordenadas espirituales que parecían proscritas. El proceso es constante y va en aumento” y ha puesto como ejemplo el disco de la cantante Rosalía, Luz o la película “Los Domingos “. 

Esta vuelta a la fe ha sobrevolado gran parte de los primeros temas de este discurso en el que el presidente de los obispos ha querido advertir que “la escucha más intensa del rumor de Dios y el «giro católico» pueden ser una moda u objeto de manipulación ideológica del desconcierto y las dificultades que viven hoy los jóvenes”, y ha atacado el “‘complejo tecnológico autoritario’ que tiene en el vicepresidente James David Vance, converso católico, su enlace político. Con todo ello, emerge con fuerza el poder del dinero y de los algoritmos al servicio del dinero y del poder”. 

Aborto, el tema “escondido” por los poderes sociopolíticos

“En las últimas semanas ha reaparecido el tema del aborto de diversas maneras: pretensión de elevar a rango constitucional este supuesto derecho; la objeción de conciencia del personal sanitario; la información a las madres de todo lo que significa la intervención que provoca el aborto; datos ofrecidos por el Ministerio de Sanidad, en 2024 se registraron 106.173 abortos y 322.034 nacimientos”. Con estos datos, ha abordado el presidente de los obispos la terrible realidad del aborto en España. 

Argüello ha citado a Matthieu Lavagna, entrevistado por Omnes hace unas semanas que destaca en su libro “La razón es provida” como “atreverse a hablar de ello en público se ha vuelto un tabú, casi una intromisión en la vida privada de las personas. Afirmar públicamente que el aborto es objetivamente inmoral, pues supone poner fin a la vida de una persona distinta de su madre y de su padre, es arriesgarse a escuchar fuertes descalificaciones personales, sociales y políticas: «¿Cuestionar esta conquista?, ¿dudar de este derecho? Es el paroxismo del pensamiento fascista y autoritario que merece la inmediata etiqueta de extrema derecha»”. 

El presidente de la Conferencia Episcopal Española ha recordado que “basta abrir cualquier manual de embriología médica para ver que los científicos afirman con unanimidad que desde el momento de la fecundación se crea un organismo humano vivo e independiente en el cuerpo de la madre con un patrimonio genético propio. No es preciso acudir a la Biblia para afirmarlo, aunque nos aporte que su dignidad es sagrada y que está dotado de alma inmortal”. 

El arzobispo de Valladolid ha puesto el dedo en la llaga en dos asuntos clave en este tema: el ocultamiento de la realidad, egoísmo y consecuencias del aborto “bajo la alfombra” y el servilismo de ciertos comités de bioética “al servicio de la biopolítica”. 

Asimismo, ha señalado que en cada embarazo hay que tener en cuenta no solo al no nacido sino a sus padres y circunstancias. Por ello, ha querido “tender desde aquí una mano de cercanía a las madres embarazadas para que no duden en solicitar ayuda si han de abordar el drama de un embarazo quizá no deseado; que la solución a una situación, tantas veces muy difícil de sobrellevar sola, no sea la eliminación de la vida que está en su seno”. En este sentido ha denunciado que “la normalización del aborto expresa la normalización del darwinismo social” en el que no todas las vidas valen lo mismo.  

“La Iglesia no patrocina ninguna forma política” 

Otro de los temas abordados en el discurso del presidente de los obispos españoles ha sido el aniversario de la muerte de Francisco Franco y el inicio de la democracia en España. En este punto, Mons. Luis Argüello ha recordado como “hace cincuenta años la mayoría de los obispos de España, hombres que habían conocido guerra y posguerra, dedicaron a Franco palabras de elogio y agradecimiento”, sin evitar el desarrollo desigual de la relación de los obispos españoles con el régimen franquista. 

Especialmente claro ha sido el discurso cuando el presidente de los obispos ha citado al cardenal Tarancon cuando en su homilía del 27 de noviembre en los Jerónimos, destacaba que “la fe cristiana no es una ideología política ni puede ser identificada con ninguna de ellas, dado que ningún sistema social o político puede agotar toda la riqueza del Evangelio ni pertenece a la misión de la Iglesia presentar opciones o soluciones concretas de Gobierno en los campos temporales de las ciencias sociales,económicas o políticas. La Iglesia no patrocina ninguna forma ni ideología política y si alguien utiliza su nombre para cubrir sus banderías, está usurpándolo”. El presidente de los obispos españoles ha pedido que “los próximos tres años deberían ser de ‘purificación de la memoria’ contaminada por los sesgos ideológicos de las leyes de memoria histórica y democrática que, justamente, quieren rehabilitar y honrar a víctimas de la dictadura y enterrar dignamente a quien seguían en fosas y cunetas, pero son, principalmente, un instrumento de polarización ideológica al servicio de los intereses políticos del presente más que cauce para ahondar en la reconciliación que los años de la Transición lograron, en gran parte”. 

No basta ser objetor de conciencia 

El presidente de los obispos españoles ha animado especialmente a los fieles laicos a estar presentes en la vida pública. En este sentido, ha resalta que que “no basta ser objetor de conciencia. Hay que promover conciencia desde la propia conciencia”.  

Casi cerrando d el discurso y “fuera de carta”, Mons. Argüello ha querido apuntar que las últimas informaciones relativas a supuestos casos de abuso dentro de la Iglesia “aviva en nosotros el deseo de seguir impulsando el trabajo para eliminar estas conductas desde dos ámbitos: La presunción de inocencia, también para los miembros de la Iglesia, y también la libertad de denuncia y su curso” en el caso de que se considere cierta.

Leer más
Newsletter La Brújula Déjanos tu mail y recibe todas las semanas la actualidad curada con una mirada católica