El Papa ha podido conversar telefónicamente con el primer ministros de Israel, Benjamin Netanyahu, tras el ataque perpetrado ayer por el ejército israelí contra la Iglesia de la Sagrada Familia de Gaza, que causó la muerte de tres personas e hirió a otras, algunas de gravedad. Así lo ha informado la Oficina de Prensa de la Santa Sede en un comunicado.
En esta conversación, según reza la nota, el Papa ha reiterado su llamamiento a un alto el fuego inmediato y la reactivación de un proceso de negociaciones de paz para la zona.
León XIV ha trasladado al mandatario israelí su preocupación por la situación humanitaria de la población de Gaza y ha querido subrayar «la urgencia de proteger los lugares de culto y especialmente a los fieles y a todas las personas en Palestina e Israel».
Conversación con el Patriarca de Jerusalén
Esta conversación con la autoridad política no ha sido la única que el Papa ha tenido en las últimas horas para conocer y mostrar su disposición de ayuda ante la situación de la guerra que, desde hace más de un año, asola Tierra Santa.
El pontífice ha podido conversar con el Cardenal Pierbattista Pizzaballa, Patriarca Latino de Jerusalén poco antes de que éste llegara a la iglesia atacada.
El Cardenal ha acudido a la zona del ataque junto con Su Beatitud Teófilo III, Patriarca Ortodoxo Griego de Jerusalén, «como parte de una delegación eclesiástica, expresando la solicitud pastoral compartida de las Iglesias de Tierra Santa y su preocupación por la comunidad de Gaza», como ha informado el Patriarcado latino de Jerusalén.
El cardenal Pizzaballa ha querido así evaluar «personalmente las necesidades humanitarias y pastorales de la comunidad, para ayudar a guiar la presencia y la respuesta continuas de la Iglesia».
Además, en estas últimas horas y a petición del Patriarcado Latino, y en coordinación con socios humanitarios, «se aseguró el acceso para la entrega de asistencia esencial no solo a la comunidad cristiana, sino también al mayor número posible de familias. Esto incluye cientos de toneladas de suministros alimenticios, así como botiquines de primeros auxilios y equipo médico urgente. Además, el Patriarcado garantizó la evacuación de las personas heridas en el ataque a instituciones médicas fuera de Gaza donde recibirán atención médica».