A las 9:00 de esta mañana, se ha dado inicio a la Octava Congregación General en el Aula Nueva del Sínodo con la oración habitual. Más de 180 cardenales participaron en la sesión, incluidos más de 120 electores. El Vaticano ha informado de los principales temas abordados.
A lo largo de la mañana, 25 cardenales tomaron la palabra para exponer sus reflexiones y propuestas sobre el futuro de la Iglesia. Las intervenciones giraron en torno a temas fundamentales, destacando la urgencia de una evangelización profunda y eficaz, especialmente dirigida a las generaciones más jóvenes. Se subrayó la visión de una Iglesia fraterna y misionera, siguiendo el impulso del pontificado del Papa Francisco.
Algunos temas
Una atención especial se dedicó a las Iglesias orientales, muchas de ellas marcadas por el sufrimiento, pero también por un testimonio de fe ejemplar. Asimismo, varios cardenales insistieron en la necesidad de comunicar el Evangelio con autenticidad y coherencia en todos los niveles de la vida eclesial, subrayando que el amor fraterno es el primer anuncio, como enseña el Evangelio.
También se abordaron con claridad temas dolorosos como los abusos sexuales y los escándalos financieros. Según informó Matteo Bruni, director de la oficina de prensa de la Santa Sede, estos asuntos fueron tratados como «una herida» que debe mantenerse abierta para garantizar una conciencia constante del problema y promover caminos concretos de sanación.
Otros temas tratados incluyeron la centralidad de la liturgia, la importancia del Derecho Canónico y el valor de la sinodalidad como expresión de misión y colegialidad, así como la necesidad de responder al secularismo con firmeza pastoral.
La sesión concluyó con una reflexión sobre la continuidad espiritual y pastoral entre los pontificados de San Juan Pablo II, Benedicto XVI y el Papa Francisco, y sobre el papel de la Eucaristía en la tarea evangelizadora.
Por otro lado, se ha confirmado que dos cardenales electores no participarán en el próximo Cónclave: el cardenal Antonio Cañizares Llovera, arzobispo metropolitano emérito de Valencia, y el cardenal John Njue, arzobispo metropolitano emérito de Nairobi. Aún se espera la llegada de cuatro cardenales electores a Roma.
En días anteriores
En los días anteriores, la oficina de prensa vaticana ha explicado que los cardenales han analizado la situación financiera de la Santa Sede, que cuenta con un déficit de 83,5 millones de euros registrado en 2023, lo que ha generado preocupación sobre la sostenibilidad económica de la Iglesia y la necesidad de una gestión más transparente y eficiente.
Los cardenales han reconocido la existencia de divisiones significativas dentro de la Iglesia, especialmente en torno a la sinodalidad y las reformas impulsadas durante el pontificado de Francisco. Esta polarización se considera una «herida» que requiere atención y sanación.
Sobre los abusos sexuales y escándalos financieros, se ha abordado la necesidad de mantener viva la conciencia sobre estos problemas, considerados como heridas abiertas, para identificar caminos concretos hacia su curación y evitar que se repitan en el futuro.
Capilla sixtina
Finalmente, se informó que esta mañana se instaló la chimenea en el techo de la Capilla Sixtina, símbolo clave en el proceso del Cónclave. La capilla permanece cerrada al público desde el domingo, mientras se ultiman los preparativos para el inicio del proceso de elección papal.