Vaticano

El Papa León XIV destaca el derroche del amor de Dios y recuerda a Francisco

En su primera Audiencia general, celebrada en la Plaza de San Pedro, el Papa León XIV ha subrayado el derroche de amor de Dios por nosotros, al considerar la parábola del sembrador. Además, ha recordado con gratitud “al amado Papa Francisco”, y ha animado a rezar el rosario en este mes mariano.  

Francisco Otamendi·21 de mayo de 2025·Tiempo de lectura: 3 minutos
Papa León XIV

El Papa León XIV saluda a los peregrinos en la Plaza de San Pedro, antes de su primera audiencia general semanal. (CNS photo/Lola Gomez)

El Papa León XIV ha mantenido la mañana del 21 de mayo su primera Audiencia general en la Plaza de San Pedro, con más de cuarenta mil fieles, en la que ha meditado sobre la parábola del sembrador.

Algunas notas especiales de la Audiencia han sido “la gratitud a nuestro amado Papa Francisco”; las palabras en inglés a los peregrinos de lengua inglesa; su invitación a rezar el Rosario por la paz en este mes de mayo mariano, formulada a los fieles de lengua portuguesa (con referencia expresa a la Virgen de Fátima) y a los de lengua árabe; y el saludo tras la Bendición a diversas personalidades eclesiásticas, a las que ha recibido de pie, con un apretón de manos.

También ha rezado por la paz, con mención expresa a la Franja de Gaza. Se ha detenido en especial en la necesidad de que llegue la ayuda humanitaria, en especial a los niños, ancianos y enfermos, y ha añadido que “estamos llamados a sembrar la esperanza y construir la paz”.

Gratitud al Papa Francisco

Las palabras sobre el Papa Francisco han sido las siguientes: “Y no podemos terminar nuestro encuentro sin recordar con tanta gratitud a nuestro amado Papa Francisco, que hace apenas un mes regresó a la casa del Padre”.

El nuevo Papa León XIV ha manifestado que reanuda el ciclo de catequesis del Año Jubilar ,‘Jesucristo, nuestra esperanza’, y ha centrado su meditación en el tema ‘El sembrador les hablaba de muchas cosas en parábolas’, recogido de san Mateo, 13.

Catequesis sobre Jesucristo, nuestra esperanza

“Me alegra darles la bienvenida en mi primera audiencia general. Retomo el ciclo de catequesis jubilares sobre el tema ‘Jesucristo, nuestra esperanza’, iniciado por el Papa Francisco”, ha señalado.

“Hoy seguiremos meditando sobre las parábolas de Jesús, que nos ayudan a recuperar la esperanza, porque nos muestran cómo obra Dios en la historia”.

Y se ha detenido en “una parábola un poco particular, porque es una especie de introducción a todas las parábolas. Me refiero a la del sembrador (cf. Mt 13,1-17). En cierto sentido, en este relato podemos reconocer la forma de comunicarse de Jesús, que tiene mucho que enseñarnos para el anuncio del Evangelio hoy”.

El Papa León XIV ha manifestado: “Las parábolas son un modo en el que el Señor nos comunica su Palabra para que esta nos cuestione e interpele, provocando en nosotros una respuesta al interrogante que subyace en la narración que nos cuenta: ¿Dónde me ubico yo en este relato? ¿Qué le dice a mi vida?”

El cálculo no vale en el amor

Al comentar la parábola del sembrador, el Papa ha señalado que se trata de un “sembrador, bastante original, sale a sembrar, pero no se preocupa de dónde cae la semilla. La arroja incluso donde es improbable que dé fruto”.

“Estamos acostumbrados a calcular las cosas —y a veces es necesario—, ¡pero esto no vale en el amor! La forma en que este sembrador «derrochador» arroja la semilla es una imagen de la forma en que Dios nos ama”, ha manifestado el Papa.

“Dios confía y espera que tarde o temprano la semilla florezca”, ha reiterado. “Él nos ama así: no espera a que seamos el mejor terreno, siempre nos da generosamente su palabra”.

Van Gogh, ‘El sembrador al atardecer’, imagen de esperanza

El Pontífice se ha referido aquí a “ese hermoso cuadro de Van Gogh: ‘El sembrador al atardecer.’ Esa imagen del sembrador bajo el sol abrasador me habla también del esfuerzo del campesino. Y me llama la atención que, detrás del sembrador, Van Gogh haya representado el trigo ya maduro. Me parece una imagen de esperanza: de una forma u otra, la semilla ha dado fruto. No sabemos muy bien cómo, pero es así. 

Finalmente, León XIV ha alentado a “pedir al Señor la gracia de acoger siempre esta semilla que es su palabra. Y si nos damos cuenta de que no somos terreno fértil, no nos desanimemos, sino pidámosle que siga trabajando en nosotros para convertirnos en terreno mejor”.

El autorFrancisco Otamendi

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