– Cindy Wooden, Ciudad del Vaticano, CNS
En el Ángelus de la solemnidad de Jesucristo Rey del Universo, el Papa León ha manifestado su “inmensa tristeza por la noticia del secuestro de sacerdotes y estudiantes en Nigeria y Camerún. Siento un profundo dolor, especialmente por los numerosos jóvenes secuestrados y por sus angustiadas familias”.
El Pontífice ha efectuado “un vehemente llamamiento para la liberación inmediata de los rehenes” y ha instado “a las Autoridades competentes a que adopten las medidas necesarias para conseguirla. Oremos por estos hermanos y hermanas nuestros, y para que las iglesias y las escuelas sigan siendo siempre y en todo lugar, espacios seguros y de esperanza”.
Como es sabido, hombres armados secuestraron hace dos días a más de 300 estudiantes y 12 profesores de una escuela católica nigeriana. Los estudiantes secuestrados eran hombres y mujeres y tenían entre 10 y 18 años, dijo la Asociación Cristiana de Nigeria en un comunicado.
Carta ‘In unitate fidei’
El Papa León XIV dijo también que “ya está cerca mi viaje apostólico a Turquía y Líbano. En Turquía se celebrará el 1700 aniversario del Concilio de Nicea. Por ello, hoy se publica la Carta apostólica ‘In unitate fidei’, que conmemora este histórico acontecimiento». Pueden encontrar información sobre la carta y su texto aquí.
Por otra parte, el Pontífice añadió en el Ángelus que “hoy se celebra la Jornada Mundial de la Juventud en las diócesis de todo el mundo. Bendigo y abrazo espiritualmente a los que participan en las diversas celebraciones e iniciativas. En la fiesta de Cristo Rey, rezo para que cada joven descubra la belleza y la alegría de seguirlo a Él, el Señor, y de dedicarse a su Reino de amor, de justicia y de paz.
Jubileo de los coros
Los coros de las iglesias ayudan a que todos en la Misa experimenten armonía mientras expresan el amor a Dios a través de la belleza de la música, dijo el Papa en la homilía de la Misa del Jubileo.
Al celebrar este Jubileo de los Coros, festividad de Cristo Rey, el Papa dijo que el «poder de Cristo es el amor, su trono la Cruz, y a través de la Cruz su Reino resplandece en el mundo».
Este día festivo se celebra en las diócesis de todo el mundo la Jornada Mundial de la Juventud, que estuvo presente en las oraciones de la Misa y en las palabras del Papa al final de la liturgia.
Durante la Misa, los asistentes oraron por los jóvenes, para que “siguiendo a Cristo, nuestro Señor y Rey”, “enciendan el mundo con su ardor y creatividad, para que puedan dar testimonio de la humilde fuerza del Evangelio”.
El Papa León XIV dijo que quería saludar y abrazar espiritualmente a todos los jóvenes que celebran en sus diócesis. “En la fiesta de Cristo Rey, rezo para que cada joven descubra la belleza de la alegría de seguirlo a él, el Señor, y se dedique a su reino de amor, justicia y paz”.
El amor debe inspirar a los coros
En su homilía de la misa, dijo que el amor debe inspirar a los coros. “Ser parte de un coro significa avanzar juntos”, dijo, “tomando de la mano a nuestros hermanos y hermanas y ayudándolos a caminar con nosotros”.
«Se trata de cantar juntos las alabanzas de Dios, consolar a los hermanos en el sufrimiento, exhortarlos cuando parecen ceder al cansancio y animarlos cuando las dificultades parecen prevalecer», afirmó el Papa.
Un coro parroquial es un poco como la iglesia misma, dijo. Se esfuerza por recorrer la historia cantando alabanzas a Dios.
“Aunque a veces este camino está lleno de dificultades y pruebas, y se alternan momentos de alegría con otros más cansados”, añadió el Sucesor de Pedro, “el canto aligera el camino y trae alivio y consuelo”.
La música ayuda a expresar lo que llevamos en el corazón
El Papa León, que entona oraciones y canta himnos con entusiasmo, dijo que la música ayuda a las personas a “expresar lo que llevamos en lo profundo de nuestros corazones y lo que las palabras no siempre pueden transmitir”.
“La música puede expresar toda la gama de sentimientos y emociones que surgen en nuestro interior”, señaló. “El canto, en particular, constituye una expresión natural y refinada del ser humano: mente, sentimientos, cuerpo y alma se unen para comunicar los grandes acontecimientos de la vida”.
El servicio litúrgico de un coro en la Misa “es un verdadero ministerio que exige preparación, compromiso, comprensión recíproca y sobre todo una profunda vida espiritual, para que cuando se canta, se rece y se ayude a rezar a todos los demás”, dijo el Papa.
Si bien un coro es una “pequeña familia de individuos unidos por su amor a la música y el servicio que ofrecen”, subrayó que deben recordar que en la Misa toda la comunidad es parte de la familia.
Sin ostentación
“No están en el escenario, sino que forman parte de esa comunidad, esforzándose por ayudarla a crecer en unidad inspirando e involucrando a sus miembros”, les dijo el Papa. “Dedíquense a facilitar la participación del pueblo de Dios, sin ceder a la tentación de la ostentación, que impide a toda la asamblea litúrgica participar activamente en el canto”.
Y el Papa instó a los miembros del coro a esforzarse por asegurarse de que sus propias vidas espirituales sean “siempre dignas del servicio que realizan, para que su ministerio pueda expresar auténticamente la gracia de la liturgia”.




