En pocos días el gobierno iraní inaugurará oficialmente la nueva estación de metro “Santa Virgen María” (Hazrat Maryam Moghaddas), ubicada en la Línea 6 del Metro de Teherán. Esta estación, la vigésimo quinta de dicha línea, destaca tanto por su diseño arquitectónico como por su simbolismo religioso y cultural.
Situada en las cercanías de la Catedral de Sarkis de los Armenios, uno de los templos cristianos más representativos de la capital iraní, la estación rinde homenaje a la figura de la Virgen María, venerada tanto por cristianos como por musulmanes chiitas. En sus muros, los viajeros pueden apreciar murales artísticos que reflejan la convivencia entre las comunidades religiosas del país y la importancia de la Virgen María en la tradición islámica.

En Irán, el Estado reconoce y garantiza la libertad de culto a las minorías religiosas históricas, como los cristianos, judíos y zoroastrianos, sin embargo, la legislación iraní no permite la evangelización ni la conversión desde el islam al cristianismo.
La inauguración de esta estación pone de relieve la devoción compartida hacia la Virgen María, figura respetada en el islam chiita como madre del profeta Jesús (Isa). No es inusual encontrar estatuas y parques dedicados a la Virgen en distintas partes del país, como el Parque de la Santa María en el norte de Teherán.

Con esta nueva estación, el Metro de Teherán continúa expandiendo su red y, al mismo tiempo, ofrece un espacio que refleja una mínima diversidad religiosa y cultural de la sociedad iraní.
