«La Iglesia siempre ha sido llamada a ser un signo de esperanza mediante la proclamación del Evangelio con palabras y obras. De manera especial durante este Año Santo, estamos llamados a ser signos tangibles de esperanza para aquellos hermanos y hermanas que atraviesan cualquier tipo de dificultad», afirmó el Papa León XIV en un videomensaje dirigido a los participantes de la 143ª Convención Suprema de los Caballeros de Colón, que se celebra del 5 al 7 de agosto de 2025 en Washington D. C., Estados Unidos. Las palabras del Pontífice también alcanzan a quienes participan de manera virtual en las ceremonias inaugurales.
El Papa recordó que el Beato Michael McGivney, fundador de los Caballeros, comprendió profundamente esta misión: “Él vio las muchas necesidades de los católicos inmigrantes y buscó aliviar la pobreza y el sufrimiento a través de su fiel celebración de los sacramentos, así como mediante la ayuda fraterna, ayuda que continúa hasta el día de hoy”, expresó.
Bajo el lema de este año, “Heraldos de la Esperanza”, el Pontífice valoró la labor de los Caballeros por reunir a hombres en torno a la oración, la formación y la fraternidad, destacando además las numerosas obras caritativas impulsadas por los consejos locales alrededor del mundo.
“En particular —añadió—, su generoso servicio a poblaciones vulnerables —incluidos los no nacidos, madres embarazadas, niños, personas desfavorecidas y quienes sufren por el azote de la guerra— brinda esperanza y sanación a muchos y continúa el noble legado de su fundador”.
Finalmente, el Sucesor de Pedro encomendó el evento a la intercesión de la Santísima Virgen María, Madre de la Iglesia, y del Beato McGivney, impartiendo con cordialidad la Bendición Apostólica.
Programa de actividades: fe, encuentro y servicio
Durante los días de convención, los participantes disfrutarán de una intensa agenda que combina momentos litúrgicos, conferencias, exhibiciones, oración y encuentros fraternos. Desde el 2 de agosto, se instalarán los burós de información y comenzará la recepción oficial, mientras que los días previos al inicio formal estarán marcados por la Adoración Eucarística, la inscripción de delegados, y la tradicional exhibición Knights Gear.
El 5 de agosto, los delegados asistirán a la Misa de Apertura en la Basílica del Santuario Nacional de la Inmaculada Concepción, seguida por la sesión inaugural de negocios, abierta también a familiares. El evento continuará con la Cena de Estados y el caucus de delegados.
Durante el 6 y 7 de agosto, se celebrarán la Misa de la Convención, la Misa Conmemorativa, un programa especial para las damas, el Sacramento de Reconciliación, y espacios para la veneración de reliquias. También habrá múltiples momentos de fraternidad, oración y formación espiritual.