Matina, nombre artístico de Maite Zuazola, es una cantante, compositora y directora musical bilbaína que ha convertido su talento en un instrumento de evangelización. Formada desde niña en música clásica y con una amplia trayectoria en géneros como el jazz, el soul o el teatro musical, encontró en el góspel su verdadera vocación: cantar a Dios y transmitir la alegría del Evangelio a través de la música.
En 2012 fundó en Madrid el coro Gospel Libertad, una comunidad de voces unidas por la fe y la pasión por la música cristiana. Bajo su dirección, el grupo ha crecido hasta convertirse en un referente del góspel católico en España, actuando en iglesias, festivales, eventos solidarios y programas de televisión. Su misión es clara: «cantar a Dios en Espíritu y Verdad y, a través de nuestras canciones, contagiar a las almas de la alegría de la salvación, tanto así que sus cuerpos deseen bailar y expresarse”.
En esta entrevista, Matina comparte su testimonio de fe, su camino de conversión y la inspiración de la que nació el proyecto Matina y Gospel Libertad, ganador del Premio Religión en Libertad Música Cristiana este 2025.
Maite , ¿Cómo describirías el momento o proceso en el que sentiste que Jesús te llamaba personalmente a darle gloria?
–Fue una sorpresa su llamada, y la misión que me encomendaba. Jesús me llevó de vuelta a casa, como un día le pedí. Me llevó de regreso a La Iglesia y a trabajar desde allí. Mi primera llamada fue hacia la música con 7 años.
Mi abuela paterna era maestra de escuela, profesora de música, y mujer de profunda fe. Un día en su casa de Portugalete (Vizcaya), cuando tocaba el piano, sentí una fuerza que me atraía hacia esa música y me coloqué a su lado mientras tocaba. Me preguntó si yo quería aprender y le dije que sí. Luego he entendido que esa fuerza fue el Espíritu santo.
Mi abuela se convirtió en mi mentora. Me enseñaba solfeo y me llevaba de la mano a la Iglesia, y así durante 4 años que conviví con ella. Esto fue clave.
Pero al dejar su casa abandoné la Iglesia. Terminé mi carrera de piano y descubrí la voz. Trabajé en el mundo artístico durante años hasta que un día me di cuenta que no era suficiente, había un vacío en mi interior que no podía llenar. Entonces pensé que quería formar una familia. Abandoné mi vida en Madrid y me casé.
Comenzó mi desierto. En ese tiempo clamé a Dios, porque sentía que mi matrimonio, en el que había puesto todas mis esperanzas abandonando incluso mi carrera musical para crear una familia, no iba bien. Hubo duras pruebas que sólo se superan en una verdadera unión. Para mí el matrimonio es sagrado.
En la tribulación comencé a hablar con Dios. Jesús me atraía. Recordé la música góspel que escuchaba mi padre… Echaba de menos la música. Me echaba de menos a mí misma. Después de 10 años, la providencia me devolvió a Madrid, y entonces sentí que regresaba… En mi alegría acudí a la iglesia más cercana con mi hijo mayor, que tenía en ese momento 8 años. Durante la misa, recibí la llamada. Y volví, ¡a la fe y a la música! Fue una época increíble, era feliz a pesar de mi situación personal.
Mirando atrás he visto todo el proceso. Dios me preparó con paciencia y esperó mi regreso. Llegaría el día en que todo confluiría para la misión, y así fue.
¿Cómo nació el coro Góspel Libertad?
–El coro de Góspel nació fruto de la conversión. Una inspiración total. Lo propuse en la parroquia y se me abrió la puerta de par en par.
La música cristiana, y en concreto la música góspel, sintoniza perfectamente con la alegría de ser cristiano. Reanudé mi faceta de compositora, aunque ya sin remedio hacia la música de Dios. Fue todo un descubrimiento. La música cristiana era una necesidad que expresaba, y continúa expresando, lo que lleva mi corazón.
El góspel tiene raíces afroamericanas y protestantes. ¿Qué te movió a traducir esa espiritualidad musical al contexto católico? ¿Qué conserva y qué transforma el góspel cuando se canta desde la fe católica?
–La música góspel es música de alabanza con mucho ritmo y calidad. Sus preciosas melodías, con un ritmo brillante, son una invitación a vivir la fe en la alegría y en la esperanza de la salvación gratuita que nos ofrece nuestro Señor Jesucristo. Loar a Dios en espíritu y verdad no tiene denominación.
La alabanza católica ofrece incluso más que la alabanza protestante, pues puede alabar la eucaristía y a la Madre de Dios. En mi caso tengo composiciones de estas características como es El Regalo más grande, referido a la eucaristía, Cinco letras que alaba a María y el Santo góspel, que es un homenaje al Santo de la Misa. Otros temas de nuestro último disco son salmos hechos canción como son Confío en ti basado en el salmo 91 y Cantad al Señor, que es el salmo de Isaías 12. Incluso tenemos la oración del Padrenuestro a ritmo de góspel.
¿Qué significa para ti evangelizar a través de la música? ¿De qué forma el góspel puede ser un lenguaje misionero para la sociedad actual?
–Evangelizar a través de la música es nuestra misión para llevar a cabo la orden de nuestro Señor: “Id y proclamad el evangelio…” . El Espíritu Santo derrama sus dones y carismas para que los pongamos al servicio. Se podría decir que el góspel tiene un carisma especial, pues es una música poderosa que traspasa. Nadie se queda indiferente después de un concierto góspel expresado con el corazón. Esto es clave. Por desgracia hay muchos coros de góspel que no viven lo que cantan, por lo que tampoco lo transmiten. No hay resultados si no hay intención. No son coros para la evangelización. El reto de Matina y Góspel Libertad es ser un auténtico coro del Evangelio.
¿Cómo integras la oración y la vida espiritual personal en tu labor artística y en la dirección del coro?
–Precisamente la labor del coro me mantiene en constante oración. Preparar las canciones, sacar las diferentes voces, las armonías, adaptar las letras al castellano o componer nuevas canciones son mi medio para estar en continuo contacto con el Señor. Verdaderamente siento que es un privilegio contar con este don tan maravilloso que es mi conexión directa e inmediata.
¿Cómo ves el crecimiento del góspel católico en España y en el mundo? ¿Crees que puede llegar a ser un movimiento evangelizador de gran alcance?
–En España hay coros de góspel, por supuesto, pero no católicos dedicados a la evangelización. Matina y Góspel Libertad son una excepción.
Sí creo que podría ser un movimiento evangelizador potente, como así ya sucede en otras denominaciones. En España también podría hacer una gran labor siempre que se realizase con calidad, entusiasmo verdadero y un apoyo real. Por desgracia hay bastante carencia de esto último, cosa que hace que la labor sea a veces desgastadora y una auténtica lucha.




