La tarde de este sábado, durante el Jubileo de la espiritualidad mariana, con la presencia en Roma de la estatua original de la Virgen de Fátima, cada decena del Rosario irá acompañada de una lectura. Será un pasaje del capítulo VIII de la constitución ‘Lumen Gentium’ del Concilio Vaticano II, que convocó san Juan XXIII. Se desea subrayar de este modo la conmemoración del aniversario de la apertura del Concilio Vaticano II aquel día de 1962.
San Juan XXIII demostró inmediatamente que era un innovador, explica la agencia vaticana. Convocó el Sínodo Romano, estableció la Comisión para la revisión del Código de Derecho Canónico, “Pero sobre todo, sorprendentemente, desde la Basílica de San Pablo Extramuros, el 25 de enero de 1959, convocó el Concilio Ecuménico Vaticano II”. El objetivo no era cambiar la doctrina católica ni definir nuevas verdades de fe, señala Vatican News. «Sino volver a presentar los contenidos de la fe al hombre contemporáneo, para encontrar respuestas a los nuevos problemas y desafíos”.
Al servicio de la Santa Sede
Cuarto de 13 hijos, Ángelo Giuseppe Roncalli nació en Sotto il Monte, Bérgamo, el 25 de noviembre de 1881. En 1892 entró en el Seminario de Bérgamo y en 1896 se le admitió en la Orden Franciscana Seglar. De 1901 a 1905 estudió en el Pontificio Seminario Romano, y el 1° de agosto de 1904 se ordenó sacerdote.
El joven sacerdote fue secretario de su obispo G. M. Tedeschi, hasta que, en 1921, inició su servicio a la Santa Sede en las Obras Pontificias de la Propagación de la Fe. Después, el Papa le nombró representante de la Santa Sede en Bulgaria, Turquía y Grecia, en 1944 Nuncio en Francia, y en 1953 Patriarca de Venecia. El año 1958, al fallecer Pío XII, fue elegido Papa.
‘Mater et Magistra’, ‘Pacem in terris’
El Papa Roncalli escribió ocho encíclicas, entre las que se recuerda ‘Mater et magistra’, que presentó el magisterio social de la Iglesia 70 años después de la «Rerum novarum» (1961). Y «Pacem in terris», de 1963, sobre la paz y el orden social justo. Por cierto, una de ellas es ‘Grata recordatio’, sobre el rezo del santo rosario.
Fue beatificado por san Juan Pablo II durante el Gran Jubileo de 2000, y canonizado por el Papa Francisco el 27 de abril de 2014, junto a Juan Pablo II, en un día que se denominó el de los ‘cuatro Papas’, porque estuvo presente el Papa emérito Benedicto XVI.