Experiencias

Dos mujeres muy diferentes unidas por la Vida

Domtila, de Kenia, y Antonia, de Chile, son dos mujeres con recorridos vitales diversísimos. Nada las une en apariencia y, sin embargo, desde hace casi diez años trabajan juntas en la Fundación Maisha, apoyando a mujeres kenianas que deben afrontar el embarazo sin ningún apoyo y en condiciones de extrema pobreza.

Maria Candela Temes·25 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 4 minutos

Domtila y Antonia son dos mujeres con recorridos vitales diversísimos. Una está acercándose a la ancianidad, la otra en el inicio de la vida adulta. Una es originaria de Kibera -uno de los asentamientos humanos más pobres del planeta-, la otra viene de un entorno acomodado de Santiago de Chile. Una es una maestra jubilada y la otra una enfermera matrona. No las une la procedencia, ni el color de piel, ni una red de amistades, ni la profesión. Y, sin embargo, desde que se conocieron hace ahora casi diez años, son inseparables. 

Las biografías de Domtila y Antonia se han visto entrelazadas por una misma pasión y un deseo: ayudar a otras mujeres en situación de vulnerabilidad y hacer del mundo un lugar donde cada vida es acogida como un don, con respeto y cuidado. Fruto de este compromiso común nació la Fundación Maisha, que en swahili significa Vida.

La historia de “Mamá Domtila”

Domtila Ayot, más conocida como “Mamá Domtila”, es una fuerza de la naturaleza. Al hablar desprende una energía que la llena de juventud. Se va apasionando y se le atropellan las palabras y las historias. Nos encontramos con ella en Nairobi, y con gran generosidad va compartiendo sus recuerdos y nos abre las puertas de su casa.

Domtila, quería comenzar pidiéndole que se presente.

—Procedo de Kibera, en Nairobi, el slum más grande de Kenia y el segundo más grande de África. Tengo 76 años, seis hijos y varios nietos. He trabajado durante años, hasta mi jubilación, como profesora en una escuela católica. 

¿Cómo comenzó su compromiso en defensa de la vida incipiente?

—Un día, paseando por mi barriada, vi algo colgando de un árbol, tenía una forma extraña. Sólo al acercarme pude comprobar que era un feto humano. Entre las callejuelas de Kibera no es infrecuente encontrarse a fetos abortados, abandonados a la intemperie. Me sentí interpelada, así que fui a mi casa y escribí mi número de teléfono en unas tiras de papel. Luego las fui pegando en diferentes lugares del barrio, ofreciendo mi ayuda. De este modo nació el “Centro de Esperanza Edel Quinn”, para embarazos en crisis y acompañamiento de la mujer.

¿Qué lleva a las mujeres a optar por un aborto clandestino, con todos los riesgos que esto conlleva?

—Esos embarazos son, en muchos casos, el fruto no deseado de abusos y violaciones -generalmente ocurridas en el ámbito intrafamiliar-, o de relaciones esporádicas entre jóvenes que no han recibido ninguna educación sexual. Muchas de las que acuden a esta práctica tan peligrosa son apenas adolescentes. Como maestra, me di cuenta de que necesitaban formación y ayuda, pues son muchas las mujeres de Kibera que deben afrontar el embarazo sin ningún apoyo y en condiciones de extrema pobreza. Los episodios de dolor y esperanza que he presenciado en estos años son incontables. 

Usted empezó desde el “Centro de Esperanza Edel Quinn”, sin apenas medios.

—En mi parroquia recibí una formación extensa en cuestiones de bioética en relación a la familia, la sexualidad y el inicio de la vida. Logré involucrar a toda mi familia en esta aventura. Al principio mi marido se resistía. Después él mismo me decía que en la tienda que regentábamos había sábanas u otros productos que podíamos donar. Hasta su fallecimiento fue un gran apoyo para mí. 

Antonia, una matrona sin fronteras 

En el año 2015, Domtila se encontraba en una encrucijada. Había renunciado a presidir el movimiento provida en la parroquia, a pesar de que había sido elegida una vez más por unanimidad. Deseaba seguir ayudando a muchas mujeres, pero se encontraba sin medios y necesitada de brazos. En ese momento Antonia Villablanca se cruzó en su vida.

Antonia, ¿cómo conociste a Domtila?

—En 2015 yo era estudiante de Enfermería y me preparaba para ser matrona. En un viaje solidario a Kenia desde Chile conocí a Domtila. Había ido como voluntaria con una amiga, Fernanda, que también es enfermera matrona, para trabajar en un hospital de bajos recursos. Allí me enteré de las pésimas condiciones en que muchas mujeres dan a luz en el país africano y supe de esta pequeña iniciativa local iniciada en Kibera.

¿Cuál es la situación de la maternidad en Kenia?

—En Kenia sólo el 40 % de los nacimientos ocurren dentro de los hospitales. La tasa de mortalidad materna es de 377 por cada 100.000 nacimientos, mientras que en los países desarrollados esa tasa se reduce a 12. Además, es el tercer país del mundo con mayor número de madres adolescentes, alcanzando una cifra de un 21 % de embarazos adolescentes en el país. Alrededor de 13.000 jóvenes dejan la escuela cada año a causa de un embarazo no planificado. Las tasas de aborto clandestino son altísimas, llegando a 30 abortos por cada 100 nacimientos. Ahora se está dando también un auge de la maternidad subrogada, pues no existe ninguna legislación restrictiva al respecto, y es una salida económica para muchas mujeres sin recursos. 

Como fruto de tu primer viaje a Nairobi, nació la Fundación Maisha.

—El encuentro con Domtila fue el inicio de una colaboración que desembocó en el nacimiento, en el año 2016, de la Fundación Maisha. Maisha en swahili quiere decir “vida”. La levantamos junto con otros tres amigos chilenos: Wenceslao, Sebastián y Julián. 

En un comienzo nació como una red de apoyo que buscaba acoger a las madres y a sus hijos durante el embarazo. Con el paso del tiempo la iniciativa se ha ido consolidando y ahora cubrimos cuatro programas: acogida, salud, educación sexual y afectiva, y sustentabilidad. 

Hay quienes critican a las iniciativas provida, alegando que se preocupan de las mujeres sólo durante el embarazo, pero después del parto abandonan a las madres y a los bebés a su suerte… 

—Maisha no sólo acompaña a las jóvenes antes, sino también después del parto. Estamos con ellas en el durante el embarazo y les damos herramientas para ser económicamente sostenibles e independientes. Ahora mismo Domtila vive en una casa alquilada por la fundación, situada en un barrio cercano a Kibera, donde unas 11 o 12 jóvenes que están en la última fase del embarazo se alojan con ella y permanecen ahí hasta la sexta semana después de dar a luz. 

Durante ese tiempo reciben charlas de formación en ámbitos diversos como salud y crianza, micro-emprendimiento o economía familiar. Cuando ya están en condiciones, regresan a sus hogares o, si la vuelta es insostenible, se les busca otro alojamiento. No solo no se las abandona, sino que los lazos que se crean han dado lugar a bonitas historias de amistad que continúan a lo largo de los años.

España

El papel de Ibáñez Martín y Albareda en la fundación del CSIC

Hoy, 24 de noviembre, se cumplen 85 de la puesta en marcha del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), pilar fundamental de la ciencia española. En esta entrevista Alfonso Carrascosa explica cómo se gestó este proyecto y quiénes fueron sus impulsores.

Eliana Fucili·24 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 6 minutos

En el panorama científico español, Alfonso Carrascosa se alza como un puente entre dos mundos a menudo percibidos como dispares: la ciencia y la fe. Su enfoque, que desafía la supuesta dicotomía entre ambas esferas, se nutre de un profundo conocimiento de la historia de la ciencia en España. 

Carrascosa, doctor en Ciencias Biológicas por la Universidad Complutense de Madrid, ha dedicado gran parte de su carrera a la microbiología. Un giro en su trayectoria lo condujo hacia la investigación de la historia de la ciencia. Su trabajo explora cómo la ciencia y la fe no sólo pueden coexistir, sino colaborar de manera fructífera, enriqueciendo el conocimiento humano.

En el marco del 85 aniversario del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), conversamos con él sobre los comienzos de la institución y los protagonistas que, tras la Guerra Civil, hicieron posible su creación. En los últimos años, ha publicado varios libros, entre ellos Iglesia Católica y ciencia en la España del Siglo XX, y dictado conferencias sobre los orígenes católicos del CSIC. Ha rescatado historias de científicos que realizaron su trabajo profesional sin renunciar a sus creencias. El 24 de noviembre de 1939, mediante Ley fundacional publicada en el Boletín Oficial del Estado (28 de noviembre de 1939), se crea el Consejo Superior de Investigaciones Científicas asumiendo las competencias y locales de la Junta para Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas (JAE)

¿Cuáles fueron los orígenes del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y el contexto histórico en el que se fundó?

El CSIC nace en 1939, en un contexto complejo marcado por el término de la Guerra Civil Española y el inicio del régimen franquista. Se crea como parte de un esfuerzo por reconstruir el panorama científico del país, continuando el legado de la llamada Edad de Plata de la ciencia española. Este período, que abarcó desde finales del siglo XIX hasta el primer tercio del siglo XX, fue fundamental para sentar las bases de la investigación y el desarrollo en España.

Es importante destacar que si bien la Edad de Plata se asocia a instituciones laicas como la Institución Libre de Enseñanza, este periodo no se reduce únicamente a ellas. La realidad es que la Edad de Plata albergó a científicos de diversas ideologías, incluyendo a figuras católicas como Joaquín Costa y Lucas Mallada, quienes formaron parte del regeneracionismo español. Su influencia fue clave en la creación de la Junta para Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas (JAE) en 1907. Este desarrollo institucional tuvo lugar en el contexto de la monarquía parlamentaria confesional católica de Alfonso XIII.

El CSIC, en este sentido, surge como un producto tardío de este movimiento regeneracionista, impulsado por personas formadas gracias a las becas de la JAE. Es decir, sus fundadores fueron miembros de la Edad de Plata, herederos indiscutibles de esa época.

¿Quiénes fueron las figuras clave que impulsaron la creación del CSIC?

La creación del CSIC el mismo año en que concluyó la Guerra Civil española, refleja el interés del Ministerio de Educación Nacional por recuperar y superar el nivel científico que España había alcanzado en el primer tercio del siglo XX. La Ley Fundacional del CSIC, promulgada el 24 de noviembre de ese año, fue obra tanto de José Ibáñez Martín, entonces ministro de Educación Nacional, como de José María Albareda Herrera, un científico de gran prestigio.

El CSIC simbolizó un paso decisivo en la renovación científica de la España de posguerra. Su liderazgo inicial estuvo en manos de un grupo de destacados científicos, todos católicos practicantes y figuras reconocidas de la Edad de Plata: José Ibáñez Martín, quien asumió la presidencia; José María Albareda Herrera, como primer secretario general; el químico Antonio de Gregorio Rocasolano, vicepresidente primero; el arabista y sacerdote Miguel Asín Palacios, vicepresidente segundo; y el ingeniero agrónomo Juan Marcilla Arrazola, vicepresidente tercero. Este equipo impulsó la misión del CSIC de revitalizar la ciencia en España y de abrir un nuevo capítulo en la historia de la investigación científica en el país.

¿De qué manera influyeron las experiencias personales y profesionales de José Ibáñez Martín y José María Albareda en su visión para fundar el CSIC?

José Ibáñez Martín estudió Letras, obteniendo dos licenciaturas. Sin embargo, cuando se encontraba en los cursos de doctorado, su padre falleció, dejando a la familia en una situación económica difícil. Ante esto, Ibáñez Martín decidió presentarse a las oposiciones para Catedrático de Instituto, logrando el primer puesto a nivel nacional. Poco después, inició una carrera política y fue elegido parlamentario en la Segunda República, representando a la Confederación Española de Derechas Autónomas. Además, formaba parte de la Asociación Católica de Propagandistas

Cuando estalló la Guerra Civil, Ibáñez Martín se encontraba en El Escorial con su familia. Al enterarse de que en Madrid estaban asesinando a políticos conservadores, optó por no regresar y, con su esposa embarazada y sus hijos, se refugió en la embajada de Turquía. En esas difíciles condiciones, su esposa dio a luz, pero el bebé falleció debido a la falta de higiene y recursos. Tras meses en condiciones extremas, la familia consiguió viajar a Valencia y luego embarcarse hacia Turquía, en un traslado respetado por las autoridades.

Durante el exilio, enfrentó dificultades económicas y fue depurado por el gobierno del Frente Popular, que cesó a los funcionarios que no se presentaron a sus puestos. En 1937, se trasladó a Burgos, donde tomó contacto con José María Albareda.

Por su parte, Albareda era un científico destacado que se había formado con becas de la Junta para Ampliación de Estudios, doctorándose en Farmacia y Química, y especializándose en edafología, una ciencia de gran importancia para el sector agrícola en España. Durante la guerra, Albareda también fue depurado por el gobierno republicano. Por entonces, conoció a Josemaría Escrivá, el fundador del Opus Dei, y en 1937 pidió la admisión como numerario. Al igual que Escrivá, Albareda sufrió persecuciones y se vio obligado a cambiar de residencia en varias ocasiones.

Junto a algunos de los primeros miembros del Opus Dei, Albareda ayudó a Escrivá a escapar de Madrid, llevándolo a través del Pirineo hasta Burgos. Fue en esta ciudad donde Albareda e Ibáñez Martín comenzaron a trabajar en la estructura del futuro CSIC. 

En 1959, Albareda fue ordenado sacerdote, aunque continuó toda su actividad profesional. Al año siguiente, fue nombrado primer rector de la Universidad de Navarra, cargo que ocupó hasta su fallecimiento. Al mismo tiempo, continuó desempeñando su labor como secretario general del CSIC, de manera altruista y sin recibir remuneración.

Tras la guerra, Ibáñez Martín fue nombrado Ministro de Educación Nacional y su experiencia e ideas lo llevaron a impulsar el CSIC. Albareda, con su experiencia como científico perfiló líneas generales del proyecto como la organización de algunos institutos y los investigadores que han de estar al frente de ellos, así como también sobre los temas de estudios científicos, nuevos ensayos y experimentos de investigación, becas, premios, etc.

¿Cuáles fueron los principales aportes de José María Albareda al CSIC y qué aspectos de su labor científica lo consolidaron como una figura destacada de su época?

José María Albareda desempeñó un papel fundamental en el fortalecimiento de las ciencias experimentales dentro del CSIC, destacando por su conocimiento profundo en investigación científica.  A través de su labor, logró conectar al CSIC con los centros de investigación más avanzados de Europa, posicionando a la ciencia experimental en un lugar central dentro de la institución. 

Además, Albareda logró reunir a un grupo destacado de químicos, físicos y biólogos dentro del CSIC, quienes trabajaron estrechamente en el desarrollo de estas disciplinas. Un ejemplo de esta cooperación fue la fundación del Centro de Investigaciones Biológicas, que se convirtió en un centro clave para la investigación científica en España. En este entorno, Albareda fomentó un ambiente de trabajo colaborativo, en el que científicos de diversas áreas compartían conocimientos y desarrollaban proyectos conjuntos.

Su apertura y neutralidad política también fueron aspectos notables de su liderazgo. En un contexto de tensiones políticas, Albareda formó un equipo diverso y evitó cualquier tipo de discriminación ideológica. Gracias a esta postura inclusiva, muchos científicos, incluso aquellos con ideologías opuestas al régimen, encontraron oportunidades de desarrollo en sus carreras basadas en su mérito científico. Esta actitud favoreció el crecimiento de áreas como la microbiología y la bioquímica en el ámbito nacional.

Su compromiso con la ciencia no se limitó a la investigación, sino que también impulsó la incorporación de la mujer a la investigación científica, un aspecto crucial en la historia del CSIC, donde las mujeres eran una minoría en la plantilla y desempeñaban principalmente tareas administrativas. Su visión y dedicación lo posicionaron como una figura clave en el desarrollo científico y educativo de su tiempo.

¿Cuál es el papel actual del CSIC en la ciencia española y cómo se mantiene como un referente en investigación a nivel global?

El CSIC, desde sus inicios fue una institución clave para la descentralización de la investigación, un objetivo prioritario de los impulsores como José Ibáñez Martín y José María Albareda. Este componente descentralizador fue un factor fundamental para el modelo organizativo del CSIC, que cuenta con una extensa red de centros en todas las comunidades autónomas de España. De hecho, el CSIC se ha consolidado hoy como la institución científica más importante de España, siendo reconocido por los españoles como el principal referente de la ciencia en el país.

A nivel global, el CSIC ocupa un lugar destacado entre las instituciones científicas más relevantes, figurando entre las tres más importantes de Europa y entre las diez primeras del mundo. Su prestigio es incontestable y su influencia sigue creciendo, consolidándose como una de las piedras angulares de la ciencia en España y un modelo de excelencia científica. Con un equipo cercano a las 15.000 personas, el CSIC ha sido y sigue siendo un verdadero motor del conocimiento en la investigación científica, heredero de una tradición que, aunque marcada por la diversidad ideológica de su época, sigue impulsando el desarrollo y la innovación en el presente.

El autorEliana Fucili

Centro de Estudios Josemaría Escrivá (CEJE) 
Universidad de Navarra

Iniciativas

El lugar de Andalucía donde puedes ver un centenar de belenes de todo el mundo

Cuando se acerca la época navideña es frecuente acudir a visitar belenes especialmente célebres, pero el museo más espectacular y grande del mundo se encuentra en un lugar inesperado en mitad de Andalucía.

Javier García Herrería·24 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 4 minutos

En mitad de la tierra andaluza se encuentra el museo de belenes más grande del mundo. Su ubicación en el municipio de Mollina (Antequera, Málaga), de apenas 5.000 habitantes, se debe al origen natal de sus promotores, Antonio Díaz y Ana Caballero. Desde muy jóvenes, este matrimonio aprovechaba sus viajes por España para ver los belenes más característicos de las regiones que visitaban. 

Su contacto frecuente con los belenistas acentuó su pasión por la historia y los detalles de este arte tan particular, que mezcla escultura, pintura, arquitectura y técnicas de iluminación. Esta afición les llevó a ir adquiriendo numerosos conjuntos, hasta que finalmente los reunieron en un museo que abrió sus puertas en 2017. 

Los belenes han sido donados por los propios artistas y las más variadas instituciones, con el deseo de que el patrimonio belenista no se perdiera y pudiera ser disfrutado por un público amplio. El belenismo no es una afición que mueva masas de gente o grandes cantidades de dinero, pero desde hace dos años es oficialmente Patrimonio Cultural Inmaterial de España.

Historia del Museo

El Museo de Belenes de Mollina es un centro de exposición único en su género. En pocos años ha logrado convertirse en un destino imprescindible para los amantes de los belenes. Por sus salas han pasado ya más de 200.000 visitantes, pero sigue siendo una joya aún por descubrir para muchas personas.

Este ambicioso proyecto fue merecedor de la Medalla de Oro de la Federación Internacional Belenista en 2023 y el año pasado se celebró un congreso de belenistas con más de 800 participantes. 

El museo abre sus puertas de miércoles a domingo, con horarios ampliados en temporada alta. Su entrada tiene un precio muy económico y organiza talleres y actividades educativas para los más pequeños. 

Datos del museo

El museo cuenta con más de 5.000 metros cuadrados, distribuidos en siete salas de exposición. La colección va creciendo de manera constante y actualmente expone más de 100 belenes.

Todas las representaciones contienen más de 7.000 figuras inesperadas de escenas bíblicas, enmarcadas en paisajes y contextos de diferentes culturas, recreadas con un detalle y realismo asombrosos. 

Uno de los aspectos más llamativos del museo es la calidad del montaje de la exposición, que incluye iluminaciones muy cuidadas, la protección de amplios cristales blindados para todas las maquetas y una distribución del espacio muy cómoda y amplia. 

Belenes sorprendentes

El museo cuenta con una sala de 20 dioramas, esos pequeños belenes que muestran una escena con un gran número de detalles, jugando con los espejos y fondos que se abren a otros espacios en miniatura, ofreciendo al espectador sensación de gran profundidad y realismo.

Una de las obras más llamativas no es propiamente un belén, sino una gran maqueta circular de 10 metros de diámetro, en la que se muestran las principales escenas del Antiguo y Nuevo Testamento, con recreaciones de pasajes de los principales pasajes bíblicos de la historia de la salvación, desde Adán y Eva hasta la Resurrección de Jesús. 

Los sótanos del centro de exposiciones también cuentan con un taller donde se arreglan las figuras y los decorados de las maquetas. Por si todo esto no fuera suficiente, hay guardados decenas de belenes que poco a poco van renovando la exposición.

Variedades y conjuntos

El museo alberga varias colecciones de belenes especialmente reseñables. En primer lugar hay un conjunto de belenes napolitanos, de gran colorido y exuberancia, ambientados en la Italia del siglo XVIII. Siguiendo una tradición más popular, austera y cercana, la colección cuenta con un grupo de belenes valencianos.

Los amantes de los belenes ambientados en contextos variados y originales disfrutarán con las escenas que se representan en otros momentos históricos, acontecimientos actuales o lugares exóticos. Por ejemplo, hay belenes ambientados en una favela de Río de Janeiro, en el teatro romano de Cartagena, una calle destruida por la guerra, el Patio de los Leones de la Alhambra o la catedral de Burgos.

Y, como no podía ser de otro modo, la exposición cuenta también con belenes de artistas contemporáneos que reinterpretan la tradición belenista, con materiales y técnicas innovadoras.

Semana Santa

Una de las maquetas más sorprendentes de la muestra representa la escenificación de la pasión de Cristo. Andalucía no se entiende sin la Semana Santa, por lo que a nadie le choca que un museo de belenes ubicado en esta región cuente también con una representación de la pasión de Cristo. 

Por eso, es perfectamente natural que una de las salas de exposición muestre doce dioramas con la entrada de Cristo en Jerusalén, la última cena, el lavatorio de pies, el beso de Judas, la oración de Jesús en el huerto, las negaciones de Pedro, la flagelación, el juicio ante Pilato, las caídas con la cruz, la crucifixión, el descendimiento de la cruz y la resurrección. Se trata de un conjunto de escenas con figuras realizadas por Ángela Tripi. 

Navidad de 2024

Para la Navidad de 2024 el museo ha actualizado su catálogo y cuenta con piezas que ponen el foco en las consecuencias de los conflictos bélicos, tan de actualidad, como la Guerra de Ucrania o el que se vive en la franja de Gaza o zonas fronterizas entre Israel y Líbano. Así, En la guerra también hay esperanza, de Josep Font, ubicado en el recibidor central, se pueden ver los devastadores efectos de un bombardeo.

También el diorama Way to freedom (Camino a la libertad), se muestra una Sagrada Familia inspirada en la huida a Egipto, aunque en este caso huye de la guerra y la miseria. Una llamada a reflexionar sobre la paz y la situación de muchos migrantes.

El belén es mucho más que una simple representación del nacimiento de Jesús. Es un arte que ha evolucionado a lo largo de los siglos, adaptándose a las diferentes culturas y estilos artísticos. El primer Belén del que se tiene noticia se lo debemos a san Francisco de Asís, que en 1223 celebró la misa de Navidad dentro de una cueva en Italia. 

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Vaticano

Brian Farrell: “Ninguna Iglesia puede evangelizar sola hoy”

El Secretario Emérito del Dicasterio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, Brian Farrell, analiza en esta entrevista el camino recorrido por el ecumenismo desde el Concilio Vaticano II y la situación actual de la relación entre los cristianos.

Giovanni Tridente·23 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 2 minutos

Con ocasión del 60 aniversario de la promulgación del decreto «Unitatis Redintegratio» del Concilio Vaticano II sobre el ecumenismo, la Pontificia Universidad de la Santa Cruz acogió un Seminario Internacional patrocinado por la Facultad de Teología. El acto reunió a oradores de distintas comuniones cristianas para reflexionar, en un clima de sinceridad y confianza, sobre los esfuerzos realizados en los últimos sesenta años para fomentar la unidad de los cristianos.

Uno de los momentos más significativos de la jornada, que tuvo lugar el jueves 21 de noviembre, fue el discurso de clausura del obispo irlandés Brian Farrell, Secretario Emérito del Dicasterio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, quien reflexionó sobre la actualidad, los problemas y las perspectivas del ecumenismo hoy. En la siguiente entrevista, el teólogo explica la importancia de vivir concretamente el camino ecuménico, redescubriendo una auténtica fraternidad entre los cristianos.

¿Cuáles son los principales retos del ecumenismo en la actualidad?

– El ecumenismo, la búsqueda de la unidad, es una realidad diversa y complicada. No basta con resolver, como estamos haciendo, cuestiones teológicas o diferencias en la forma de entender y formular la fe. También debemos aprender a vivir juntos.

El Papa Francisco insiste a menudo en un ecumenismo que va más allá de las cuestiones teológicas. ¿Cómo debe leerse esta perspectiva?

– Estamos en un momento importante, porque de hecho la idea del Papa Francisco es que el ecumenismo no es sólo una cuestión a resolver, sino caminar juntos, rezar juntos y trabajar juntos.

Debemos redescubrirnos como hermanos y hermanas en este camino. En muchos de nuestros interlocutores ecuménicos hay una nueva esperanza de que, haciéndolo, avanzaremos hacia la meta de la plena comunión entre nosotros, los cristianos.

Mirando hacia atrás, ¿cómo ha cambiado el contexto del ecumenismo desde los años del Concilio Vaticano II?

– Creo que hace 60 años fue casi el comienzo de un viaje juntos. Entonces también había cierto optimismo, pero el mundo se ha vuelto más complicado. Basta con ver la situación actual: estamos más fragmentados, más enfrentados. Incluso las iglesias lo sufren. Vivimos en un océano muy líquido y fluido, y las verdades de la fe no son tan claras y seguras para la gente.

En un contexto tan complejo, ¿qué da esperanza?

– Tenemos una gran esperanza, porque cuanto más difícil se hace la misión, más obligados nos sentimos a estar juntos. Ninguna iglesia puede hoy evangelizar sola. Debemos trabajar juntos. Todos sabemos que debemos hacerlo, pero ahora debemos encontrar los pasos concretos para lograrlo.


A continuación la entrevista completa (en italiano) al Secretario Emérito del Dicasterio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos:

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Recursos

17 niños y adolescentes santos para la Iglesia de hoy

El anuncio realizado por el Papa Francisco de la canonización del beato Carlo Acutis (fallecido con 15 años), en el Jubileo de 2025, es un buen motivo para ofrecer unas pinceladas de niños y adolescentes santos. No han sido muchos hasta ahora, pero su vida y muerte puede ser un ejemplo para todos en la Iglesia.

Francisco Otamendi·23 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 5 minutos

El anuncio realizado por el Papa Francisco de la canonización del beato Carlo Acutis (fallecido con 15 años), en el Jubileo de 2025, es un buen motivo para ofrecer unas pinceladas de niños y adolescentes santos. No han sido muchos hasta ahora, pero su vida y muerte puede ser un ejemplo para todos en la Iglesia. Comenzamos por algunos niños de los primeros tiempos de la Iglesia, en su mayoría romanos. De los siglos más cercanos, cuatro son mexicanos, una chileno-argentina, tres italianos, y dos portugueses.

En la solemnidad de Todos los santos del año pasado, el Papa subrayó que “los santos no son héroes inalcanzables o lejanos, sino personas como nosotros”, y que “si lo pensamos bien, seguro que hemos conocido a algunos de ellos, a algunos santos “de la puerta de al lado” personas generosas que, con la ayuda de Dios, han correspondido al don recibido y se han dejado transformar día a día por la acción del Espíritu Santo”.

Además, la inmensa mayoría de los santos no han sido declarados formalmente santos ni beatos por la Iglesia. He aquí algunos de ellos que sí están en los altares, a pesar de su juventud, o que lo estarán muy pronto, como Carlo Acutis.

No se incluyen jóvenes como el beato Pier Giorgio Frassati, que será canonizado también durante el Jubileo de 2025, porque tenía 24 años al morir, o la francesa santa Teresita del Niño Jesús, patrona de las Misiones, fallecida con la misma edad.

Santa Inés (13 años)

“Pura”, “casta”, sto significa en griego Inés. Es una de las mártires más veneradas de la Iglesia. Estamos en el 304, tiempos del emperador Diocleciano. Pertenecía a una noble familia romana. Prefirió el martirio a perder la virginidad. Su fiesta es el 21 de enero.

San Tarsicio (14 años)

Por defender la Sagrada Eucaristía, fue apedreado por una turba. Patrono de los monaguillos. Cementerio de san Calixto. El  joven Tarsicio se le confió llevar la comunión a algunos cristianos que estaban prisioneros, durante la persecución de Valeriano. Fiesta, 15 de agosto.

Santas Eulalias

Tiempos de Diocleciano. Virgen y mártir, siendo aún joven, Eulalia (de Mérida) no dudó en ofrecer su vida por confesar a Cristo (304). En el Museo del Prado existe un óleo sobre ella de Gabriel Palencia y Ubanell. También es santa la niña Eulalia de Barcelona, patrona de la Ciudad Condal.

Santos Justo y Pastor (7 y 9 años)

Conocidos como los Santos niños, nacidos en Tielmes (Madrid), hispanorromanos, fueron martirizados en el 304 en Alcalá de Henares durante la persecución del Emperador Diocleciano. Contaban con 7 y 9 años, respectivamente, y se negaron a abjurar del cristianismo.

San Pancracio

Mártir que, según la tradición, murió en Roma, en plena adolescencia por su fe en Cristo, siendo sepultado en la vía Aurelia. El papa san Símaco levantó una célebre basílica sobre su sepulcro y el papa san Gregorio I Magno convocaba a menudo al pueblo en torno al mismo sepulcro.

Santo Domingo Savio (14 años)

Domingo, que significa “el que está consagrado al Señor”, nació en Italia, en 1842. Desde niño manifestó deseos de ser sacerdote. Cuando san Juan Bosco empezó a preparar a algunos jóvenes para el sacerdocio, con objeto de que le ayudaran en su trabajo en favor de los niños abandonados de Turín, el párroco de Domingo le recomendó al chico.

Beata Laura Vicuña (13 años)

La chilena Laura Carmen Vicuña nació en Santiago en 1891. Tras haber intuido que la madre no vivía en gracia de Dios, se ofreció al Señor por su conversión. Debilitada por la enfermedad, murió en Argentina en 1904. San Juan Pablo II la beatificó. Su fiesta es el 22 de enero.

Santa María Goretti (11 años)

María perdonó a su asesino, Alejandro, que quería violarla, invocó a la Virgen y murió veinticuatro horas después, en julio de 1902, cuando aún no había cumplido 12 años. Alejandro se convertiría tiempo después, comenzando a vivir una vida cristiana. María Goretti fue beatificada en 1947 y canonizada tres años después por el Papa Pío XII. Su festividad es el 6 de julio.

San José Sánchez del Río (14 años)

Adolescente cristero, procesado, torturado y ejecutado por oficiales del gobierno mexicano. Declarado beato por el cardenal José Saraiva Martins en Guadalajara en 2005, y canonizado por el Papa Francisco en 2016 en Roma. Con el fin de hacerlo renegar de su fe para que pudiera salvarse, fue torturado y obligado a asistir al ahorcamiento de otro muchacho prisionero con él. José, cuando le herían, gritaba: ‘¡Viva Cristo Rey! ¡Viva la Virgen de Guadalupe!’.

Santos Francisco y Jacinta Marto – Fátima (10 y 9 años)

El 13 de mayo de 2017, en el centenario de las apariciones de Nuestra Señora, el Papa Francisco canonizó en Fátima (Portugal), a los beatos Francisco y Jacinta Marto, dos de los tres pastorcillos de Fátima. El proceso de sor Lucia está en marcha. 

El Papa dijo ese 13 de mayo: “Como un ejemplo para nosotros, tenemos ante los ojos a san Francisco Marto y a santa Jacinta, a quienes la Virgen María introdujo en el mar inmenso de la Luz de Dios, para que lo adoraran. De ahí recibían ellos la fuerza para superar las contrariedades y los sufrimientos. La presencia divina se fue haciendo cada vez más constante en sus vidas, como se manifiesta claramente en la insistente oración por los pecadores y en el deseo permanente de estar junto a ‘Jesús oculto’ en el Sagrario”.

Santos Cristóbal, Antonio y Juan

Los niños mártires de Tlaxcala son considerados los primeros mártires de América, ya que fueron asesinados en México entre 1527 y 1529. Cristóbal conoció la fe católica gracias a la labor evangelizadora que los franciscanos realizaban entre 1524 y 1527. Tras recibir el Bautismo, trabajó por la conversión de su familia, y murió a los 12 años producto de los golpes y quemaduras provocadas por su progenitor. Antonio y Juan recibieron formación de los franciscanos y dominicos, y fueron asesinados.

Carlo Acutis (15 años)

El Papa Francisco ha anunciado en la Audiencia del miércoles la canonización en el Jubileo de 2025 del beato Carlo Acutis, joven italiano que murió con sólo 15 años por una leucemia fulminante.

El 11 de octubre de 2020, dijo el Papa: “Ayer, en Asís, fue beatificado Carlo Acutis, un chico de quince años, enamorado de la Eucaristía. No se instaló en una cómoda inmovilidad, sino que comprendió las necesidades de su tiempo, porque en los más débiles vio el rostro de Cristo. Su testimonio indica a los jóvenes de hoy que la verdadera felicidad se encuentra poniendo a Dios en primer lugar y sirviéndole en nuestros hermanos, especialmente en los más pequeños. ¡Un aplauso al nuevo joven beato!”.

El Santo Padre se refirió al futuro beato en su Exhortación Christus vivit, en la que menciona el riesgo del mundo digital que puede colocar a los jóvenes “en el riesgo del ensimismamiento, aislamiento o del placer vacío”. 

Y cita a un joven “creativo y genial”, Carlo Acutis, quien “sabía muy bien que esos mecanismos de la comunicación, de la publicidad y de las redes sociales pueden ser utilizados para volvernos seres adormecidos, dependientes del consumo u obsesionados con el tiempo libre”. En cambio, él fue capaz de usar las “nuevas técnicas de comunicación para transmitir el Evangelio y para comunicar valores y belleza”.

El autorFrancisco Otamendi

Vaticano

Sesenta años de Lumen Gentium: redescubrir el misterio de la Iglesia

Un congreso internacional reflexionó en Roma sobre la actualidad de "Lumen Gentium", 60 años después de su promulgación, entre historia, eclesiología y sinodalidad, con una mirada a los desafíos que plantea la modernidad.

Giovanni Tridente·22 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 3 minutos

En el 60 aniversario de la promulgación de la Constitución dogmática «Lumen Gentium», la Pontificia Universidad de la Santa Cruz de Roma acogió los días 19 y 20 de noviembre de 2024 un Congreso Internacional para reflexionar en general sobre el legado del Concilio Vaticano II y cómo ha evolucionado la eclesiología en las últimas décadas. El acto se organizó en colaboración con la Universidad de Navarra, la Universidad Católica Juan Pablo II de Lublin y la Facultad de Teología de la Santa Cruz y la Universidad de la Suiza Italiana de Lugano.

El camino de la eclesiología

La primera jornada del Congreso ofreció un análisis histórico de la trayectoria eclesiológica, a cargo de Carlo Pioppi, profesor de Historia de la Iglesia en la Santa Cruz, quien ilustró las dos principales corrientes de pensamiento que se desarrollaron entre la Revolución Francesa y el Concilio Vaticano II: Por un lado, la tradición manualista con un enfoque jurídico y apologético; por otro, nuevas perspectivas que redescubrían a la Iglesia como un «organismo vivo guiado por el Espíritu Santo e inserto en la historia».

Desde la Universidad de Navarra, Pedro A. Benítez analizó el debate conciliar sobre la «estructura orgánica» de la Iglesia, destacando cómo esta idea se convirtió en central en la redacción de la Lumen Gentium, hasta el punto de describir a la Iglesia como «una realidad estructurada, un cuerpo unificado» en el que cada miembro desempeña un papel vital. También profundizó en este concepto Peter De May, de la Katholieke Universiteit Leuven, subrayando cómo se complementan los capítulos de la Constitución dedicados al pueblo de Dios, a los laicos y a la jerarquía.

Pueblo de Dios y comunión

Refiriéndose al contexto postconciliar, Hans Christian Schmidbaur, de la Facultad de Teología de Lugano, por su parte, subrayó cómo la «communio», principio fundamental del documento conciliar, no debe entenderse en sentido secular, sino como «communio sanctorum», una unión profunda entre Dios y la humanidad redimida, en la que la dimensión vertical de la relación con Dios asume y sigue manteniendo una importancia primordial.

Fue la misma experiencia durante el régimen comunista en Polonia, cuando se tendía a reducir la realidad eclesial a una dimensión puramente institucional, de la que habló Antoni Nadbrzezny, de la Universidad Católica de Lublin. Para el académico, Lumen Gentium restauró una imagen de la Iglesia como «entidad personal», una «comunidad de personas unidas por el amor del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo».

El segundo día de trabajo se pasó al análisis sistemático del documento conciliar, profundizando en los conceptos clave de Pueblo de Dios, comunión y sinodalidad. Desde el Instituto Papa Benedicto de Ratisbona, Christian Schaller ilustró las diferentes facetas del «Pueblo de Dios» en Lumen Gentium, analizando sus dimensiones profética, mesiánica e histórico-escatológica. En cuanto a la naturaleza misionera de este «pueblo», Sandra Mazzolini, de la Pontificia Universidad Urbaniana, habló en particular del papel de los laicos y de la contribución que la Iglesia puede aportar en el ámbito del diálogo intercultural, «piedra angular de la misión evangelizadora de la Iglesia, tanto universal como local».

Philip Goyret, antiguo Decano de la Facultad de Teología de la Universidad de la Santa Cruz, volvió también sobre el tema de la «comunión», definiéndolo como un concepto capaz de sintetizar otros elementos fundamentales de la Iglesia, como el misterio, el sacramento y la Eucaristía. Por tanto, no se trata en absoluto de una dimensión abstracta, sino de algo que ya se realiza en las Iglesias locales y que encuentra su máxima expresión en la celebración de la Eucaristía. Goyret subrayó a continuación la importancia de evitar una especie de «rivalidad» entre la eclesiología de comunión y la del Pueblo de Dios, explicando cómo la primera no excluye en absoluto la dimensión social y jurídica de la Iglesia.

El desafío sinodal

Otro aspecto abordado en el Congreso, también vinculado a la actualidad del pontificado del Papa Francisco, fue el de la eclesiología sinodal, del que habló Miguel de Salis, Director del Centro de Formación Sacerdotal Santa Cruz. El conferenciante -que también fue experto en el último Sínodo en el Vaticano- propuso un análisis en profundidad de la sinodalidad, partiendo de su definición de «caminar juntos» y analizando su conexión con la misión de la Iglesia.

Según De Salis, la sinodalidad debe basarse en una «estructura relacional fundamental», evitando tanto la rigidez de una excesiva dependencia de las formas institucionales como el riesgo de reducir la Iglesia a un mero reflejo de la sociedad contemporánea. Este «camino» debe enraizarse en la «pluralidad real de la vida comunitaria». En esta perspectiva, Vito Mignozzi, de la Facultad de Teología de Apulia, presentó la sinodalidad misma como «fruto de la progresiva recepción conciliar», explicando que se realiza en un «nexo esencial» que parte de la concreción de las comunidades locales para abrazar la dimensión universal de la Iglesia.

En definitiva, sesenta años después, Lumen Gentium sigue ofreciendo a la Iglesia una visión que abraza tanto el misterio de la fe como la concreción de la historia, invitando a las distintas generaciones a reconocer en la comunión y en la sinodalidad no sólo estructuras operativas, sino modos de vivir y testimoniar el Evangelio y de renovar el impulso misionero.

España

Los obispos españoles finalizan su 126ª Asamblea plenaria

Los obispos españoles celebraron su 126ª Asamblea plenaria del 18 al 22 de noviembre de 2024, en la que trataron temas como los avances en la Oficina de Protección de Menores o las preparaciones para el jubileo 2025 y el Congreso de Vocaciones.

Paloma López Campos·22 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 3 minutos

El secretario general de la Conferencia Episcopal Española, Francisco César García Magán, compareció en una rueda de prensa para dar cuenta de la Asamblea plenaria de los obispos acontecida del 18 al 22 de noviembre.

En esta reunión, como indicó monseñor García Magán, acudieron todos los obispos miembros de pleno derecho, los administradores diocesanos de Albacete y varios obispos eméritos. Por su parte, el obispo electo de San Felíu de Llobregat y los dos obispos auxiliares electos de Valencia participaron en la sesión inaugural.

Al inicio de la rueda de prensa, el secretario general trasladó su “cercanía y solidaridad” a las víctimas y afectados por la DANA en Valencia y otras comunidades autónomas. Asimismo, recordó que la colecta de las Misas durante la Solemnidad de Cristo Rey, el domingo 24 de noviembre, estará dirigida a ayudar a los damnificados. Las Conferencias Episcopales de México y Eslovaquia se unen a esta iniciativa con donativos económicos, a los que se suman las oraciones de los obispos de otros países que han hecho llegar su solidaridad al episcopado español.

Protección de menores y migrantes

Entre los temas tratados durante la asamblea plenaria estuvo el trabajo del Servicio de coordinación y asesoramiento de las oficinas para la protección de menores. En este sentido, el secretario general informó de que han tenido lugar “siete encuentros de formación y prevención en los que han participado cerca de 1400 personas de todas las áreas de la acción de la Iglesia”.

Por otro lado, los obispos españoles escucharon la propuesta del proyecto “Hospitalidad Atlántica”, desarrollado por la Subcomisión para las Migraciones y la Movilidad Humana. Esta iniciativa, que lleva dos años elaborándose, “nace de un encuentro convocado por el Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral con los obispos de las diócesis involucradas en la Ruta Atlántica, que es como se denomina al camino migratorio que se utiliza desde el continente africano para alcanzar Europa a través de las Islas Canarias”.

“Hospitalidad Atlántica” consiste en “una red eclesial formada por 10 países y 26 diócesis de España y África. Sus tres objetivos principales son: ofrecer información veraz, salvar vidas y trabajar en red”.

Como informó monseñor García Magán, esta Subcomisión no es la única que presentó proyectos durante la Asamblea. La Subcomisión Episcopal para la Juventud y la Infancia mostró también sus avances en “el proyecto marco de Pastoral Juvenil”, en el que “se marca el camino que la Iglesia en España quiere realizar con sus miembros más jóvenes”.

Sínodo de los Obispos y Jubileo 2025

El ya finalizado Sínodo de los Obispos también tuvo su espacio en la agenda de la asamblea. El presidente de la Conferencia Episcopal, Monseñor Argüello, quien también participó en la Asamblea General del Sínodo, propuso a sus compañeros “profundizar en el documento final con la misma metodología que se ha seguido en el Sínodo: una ‘conversación en el Espíritu’”. Para realizar esto, los obispos se distribuyeron en grupos de trabajo para analizar las “llamadas” que “recibimos para crecer en comunión misionera”.

Además, la Conferencia Episcopal habló durante la Asamblea plenaria de dos eventos importantes que tendrán lugar en 2025: el Jubileo y el Congreso Nacional de Vocaciones. Los obispos trabajan en preparar estos acontecimientos de la Iglesia de los que quieren hacer partícipes a todos los católicos.

Otros temas de la Asamblea Plenaria

El secretario general informó también de que “los obispos han dialogado sobre el documento final del plan de puesta en marcha de los criterios para la reforma de los seminarios en España”. Asimismo abordaron la reestructuración de los institutos teológicos e institutos superiores de ciencias religiosas.

Entre otras cuestiones surgidas durante la reunión de la Conferencia Episcopal, monseñor García Magán destacó las intervenciones de la presidenta de Manos Unidas y del director de Ayuda a la Iglesia Necesitada. Como es habitual también, los obispos recibieron los datos sobre el estado del grupo Ábside (TRECE y COPE), “del secretariado para el Sostenimiento de la Iglesia y del Órgano de Cumplimiento Normativo. Además, “los obispos han dado su visto bueno al presupuesto del Fondo Común Interdiocesano y de la Conferencia Episcopal para 2025”.

Tras la comparecencia de García Magán comenzó el turno de preguntas, durante el que los periodistas preguntaron por las declaraciones del Defensor del Pueblo, quien propuso un día antes del cierre de la Asamblea plenaria la creación de un fondo común para hacer frente a las indemnizaciones de las víctimas de abuso. El secretario general no profundizó mucho en este sentido, pero sí señaló que existe cierta tensión ahora mismo tanto por esta cuestión como por la enseñanza de la religión y el pacto entre el Reino de España y la Santa Sede.

Vaticano

Jubileo 2025: Roma se transforma… y el Papa espera lo mismo para la Iglesia

Roma está en plena transformación con obras para restaurar sus monumentos más emblemáticos, preparándose para el Jubileo de 2025, un evento especial en la Iglesia católica que promueve la esperanza como tema central. El Papa llama a toda la humanidad a renovar su fe y buscar sentido en un mundo marcado por divisiones, violencia y desafíos.

Luísa Laval·22 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 4 minutos

Muchos turistas ansiosos por conocer la ciudad eterna se han encontrado en los últimos meses con una sorpresa quizás no tan agradable a primera vista: Roma está cubierta de «cantieri» (obras) para restaurar los puntos más icónicos de la ciudad: el baldaquino de la Basílica de San Pedro ya luce después de los trabajos de remodelación, continúan los arreglos en la Cátedra proyectada por Bernini, en los alrededores del Coliseo, en las grandes fuentes de la Piazza Navona y muchos otros lugares de la capital italiana.

Lo que estas reformas tienen en común está escrito en grandes letras en sus cercas: Roma se transforma. Es el lema del proyecto «Caput Mundi», que ha destinado 500 millones de euros para preparar la ciudad para un evento único en la historia de la Iglesia: el Jubileo de 2025, algo que solo ocurre cada 25 años, salvo en casos extraordinarios, como el Jubileo de la Misericordia de 2015. La ciudad se prepara para una gran afluencia de peregrinos, y ya hay reportes de hoteles y alojamientos llenos durante todo el Año Santo.

¿Por qué todo esto?

El Papa Francisco tiene una propuesta no solo para los cristianos, sino para todo el mundo: la Esperanza, gran tema del Jubileo de 2025. En un mundo marcado por la creciente polarización, los conflictos y la marginación de las minorías, el líder de la Iglesia alza la voz para reavivar un deseo quizás dormido en cada persona, o que no sabemos cómo llamarlo.

«Todos esperan. En el corazón de toda persona anida la esperanza como deseo y expectativa del bien, aun ignorando lo que traerá consigo el mañana», dice el Papa en la bula «Spes non confundit» (la esperanza no engaña, en traducción del latín), que convoca al Jubileo. Francisco utiliza las palabras del apóstol San Pablo en su Carta a los Romanos para invitar a toda la humanidad a lo que espera que «sea, para todos, una ocasión de reavivar la esperanza».

Recorrer un camino

El llamado Año Jubilar comenzará en la noche del 24 de diciembre de este año, cuando el Papa abra la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro (aún rodeada de andamios), y terminará el 6 de enero de 2026, solemnidad de la Epifanía, cuando la cerrará. Durante este periodo, la Iglesia convoca 33 jubileos relacionados con diversas profesiones y grupos sociales: comunicadores, artistas, jóvenes, ancianos, gobernantes…

Esta Puerta será la primera de muchas que se abrirán en las diócesis de todo el mundo el 29 de diciembre: los fieles que pasen por estas Puertas podrán ganar una indulgencia plenaria (el perdón de la culpa de todos los pecados). Para ello, deben cumplir otras condiciones: comulgar y confesarse una semana antes o, después de la entrada por la puerta, rezar por las intenciones del Santo Padre y tener total desapego por cualquier signo de pecado. En las diócesis, las Puertas Santas se cerrarán el 28 de diciembre de 2025.

El último Jubileo Ordinario ocurrió a principios del nuevo milenio, en el año 2000, durante el pontificado de San Juan Pablo II. 25 años después, Francisco invita a cada uno a volver a recorrer el «camino» de la vida cristiana, ya que «ponerse en camino es un gesto típico de quienes buscan el sentido de la vida» (n. 5). Su deseo es que las iglesias jubilares sean «oasis de espiritualidad» para «restaurar el camino de la fe y saciarse en las fuentes de la esperanza».

Iglesia en salida

Desde el inicio de su papado, Francisco dice que la Iglesia debe estar en salida. Ahora, destaca que sus puertas deben estar abiertas para recibir a «todos, todos, todos», como defendió en la Jornada Mundial de la Juventud en Lisboa en 2023. Para ello, toda la Iglesia debe transformarse para «ofrecer la experiencia viva del amor de Dios, que despierta en el corazón la esperanza segura de la salvación en Cristo» (n. 6).

Francisco también ha recorrido su propio camino: como afirma en su última encíclica «Dilexit Nos» (n. 217), mantiene la continuidad con sus encíclicas sociales «Laudato si» y «Fratelli tutti», y sigue defendiendo el papel de cada uno en la misión de restaurar el mundo. «Lo expresado en este documento (…) no es ajeno a nuestro encuentro con el amor de Jesucristo, ya que bebiendo de ese amor nos volvemos capaces de tejer lazos fraternos, de reconocer la dignidad de cada ser humano y de cuidar juntos nuestra casa común», concluye en el texto publicado en octubre.

Signos de esperanza

En el documento de proclamación del Jubileo, Francisco propone que la Iglesia y la sociedad se esfuercen por ofrecer “signos de esperanza” para los principales problemas que observa en el mundo contemporáneo, comenzando por la paz. «La humanidad, desmemoriada de los dramas del pasado, está sometida a una prueba nueva y difícil cuando ve a muchas poblaciones oprimidas por la brutalidad de la violencia», escribe.

Además, no duda en presentar temas espinosos como la caída de la natalidad en muchos países, motivada por la «pérdida del deseo de transmitir la vida». También se dirige a uno de sus públicos favoritos, los presos, para quienes quiere abrir una puerta santa en una prisión (e invita a que los gobiernos tomen iniciativas para ayudar a las personas de este contexto). El Papa tampoco olvida de los enfermos, los jóvenes, los migrantes, los ancianos y los pobres e invita a que las naciones ricas «determinen condonar las deudas de los países que nunca podrán saldarlas» (n. 16). Nadie está excluido de la invitación a transmitir esperanza.

El mundo necesita esperanza, y el Papa lo sabe. Por eso, espera no sólo una transformación externa, como la reforma de edificios y la apertura de puertas. Espera que toda la Iglesia, en cada uno de sus fieles, abra las puertas de su interior para «que la luz de la esperanza cristiana pueda llegar a todas las personas, como mensaje del amor de Dios que se dirige a todos» (n. 6).

Zoom

Edificios de todo el mundo se iluminan por el «Miércoles rojo»

La Catedral de San José de Nazaret en Toluca, México, iluminada de rojo el “Miércoles Rojo” como parte de la conmemoración de Ayuda a la Iglesia Necesitada por los cristianos perseguidos

Paloma López Campos·21 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: < 1 minuto
España

Argüello: «La vocación más en crisis en España es al matrimonio»

El Congreso Nacional de Vocaciones, que tendrá lugar en febrero de 2025, reunirá a miles de participantes, se impulsará una visión de la vida como "llamada" frente al individualismo moderno, promoviendo la pastoral vocacional y resaltando el papel crucial del matrimonio en la sociedad y la Iglesia.

Javier García Herrería·21 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 3 minutos

Del 7 al 9 de febrero tendrá lugar un gran congreso de vocaciones convocado por la Conferencia Episcopal Española. La iniciativa lleva por título “¿Para quién soy yo? Iglesia, asamblea de llamados para la misión”. Monseñor Luis Argüello, Presidente de la Conferencia Episcopal y responsable del Servicio de Pastoral Vocacional, ha explicado en rueda de prensa el marco del congreso, que pretende salir de la propuesta de la autonomía individualista propia de la modernidad (expresada en el famoso “pienso, luego existo” de Descartes), a una invitación a considerar la vida como una “llamada” que da sentido y plenitud a la vida. 

El congreso tendrá lugar en el Pabellón “Madrid Arena” y espera reunir a 3.200 participantes y 300 ponentes, entre sesiones generales y los distintos talleres que se ofrecerán. También podrá seguirse en directo a través de las redes sociales.  

Participarán todas las realidades presentes en la Iglesia en España: diócesis, vida consagrada y movimientos; sacerdotes y laicos; y, por supuesto, familias. El evento está siendo organizado por el “Servicio de Pastoral Vocacional” de la Conferencia Episcopal Española, que integra las comisiones episcopales de Laicos, Familia y Vida, Misiones, Vida Consagrada, Clero y Seminarios, con la colaboración de la CONFER y de CEDIS.

Vocación al matrimonio

Argüello ha destacado que es precisamente la vocación matrimonial la que está más en crisis en nuestro país, aunque ha puntualizado que también le preocupan las vocaciones al sacerdocio y la vida religiosa. 

El vídeo promocional del congreso pone el foco especialmente en la vida matrimonial, aunque por supuesto también incluye imágenes de sacerdotes y consagradas. Argüello ha comentado que, cuando presentaron al Papa Francisco esta iniciativa, fue el propio pontífice el que subrayó la importancia de la vida familiar y matrimonial y animó a impulsar esta pastoral.

Objetivos del congreso

La génesis de este congreso se remonta al año 2020, cuando se celebró otro llamado “Pueblo de Dios en Salida”. En esa ocasión se vio la necesidad de realizar en un futuro próximo un gran encuentro eclesial para impulsar la pastoral vocacional en España. De ahí nace la nueva convocatoria que tendrá lugar en 2025, Para quien soy yo. El gran objetivo de este Congreso es celebrar una gran fiesta de la Iglesia que la muestre como “asamblea de llamados”, pues eso quiere decir la palabra Iglesia (“Ecclesia”): asamblea de los llamados.

El segundo gran objetivo del Congreso es impulsar y consolidar en cada diócesis un servicio que anime la vida vivida como vocación y promueva los distintos caminos vocacionales. Para asegurar esta finalidad una de las tres comisiones que se han constituido para el evento velará para ayudar a las diócesis a implementar las novedades que se susciten en esos días.

Dimensiones del congreso

El congreso se articulará en tres dimensiones: una antropológica, otra eclesial y, una tercera que mostrará la dimensión social que tiene la vocación personal. 

Argüello ha señalado cómo la tragedia de la Dana ha puesto de relieve la generosidad de los jóvenes para ayudar. Una muestra, añade, de cómo el paradigma del individualismo autónomo es muy pobre en comparación de la vida como un don para los demás. Entender la vida como un don responde a la verdad del hombre y permite descubrir el sentido de la vida. 

Eclesialmente hablando, Argüello ha recordado que en la Iglesia estamos en una época de sinodalidad, que ayuda a entender cómo todas las vocaciones son importantes y necesarias, pues la Iglesia es una comunión cuya unión nace de la Eucaristía. 

La tercera dimensión del congreso trata de mostrar las consecuencias de la propuesta antropológica de la Iglesia para toda la sociedad. Sus efectos no se ven sólo en iniciativas como Cáritas, sino que la vida matrimonial fecunda es decisiva para paliar el problema demográfico; o también, una buena educación de los hijos es muy positiva para toda la sociedad. Argüello ha exhortado a pensar una sociedad que busque realmente el bien común, que no sólo anime a crear asociaciones que reivindiquen derechos, sino también otras que exhorten a cumplir con los propias obligaciones: “Hacen falta asociaciones de deberes humanos, no solo de derechos humanos”. 

Libros

Eugenio Corti (III): la epopeya de un escritor, un hombre, un cristiano

Eugenio Corti, escritor y cristiano, dejó un legado literario caracterizado por ser un guardián de la memoria y la verdad, enfrentando el olvido con belleza y autenticidad. En sus últimos días, expresó serenidad ante la muerte, confiando en la misericordia divina y la trascendencia de su obra. Falleció en 2014, dejando una huella profunda en la literatura.

Gerardo Ferrara·21 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 7 minutos

Tras el éxito de El caballo rojo, Eugenio Corti, ante el «avance imparable de la civilización de las imágenes», decidió dedicarse a una nueva serie de escritos que denominó «historias para imágenes». «Se trata de bocetos, elaborados según criterios particulares, que deberían servir de guiones para la televisión del futuro, y más aún para otras herramientas de comunicación, tal vez informáticas, que la ciencia está preparando».

La primera de estas obras data de 1970 y se titula «L’isola del paradiso»(la historia es la del motín de la Bounty); la segunda es «La terra dell’Indio» (el tema son las reducciones jesuíticas en Sudamérica); la tercera es «Catone l’antico» (la historia de Catón el Viejo).

Al final de su carrera literaria, Eugenio Corti pudo por fin dedicarse al periodo histórico que más le gustaba y en 2008 se publicó «Il Medioevo e altri racconti«.

En los últimos años de su vida, Eugenio Corti recibió una atención inusitada por parte de las instituciones: en 2007, el «Ambrogino d’oro» de la ciudad de Milán; en 2009, el Premio «Isimbardi» de la provincia de Milán; en 2010, el Premio «La Lombardia del Lavoro» de la región de Lombardía; en 2011, el Premio «Beato Talamoni» (provincia de Monza y Brianza); y, por último, en 2013, el Presidente de la República Italiana concedió a Eugenio Corti la Medalla de Oro al mérito en la cultura y el arte.

En 2011 se formó un comité para proponer la candidatura de Eugenio Corti al Premio Nobel de Literatura; la provincia de Monza y Brianza y la región de Lombardía en Italia aprobaron mociones de apoyo a la iniciativa; François Livi, profesor de lengua y literatura italianas en la Sorbona de París, es su entusiasta defensor académico.

Eugenio Corti sigue siendo muy realista sobre las posibilidades de que le concedan el Premio Nobel: «Se lo agradezco mucho, pero para un católico hoy en día es muy difícil recibir este premio. Hay una gran dificultad para aceptar la cultura cristiana. El Nobel es una institución prestigiosa, pero en los últimos años se ha premiado también a quienes tienen poco que ver con la cultura… A mí me basta con que se conozcan mis obras y que quizá El caballo rojo se lea en las escuelas. Entonces siempre pienso que si no le dieron el Nobel a Tolstoi, yo puedo estar tranquilo ‘.

Sus pensamientos sobre el más allá son muy serenos; en la misma entrevista mencionada hace unas líneas, se le pregunta si sigue viéndose como escritor después de la muerte: «No… Creo que ya he escrito bastante. En el cielo sólo me gustaría abrazar a mis padres, a mis hermanos, a todos los que quise en la tierra. Me comprometí con mi pluma a transmitir la verdad. Pero hasta qué punto lo he conseguido es una incógnita. Para mí lo más importante es la misericordia divina. He cometido muchos errores, pero cuando me presente ante Dios, creo que seguirá considerándome uno de los suyos».

Eugenio Corti falleció el 4 de febrero de 2014 en Besana Brianza.

Un maestro de la vida y de la escritura

Vanda Corti, después de una vida al lado de su marido y de haber compartido sus éxitos y sus derrotas, dijo: «La realidad de un escritor es la de muchos sacrificios… Sacrificios en el sentido de que la vida de un escritor es una vida de estudio, una vida pesada: nadie se da cuenta de ello. Es una vida de soledad: hay que saber aceptarla, porque exige silencio, concentración, respeto».

La vida y la obra de Eugenio Corti son para mí una fuente continua de inspiración y esperanza, de paz, de paciencia.

La señora Vanda, con quien tuve el honor y el placer de hablar por teléfono y a quien regalé mis libros, editó en 2017 un libro que recoge los diarios de su marido de 1941 a 1948, «Il ricordo diventa poesia» («La memoria se hace poesía»). En los diarios, me llamó la atención una frase que Eugenio Corti citó de «Bacche d’agrifoglio», de Carlo Pastorino: «Pero incluso para el cuento y la novela no basta con saber escribir, hacen falta temas. Y éstos nos los da la vida y la larga experiencia. Sólo a los cuarenta años se es lo bastante maduro para tales asuntos. Hasta esa edad, uno es como un niño, y quien ha escrito demasiado en su juventud está arruinado para siempre… Observo que hay escritores que a los cuarenta ya son viejos: han segado el trigo en la hierba.  Horacio también dio este consejo: espera. No es necesario el grano en ciernes: son necesarias las espigas».

Necesaria para el escritor, y para el artista en general, es por tanto la paciencia, antídoto contra el ardor de quien se siente llamado a una misión extraordinariamente elevada, vocación a la que a menudo se siente incapaz e indigno de responder: «La Providencia tiene designios especiales sobre mí. A veces tiemblo al pensar en mi indignidad incluso para ser sólo un medio en las manos del Señor. A veces pienso con temor que la Providencia se ha cansado de mi miseria, de mi escasez, de mi ingratitud, y entonces me ha dejado que me sirva de otro para conseguir el fin a que estaba destinado; y entonces rezo y actúo, e invoco al Cielo, hasta que, he aquí que un claro auxilio de la Providencia en un caso cualquiera, me hace estar seguro de que su mano me dirige siempre por el mismo camino: entonces soy feliz. No quiero que mi afirmación de que la Providencia tiene un plan especial para mí se interprete como un acto de soberbia. Me humillo, proclamo mi miseria sin nombre, pero tengo que decir que es así, negarlo para mí sería como negar la existencia de una cosa material que está ante mí». 

¿Quién es, pues, el escritor, el narrador, el contador de historias?

En las antiguas tribus germánicas, al cuentacuentos se le llamaba «bern hard», valiente con los osos (de ahí el nombre de Bernard) porque ahuyentaba a los osos y alejaba de la aldea los peligros materiales y espirituales. Era el chamán de la tribu, el depositario de las artes mágicas y del espíritu colectivo de la comunidad, en la práctica el custodio de la humanidad (con todo lo que este término significa) del pueblo, al que estaba encargado de proteger y alentar, cuya esperanza estaba obligado a dar y cuyas tradiciones estaba encargado de transmitir. Kierkegaard lo dijo bien: «Hay hombres cuyo destino debe sacrificarse por los demás, de un modo u otro, para expresar una idea, y yo, con mi cruz particular, era uno de ellos».

Un chamán, el paradigma del hombre. El escritor es un caballero, un valiente armado con una pluma (hoy, quizá un teclado de ordenador) y mucha abnegación, que lucha contra el mayor enemigo del ser humano, un monstruo terrible, de aspecto horrible y temperamento feroz, que devora a los hombres y, sobre todo, se traga sus recuerdos, sus sueños, su propia identidad: la muerte. Una muerte, por tanto, entendida no sólo como el cese físico de la existencia terrenal, sino como la aniquilación de lo interior y espiritual, ergo el nihilismo, la fealdad, el aburrimiento, la mentira, la dejadez, la costumbre y sobre todo, diría yo, el olvido, la desmemoria.

El escritor es la vanguardia de la humanidad y elige espontáneamente, en virtud de un don contemplativo superior al de los demás hombres (muy a menudo una herida abierta y sangrante, una melancolía existencial excelentemente descrita por Romano Guardini en «Retrato de la melancolía»), bajar a la batalla, enfrentarse a los monstruos, a los «osos», a la muerte y luchar contra el olvido, utilizando esa belleza y esa verdad que contempla; y luego regresa, entre sus semejantes, herido, cansado y decepcionado al ver que aquí abajo no reina lo absoluto, la belleza y la bondad eterna (precisamente el realismo del artista cristiano). ¡A sus semejantes informará, un poco como el primer corredor de maratón (Filípides, conocido como «heteródromo»: también el escritor podría ser un «heteródromo», tal vez incluso más un «biódromo», alguien que corre toda una vida de un lado a otro entre lo relativo y lo absoluto, la muerte y la vida, la satisfacción de poder contemplar la belleza y la verdad más que los demás y el pesar y la desdicha de no poder verlas realizadas en esta tierra): «Οἶδα» ! Lo sé, ¡oh hombres! ¡Lo he visto! Lo he contemplado: sé quiénes sois, sé quiénes erais y quiénes fuisteis creados para ser. Vosotros, tal vez, ya no lo sabéis, no lo recordáis, no lo creéis, pero yo os lo grito, os lo cuento a través de historias de tiempos y personas que os pueden parecer lejanas, pero se trata de vosotros: sois dioses, cada uno de vosotros lo es; sois preciosos, importantes, bellos, eternos, sois héroes cuya historia es digna de ser recordada y transmitida para siempre.

Me gustaría terminar con unas líneas de «I più non ritornano», en las que Eugenio Corti recuerda a su amigo Zoilo Zorzi, un valiente soldado que murió durante la retirada a Rusia:

«Los pelotones se prepararon para ir a la línea. Ya mi lado bestial -que tenía la sartén por el mango en ese momento- se regocijaba por haberme salvado junto con mis amigos, cuando Zorzi se adelantó inesperadamente y pidió al coronel con voz resignada que lo agregara a un pelotón.

Tenía en su rústico rostro veneciano la mirada franca, como siempre, y modesta.

Como cuando, recuerdo, aguantaba a colegas en Italia que le echaban broncas porque él, desde Acción Católica, no se precipitaba en ciertos discursos.

El coronel accedió a su petición. Los pelotones partieron inmediatamente hacia Arbusov.

Bellini y yo vimos en silencio cómo se alejaba Zorzi; nunca volveríamos a verle.

Me gustaría que estas pocas e inadecuadas palabras mías fueran un himno en memoria de él, el mejor de todos los hombres que conocí durante los duros años de la guerra.

Era de mente sencilla, de pensamientos profundos y muy querido por sus soldados. Y también muy valiente, como corresponde a un verdadero hombre.

Durante mucho tiempo mantuve la esperanza de que estuvieras vivo, y aún tu voz resonaba en alguna pequeña parte de aquellas tierras sin límites; y en silencio te esperé.

Mientras tanto, la nieve se habrá derretido, tu ropa habrá perdido la rigidez del hielo y habrás estado tumbado en el barro en los dulces días de primavera. Y sumergidos en el barro y la podredumbre tu frente y tus ojos, que siempre estaban vueltos hacia arriba.

Había hecho un voto para que volvieras. Lo habríamos disuelto juntos.

Pero no has vuelto. Aún me encontraré, creo, hablando contigo en muchos momentos de esta pobre vida. ¡Tan delgado es el velo que separa esta vida de la tuya! Seguiremos caminando juntos, como caminábamos uno al lado del otro por los senderos de la estepa en los días de verano.

Colgaba al sol, ¿recuerdas? Interminablemente el canto siempre cambiante de las codornices, la voz de ese sabor de lo desconocido que nos rodea.

Tal vez tus huesos blancos mezclados con tierra y hierba aún escuchen ese canto rústico, entonces tan evocador, y sonará como un grito».

Evangelio

Cristo, rey de la verdad. Solemnidad de Cristo Rey (B)

Joseph Evans comenta las lecturas de la Solemnidad de Cristo Rey (B) y Luis Herrera ofrece una breve homilía en vídeo.

Joseph Evans·21 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 2 minutos

La solemnidad de Cristo Rey apunta hacia la segunda y definitiva venida de Nuestro Señor, al final de los tiempos, cuando toda la humanidad -todos los que han vivido- comparecerán juntos ante Él y juzgará a cada uno según sus obras. Todo lo oculto saldrá a la luz, la bondad de los justos se mostrará a todos, el engaño de los falsos será desenmascarado y la justicia de Dios será plenamente reivindicada.

En el evangelio de hoy se muestra al Cristo que será juez. El que juzgará a todos en justicia y verdad se encuentra solo ante un funcionario corrupto que sólo puede pensar en términos mundanos. “¿Eres tú el rey de los judíos?” pregunta Pilato a Jesús. En otras palabras, ¿pretendes ser rey? ¿Eres una amenaza para el poder romano? Roma, otrora ese gran imperio que ahora es meramente un tema para lecciones de historia y arqueología. Pero lo que llama la atención en este episodio es cómo cambian las tornas: Jesús, físicamente atado y humanamente impotente, parece estar juzgando a Pilato más que Pilato a él. Totalmente impávido, Jesús se limita a insistir en que su reino no es de este mundo y que, aunque sí, es un rey, su realeza consiste en “dar testimonio de la verdad”.

Tendemos a asociar el poder, y desde luego la política, con la falsedad. Jesús nos ayuda a ver que la verdadera autoridad está inextricablemente ligada a decir la verdad. Nos gobernamos mejor a nosotros mismos, y a la situación, cuando decimos la verdad. De hecho, una parte fundamental de la revelación de la realeza de Cristo, cuando venga al final de los tiempos, consiste en sacar a la luz la verdad. Así lo hará en el juicio universal (cfr. Lc 8,17; 12,3; Ap 20,12-15). Los reyes juzgan y ciertamente lo vemos en Dios (véase Gn 18,25; Sal 10,16-18; 98,9; Is 33,22), y la justicia consiste en discernir y seguir la verdad en cada situación. Cristo es tan rey, gobierna tanto cada situación, que puede someterse sin miedo a un juicio injusto, diciendo él mismo la verdad con claridad, pero sin amargura ni ira (ver también Jn 18,20-23). La realeza de Cristo en la tierra nunca tuvo que ver con el poder mundano. De hecho, siempre lo evitó (véase Jn 6,15). Fue siempre un servicio a la verdad y a la justicia, con profunda humildad (ver Jn 13,3-17). Como cristianos, estamos llamados a imitar a Cristo en su realeza que proclama la verdad, dominando nuestro miedo y nuestra vanidad para dar testimonio nosotros mismos de la verdad en cualquier situación.

La homilía sobre las lecturas de la Solemnidad de Cristo Rey (B)

El sacerdote Luis Herrera Campo ofrece su nanomilía, una pequeña reflexión de un minutos para estas lecturas del domingo.

Vaticano

Carlo Acutis será proclamado santo en 2025

La consideración de que “los laicos no son los últimos, sino que tienen sus propios carismas con los que contribuyen a la misión de la Iglesia”; el anuncio de canonización del beato Carlo Acutis en el Jubileo de los Adolescentes de 2025; un encuentro mundial sobre los Derechos de los Niños, y los mil días de la guerra de Ucrania, han ocupado el corazón del Papa esta mañana.

Francisco Otamendi·20 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 3 minutos

Como continuación a su catequesis en la Audiencia de esta mañana, en la que ha manifestado que “los laicos no son una especie de colaboradores externos o tropas auxiliares del clero, sino que tienen sus propios carismas y dones con los que contribuir a la misión de la Iglesia”, el Papa Francisco ha anunciado esta mañana la canonización del beato Carlo Acutis, el joven italiano que murió con sólo 15 años por una leucemia fulminante, y caracterizado por un gran amor a la Eucaristía. 

Además, el Papa ha señalado también la canonización del beato Pier Giorgio Frassati. El beato Carlos Acutis será canonizado en el Jubileo de los Adolescentes del 25 al 27 de abril en 2025, mientras Pier Giorgio Frassati será elevado a los altares en el Jubileo de los jóvenes, que tendrá lugar del 28 de junio al 3 de agosto del año que viene.

El Espíritu Santo habla mediante los carismas

La decisión del Papa entronca con el tema de la Audiencia de este miércoles 20 de noviembre, en el que la catequesis del Papa Francisco se ha centrado en el tema ‘Los dones de la Esposa. Los carismas, dones del Espíritu para el bien común’, basándose en la primera Carta de San Pablo a los Corintios (1 Cor 12,4- 7.11).

El Romano Pontífice ha comenzado señalando que “en las últimas tres catequesis hemos hablado de la obra santificadora del Espíritu Santo, que se realiza en los sacramentos, en la oración y siguiendo el ejemplo de la Madre de Dios”. 

Pero hoy, ha propuesto escuchar “lo que dice un famoso texto del Concilio Vaticano II: ‘Además, el mismo Espíritu Santo no sólo santifica y dirige el Pueblo de Dios mediante los sacramentos y los misterios y le adorna con virtudes, sino que también distribuye gracias especiales entre los fieles de cualquier condición, distribuyendo a cada uno según quiere sus dones’ (Lumen Gentium, 12)”. Y se ha referido entonces a “este segundo modo en que el Espíritu Santo obra en la Iglesia, que es la acción carismática”.

Valorar el papel del laicado en la Iglesia

“Primero, el carisma es un don concedido para el bien común, para el bien de la Iglesia, más que para la propia santificación; y segundo, el carisma es un don concedido “a uno”, o “a algunos” en particular, no a todos del mismo modo, y esto es lo que lo distingue de la gracia santificante, de las virtudes teologales y de los sacramentos, que son idénticos y comunes a todos”, ha manifestado el Santo Padre.

A continuación, el Papa ha añadido que “entender la riqueza de los carismas ayuda a valorar el papel del laicado en la Iglesia, ya que los laicos poseen carismas y dones propios con los que contribuyen de una manera especial a su misión en el mundo. No se trata de capacidades espectaculares, sino de dones ordinarios que adquieren un valor extraordinario por ser inspiración del Espíritu Santo”.

En este sentido, el Romano Pontífice ha subrayado en su catequesis que “Benedicto XVI dijo: “Mirando a la historia de la época post-conciliar, se puede reconocer la dinámica de la verdadera renovación, que frecuentemente ha adquirido formas inesperadas en momentos llenos de vida y que hace casi tangible la inagotable vivacidad de la Iglesia, la presencia y la acción eficaz del Espíritu Santo”.

Carismas al servicio de la Iglesia

En su saludo a los peregrinos en diversas lenguas, el Sucesor de Pedro ha alentado: “Pidamos al Espíritu Santo que nos conceda crecer en la virtud de la caridad, para que descubramos y pongamos nuestros carismas al servicio de la Iglesia y agradezcamos los carismas de los demás, reconociendo que contribuyen al bien de todos. Que el Señor los bendiga y la Virgen Santa los cuide”.

“Tenemos que redescubrir los carismas, porque esto hace que la promoción del laicado y de las mujeres en particular se entienda no sólo como un hecho institucional y sociológico, sino en su dimensión bíblica y espiritual”, ha señalado Francisco.

Finalmente, tras recordar que los laicos “tienen sus propios carismas y dones con los que contribuir a la misión de la Iglesia”, ha subrayado que “al hablar de carismas, hay que disipar de inmediato un malentendido: el de identificarlos con dones y capacidades espectaculares y extraordinarios; se trata, en cambio, de dones ordinarios, cada uno tiene el propio carisma, que adquieren un valor extraordinario cuando son inspirados por el Espíritu Santo y encarnados en las situaciones de la vida con amor”.

El Papa ha concluido afirmando que “la caridad multiplica los carismas, hace que el carisma de uno, de una sola persona, sea el carisma de todos”.

Ucrania: que el diálogo sustituya a las armas

El Papa ha anunciado asimismo un Encuentro mundial por los Derechos de los Niños el próximo 3 de febrero en Roma (se ha fotografiado con decenas de ellos en la Plaza de San Pedro), y ha recordado con inmenso pesar los mil días de la guerra de Ucrania, para pedir que “el diálogo sustituya a las armas”. En este contexto, ha leído unos párrafos de una carta que le ha dirigido un universitario ucraniano.

El Romano Pontífice ha recordado también la solemnidad de Cristo Rey del Universo del próximo domingo, y la fiesta de la Presentación de la Virgen María de mañana, en la que se celebra la Jornada pro Orantibus.

El autorFrancisco Otamendi

América Latina

Los obispos de Chile contra el Decreto del Gobierno sobre la enseñanza de Religión

El Ministerio de Educación de Chile ha emitido un decreto que modifica la regulación de la enseñanza religiosa, generando críticas por parte de la Iglesia católica y otras confesiones, que argumentan que el decreto afecta la libertad religiosa y la autonomía de las confesiones para determinar la idoneidad de los profesores de religión, al permitir la intervención estatal en decisiones internas.

Pablo Aguilera L.·20 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 2 minutos

El 2 de septiembre de 2024 el Ministerio de Educación de Chile, sorprendiendo a la Iglesia Católica y a las demás confesiones religiosas, emitió un decreto –nº 115- para cambiar aspectos importantes de la educación religiosa en las escuelas del país, modificando el Decreto Supremo N° 924 de 1983. Fue enviado a la Contraloría General de la República para su “toma de razón” (aprobación).

Autonomía de las confesiones 

La Conferencia Episcopal presentó un escrito con sus objeciones en la Contraloría, apoyado por el Comité Nacional de Educación Evangélica (CONAEV) que adhirió a esa solicitud y se espera que otros líderes religiosos hagan lo mismo. Se argumenta que el nuevo Decreto, lesiona la libertad religiosa y afecta seriamente la autonomía de todas las confesiones religiosas para determinar la idoneidad de quienes pueden enseñar religión. Esto, porque establece un procedimiento en que el Estado intervendría en caso de revocación o denegación del certificado de idoneidad, revisando las decisiones de las autoridades religiosas. 

Según los argumentos presentados, el Estado debe reconocer la autonomía de las confesiones para regular sus propios asuntos, incluyendo el determinar la idoneidad de los profesores que enseñan religión, lo cual es parte fundamental de la libertad religiosa, del derecho de asociación y de educación. Precisó que enseñar religión no es equivalente a enseñar otra asignatura. 

Idoneidad del profesorado de Religión

Según el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, esta libertad incluye la enseñanza de sus doctrinas, implicando la potestad de las confesiones de decidir quién está capacitado para transmitir sus creencias. El Decreto n° 115, sin embargo, impide a las confesiones religiosas requerir conjuntamente un título profesional y un certificado de idoneidad, imposibilitando un juicio integral de los elementos necesarios para evaluar a los profesores de religión. Este cambio no solo desnaturalizaría el certificado de idoneidad, sino que limita el derecho de las confesiones a garantizar la rectitud doctrinal y moral de quienes enseñan la fe.

El Decreto establece que el certificado de idoneidad debe solicitarse solo una vez, haciéndolo permanente, lo que sería incompatible con la naturaleza mutable de la idoneidad en términos doctrinales y morales. Además, se otorgan nuevos plazos y requisitos que obligan a las autoridades religiosas a responder y justificar denegaciones de certificados en un periodo de 30 días, lo cual, según la Conferencia, es una intervención indebida del Estado en el tiempo que estas confesiones requieren para evaluar a los docentes, limitando severamente su autonomía.

La solicitud de la Iglesia busca una revisión exhaustiva del decreto a la luz de la Constitución, de los tratados internacionales y las leyes que reconocen y garantizan la libertad religiosa, de manera que no tome razón del referido Decreto y lo devuelva al Ministerio de Educación.

El autorPablo Aguilera L.

Argumentos

La crisis de la Iglesia en Holanda a mediados del s. XX

En este segundo artículo sobre el catolicismo en Holanda se aborda el papel de la Iglesia en la Segunda Guerra Mundial y la posguerra.

Enrique Alonso de Velasco·20 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 6 minutos

Artículos de la serie de la Historia de la Iglesia en Holanda:

Como vimos en un primer artículo sobre la Iglesia en Holanda, tras la reforma protestante empezó un largo periodo (1573-1795) en el que la provincia eclesiástica holandesa pasó a ser tierra de misión, y los católicos fueron severamente discriminados, lo cual resultó en una disminución paulatina de su número y un bajón en su nivel de educación, su posición económica y, por tanto, su influencia en la sociedad. Cuando en 1853 la jerarquía fue restituida (38% de la población era entonces católica), los obispos y sacerdotes católicos, ayudados por las órdenes y congregaciones religiosas, pusieron en marcha numerosas iniciativas para ayudar a la población católica a salir de su grave situación de ignorancia religiosa, subdesarrollo y pobreza. 

Pocos laicos tenían la formación debida, el poder económico y la influencia social necesarias para contribuir a este resurgimiento espiritual y social de los católicos. Así, desde el comienzo del ‘resurgir católico’, un papel primordial fue desempeñado –por necesidad– por los clérigos y religiosos. ¿Contribuiría esto a cierta pasividad del laicado en la construcción de una sociedad más justa y cristiana, y también en su responsabilidad personal como ciudadanos y cristianos? Probablemente.

Revitalización católica

Sea como fuere, la tarea de revitalización católica se abordó con vigor y los resultados no tardaron en materializarse: construyeron iglesias, fundaron colegios y hospitales, editaron periódicos y otros medios de información, y se agruparon en un partido político que hiciera valer sus derechos. A mediados del siglo XX, los católicos habían recuperado gran parte de sus derechos en el terreno cultural, social y económico frente a sus compatriotas protestantes. Se habían organizado de tal manera, que llegaron a formar un grupo o proyecto bastante uniforme de presión política, social y mediática, ligado a la «columna católica», que algunos denominaron «la Causa Católica» («de Roomsche Zaak») en el que la vida espiritual fue pasando paulatinamente a un segundo plano y el movimiento social de ayuda a los católicos a un primero. 

En este proyecto, la Iglesia –y el clero en particular– adquirió mucho poder, muy útil para ayudar a la población católica, aunque no exclusivamente en el terreno espiritual. En algunos casos se dieron excesos y partidismos, y se creó un espíritu de grupo que fácilmente podía asfixiar el legítimo deseo de libertad en asuntos temporales. Esto no favoreció el desarrollo de la libertad interior en los católicos, libertad tan arraigada en la idiosincrasia holandesa. En muchos aspectos, los laicos holandeses desarrollaron una dependencia del clero poco sana, ya que les eximía –o eso pensaban–  de su responsabilidad personal.

Verdadera libertad

Si la libertad nos ayuda a vivir la moral de Cristo, es lógico que la falta de libertad interior (y una excesiva dependencia del clero) pueda llevar primero a una vivencia abrumada, amargada de la fe, vista primariamente como obligación y, a la larga, al rechazo de la vida y la moral cristianas.

Con todo, las perspectivas de la Iglesia en Holanda aparentaban ser inmejorables a mediados del siglo XX: se ordenaban unos 400 sacerdotes por año (regulares y seculares, datos de 1936-1945), había unos 4 millones de fieles obedientes a la jerarquía, con una asistencia media a misa superior al resto de Europa; había un sacerdote o religioso/a por cada 100 católicos (en España 0.42, en Bélgica 0.79, en Francia 0.45) , con unas estructuras de eficacia y organización imponentes, siempre a las órdenes del episcopado. La Iglesia holandesa aparentaba ser una fortaleza indestructible al servicio de Roma, y esta situación continuó así al menos externamente hasta bien entrados los años 60 .

La II Guerra Mundial

La II guerra mundial, con la invasión del país por el ejército alemán, fue una dura prueba para todos los holandeses. Los obispos, liderados por el primado de Holanda y arzobispo de Utrecht, Johannes de Jong, apenas recibían noticias de que los pro-nazis se infiltraban en las asociaciones católicas con el fin de utilizarlas para sus propios fines, decretaban que todos los católicos se retiraran de ellas, lo cual sucedía inmediatamente. Esta manera de ofrecer resistencia al invasor no hizo más que aumentar el prestigio de los obispos. 

Mons. de Jong no tenía pelos en la lengua, y emitió diversos mensajes para que los católicos no colaboraran en absoluto con medidas injustas del invasor: el domingo 21 de febrero de 1943 se leyó en todas las iglesias católicas una declaración de protesta ante los crímenes nazis contra los judíos y contra los ciudadanos holandeses. Como represalia, las autoridades de ocupación alemanas reaccionaron muy duramente: el Comisario del Reich en Holanda, Arthur Seyss-Inquart, ordenó la deportación de todos los judíos bautizados católicos (que hasta ese momento se habían librado). Aunque bastantes de ellos consiguieron ocultarse, para otros muchos (entre los que se contaron Edith Stein y su hermana Rosa) esta «razzia» significó la muerte. A pesar de la firmeza de Mons. de Jong y otros líderes protestantes, tres cuartas partes de los judíos residentes en Holanda murieron durante la guerra, mayoritariamente en campos de concentración.

Posguerra

Durante la guerra, los diferentes grupos de la población sufrieron juntos y tuvieron que cooperar mutuamente para sobrevivir y resistir al opresor. Para muchos –no sólo los católicos– esta experiencia fue decisiva para respetar y valorar más a los pertenecientes a «las otras columnas». Aunque tras la guerra las asociaciones confesionales comenzaron de nuevo a funcionar y reemprendieron sus actividades, las primeras grietas en las columnas se habían causado ya. Especialmente entre los intelectuales empezó un proceso –conocido como «doorbraak» (ruptura)– de apertura, de acercamiento a protestantes, liberales y –sobre todo socialistas, que con frecuencia iba unido a una actitud crítica hacia la Jerarquía, que parecía seguir aferrada a la «columna» católica.

En 1954 los obispos holandeses promulgaron el «Mandement» (literalmente «mandamiento» o «mandato»), un documento en el que exhortaban a los católicos a mantenerse unidos y fieles a su fe y, para lograrlo, seguir apoyando –incluso con su voto en caso de elecciones– a las instituciones confesionales. Los obispos prevenían a los fieles contra los enemigos del catolicismo, nombrando expresamente el liberalismo, el humanismo sin Dios, el marxismo y la Asociación Holandesa para la Reforma Sexual. La exhortación finalizaba amenazando con penas canónicas a los católicos afiliados o simpatizantes de sindicatos socialistas. 

«Mandement»

Una de las razones que motivaron la publicación del «Mandement» la formaron los síntomas de enfermedad que desde algunas décadas se empezaban a vislumbrar entre los católicos. Con este escrito, los obispos creyeron poder parar el proceso de «ruptura» o disolución de la columna católica que se estaba consumando. Pero según algunos prominentes católicos, la evolución en la Iglesia católica holandesa era imparable, y el «Mandement» estaba ya anticuado desde el día de su publicación.

Independientemente del «Mandement» de los obispos, cierto es que el periodo de la posguerra se caracterizó por un nuevo optimismo: la convicción –o el deseo– de que lo antiguo, lo anticuado, lo cerrado (¿las «columnas»?) había pasado y ahora llegaba una nueva etapa, una nueva sociedad moderna, abierta. A este optimismo contribuyeron en gran medida la marcada cooperación internacional y el desarrollo económico, facilitado por el Plan Marshall, que trajo prosperidad y perspectivas de una paz duradera tras muchos años de renuncias debidos a las dos grandes guerras y la crisis económica de entreguerras.

Época de cambios en la Iglesia

Esta actitud de apertura hacia lo nuevo ciertamente no era exclusiva de Holanda; también tuvo influencia sobre el pensamiento científico, filosófico y teológico a nivel mundial. La postura de los católicos ante las ciencias humanas dio un giro notable, y las ciencias sociales y la psicología pasaron a ser tema obligado de estudios y publicaciones, especialmente en algunos países de mayor tradición filosófica. 

Durante la década de los 1950, una serie de innovaciones ideológicas captó la atención de numerosos teólogos y filósofos, también holandeses. La «nouvelle théologie» francesa y más tarde, paralelamente, la teología transcendental de la escuela de Karl Rahner en Alemania, fueron leídas efusivamente y transmitidas al público holandés de forma divulgativa, gracias al arsenal de publicaciones y cadenas de radio y televisión de que disponía la «columna» católica. 

Ambas corrientes teológicas deseaban establecer un diálogo entre la tradición católica y «el mundo». Para ello, buscaban un nuevo fundamento científico en el método histórico-crítico aplicado a la teología bíblica y dogmática. Uno de los teólogos que más asimilaron estas nuevas ideas, y que mayor influencia ejercieron en la opinión pública en Holanda fue el dominico belga Edward Schillebeeckx, catedrático de Nimega. 

Consecuencias de la nueva teología

El gran respeto de los católicos holandeses a sus instituciones y obispos, y la escasa tradición especulativo-teológica del pueblo fiel, explican quizás cómo fue posible que estas ideas tan innovadoras fueran aceptadas tan repentinamente por las grandes masas sin apenas sentido crítico y sin ser capaces de integrarlas en la tradición de la Iglesia, derivando en numerosos casos hacia posiciones no precisamente católicas y ni siquiera cristianas.

Además de los teólogos, los intelectuales católicos más influyentes –incluyendo ya algunos laicos– fueron cambiando en poco tiempo sus esquemas de pensamiento filosófico. El nuevo marco de referencia pasó a consistir casi exclusivamente en la fenomenología existencial. Así se denominó en Holanda al conjunto de corrientes filosóficas y psicológicas de corte empírico, en las que las ciencias sociales y la antropología tenían un lugar prominente, pero sin el ancla ontológica de la metafísica. 

Además de contribuir a la renovación del pensamiento y de la teología –un mérito innegable–, la fenomenología existencial y las nuevas ideas teológicas causaron en muchos pensadores una ruptura con el legado cultural católico tradicional. Este cambio de marco de referencia intelectual empezó ya antes de los años 1950 a erosionar los fundamentos teológicos, hasta entonces neo-tomistas, que habían quedado anticuados por no haber sido realmente asimilados, sino quizás únicamente repetidos mecánicamente. 

Resumen de la Iglesia en Holanda

Resumiendo, no se puede reprimir la impresión de que el catolicismo holandés, en medio de la exuberancia de organizaciones y aparato exterior, adolecía de interioridad. Ya en 1930 se podía leer en una revista católica un interesante análisis del catolicismo holandés: «¿Qué es lo que nos falta? ¿No podría ser ‘el Espíritu que da vida’? ¿No es posible que nos hayamos dejado aletargar por el éxito externo, y que por eso hemos descuidado demasiado lo interior?».

Podríamos concluir diciendo que la Iglesia en Holanda se mostraba hasta la década de los 1960 como un edificio imponente, pero en su interior se estaban desarrollando una serie de cambios impetuosos que llegarían a tener consecuencias desastrosas: una crisis de la que trataremos en un siguiente artículo.

El autorEnrique Alonso de Velasco

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Vocaciones

Vinel Rosier: «La Iglesia de Haití sostiene la esperanza del pueblo»

Vinel Rosier es un sacerdote haitiano que trabaja con los jóvenes de su país para que no pierdan la esperanza ante la crisis que atraviesa el país.

Espacio patrocinado·19 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 3 minutos

Vinel Rosier nació el 10 de octubre de 1989 en Cavaillon, Haití, el tercero de una familia de 4 hijos. Recibió el diaconado el 25 de mayo de 2019 y fue ordenado sacerdote el 31 de agosto del mismo año en la catedral de Les Cayes, Haití. Su primer destino pastoral fue como vicario en la parroquia Sacré-Cœur des Cayes, tarea que compaginaba con la dirección del movimiento «KIRO», formado por jóvenes cristianos, junto a la enseñanza del catecismo en escuelas de secundaria y dando clases de introducción a la Biblia a los jóvenes que estaban a punto de entrar en el Seminario Mayor.

¿Cómo descubrió su vocación al sacerdocio?

—De niño me preparé para hacer la Primera Comunión en un colegio dirigido por religiosas. En una clase, una de las monjas preguntó qué queríamos ser de mayores y yo le contesté que quería ser sacerdote. Ese deseo fue creciendo dentro de mí, fomentado por el hecho de que me uní a un grupo de monaguillos que ayudaba en Misa. Allí me impresionó la disponibilidad de los sacerdotes y su disposición para servir. Al cabo del tiempo, le pedí al párroco que me enviara a discernir mi vocación, y eso es lo que hice durante dos años hasta que, en 2010, empecé el programa propedéutico. 

¿Cuál fue la reacción de su familia y amigos cuando les dijo que quería ser sacerdote?

—Aunque, en un primer momento, había un poco de ansiedad y oposición entre mis familiares, al final estaban contentos. Mi familia pensaba que ya no podría ir a mi barrio, que  tendría otros amigos y otra familia. Pero al final, su alegría superó a la prevención porque es un motivo de orgullo para la familia entregar un sacerdote a la Iglesia. Mis amigos, sobre todo mis compañeros de clase, tenían el mismo sentimiento de descontento al principio pero, cuando vieron mi determinación de entrar en el seminario, finalmente aceptaron mi elección.

¿Cómo describiría a la Iglesia en Haití?

—Haití era un país predominantemente católico, tanto que la gran devoción mariana de la gente fue el origen de una intervención milagrosa de la Virgen María cuando la epidemia de viruela asolaba a la población. El 8 de diciembre de 1942, el presidente del país permitió a las autoridades eclesiásticas consagrar Haití a Nuestra Señora del Perpetuo Socorro.

Pero entre finales del siglo XIX y principios del XX, empezó a crecer el protestantismo. Con la ocupación estadounidense de Haití, se produjo una mayor consolidación de la presencia protestante en Haití y esto ha causado un declive del catolicismo en el país. 

Aunque la presencia del catolicismo sigue siendo fuerte en el país. Es verdad que nuestra Iglesia depende totalmente de la ayuda exterior, pero con nuestros limitados recursos intentamos apoyar a las personas allí donde el Estado está ausente. 

A pesar de todos los problemas y dificultades, la Iglesia de Haití sigue siendo una fuente de esperanza, que trabaja por un mañana mejor.

¿Cuáles son los retos a los que se enfrenta la Iglesia en su país?

—Debido a la inestabilidad política los retos a los que se enfrenta la Iglesia son cada vez más intensos. Casi todos los días vemos la violencia indiscriminada de bandas que operan con impunidad. Todos los días se registran actos de asesinato y bandidaje. Las bandas siembran el terror y la desesperación, y por eso los habitantes se han echado a la calle para escapar, a veces sin saber siquiera adónde van.

Haití es un país realmente amenazado, porque las instituciones del Estado se han vuelto frágiles y los dirigentes son incapaces de estabilizar la situación. Ante esto, la Iglesia desempeña su papel, recordando la necesidad urgente de una transformación de las mentalidades. 

La Iglesia en Haití trabaja para que los jóvenes en particular, y los haitianos en su conjunto, no se dejen llevar por el desánimo, y sostiene la esperanza del pueblo a través de su misión profética y de sus intervenciones en el campo de la caridad.

¿Qué es lo que más aprecia de su formación en Roma? 

—Lo que más aprecio de mi formación es la amplitud de miras que adquirí en la universidad. Descubrí otras culturas gracias a nuestros encuentros e intercambios con universitarios de otros países. He podido hacer amigos y descubrir mucha riqueza y belleza. 

Mundo

Pío XII y el nacionalsocialismo

El origen de la leyenda negra sobre Pío XII puede situarse con precisión: el 20 de febrero de 1963, fecha del estreno de la obra teatral “El Vicario” de Rolf Hochhuth. Esta obra presentaba a Pío XII como un cínico sin escrúpulos que, obsesionado con combatir el comunismo, había justificado e incluso apoyado las acciones nazis.

José M. García Pelegrín·19 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 6 minutos

El Papa Pío XII representa posiblemente el caso más dramático de transformación en la percepción pública del siglo XX. Como señala el historiador y periodista Sven Felix Kellerhoff, “probablemente no exista ninguna otra figura histórica de rango mundial que, como Eugenio Pacelli, haya pasado en tan poco tiempo después de su muerte de ser un modelo ampliamente respetado a una persona condenada por la mayoría”.

Durante su vida y en el momento de su fallecimiento, el 9 de octubre de 1958, Pío XII gozaba de un prestigio internacional incuestionable, reflejado en hechos como su aparición en la portada de Time con la cita “The work of Justice is Peace”. En Alemania se le dedicaron calles y avenidas, mientras que la primera ministra israelí Golda Meir lo describió como “un gran amigo del pueblo de Israel”.

El rabino jefe de Roma, Israel Zolli, quien posteriormente se convirtió al catolicismo adoptando el nombre de Eugenio en honor al Papa, defendió esta postura: “Ningún héroe de la historia ha comandado un ejército tan combativo como el que Pío XII movilizó contra Hitler. Dirigió una batalla incruenta pero implacable”. El Gran Rabino de Jerusalén, Isaac Herzog, expresó en 1944: “El pueblo de Israel nunca olvidará lo que Su Santidad está haciendo por nuestros desafortunados hermanos y hermanas en esta hora más trágica”. La Unión de Comunidades Judías Italianas llegó a acuñar una medalla de oro en su honor.

Pío XII, ¿el Papa de Hitler?

Sin embargo, esta percepción experimentó un giro radical poco después, hasta el punto de que, en 1999, John Cornwell publicó un libro titulado “Hitler’s Pope” (“El Papa de Hitler”). El origen de la leyenda negra sobre el papa Pacelli puede situarse con precisión: el 20 de febrero de 1963, fecha del estreno de la obra teatral “El Vicario” de Rolf Hochhuth. Esta obra presentaba a Pío XII como un cínico sin escrúpulos que, obsesionado con combatir el comunismo, había justificado e incluso apoyado las acciones nazis. Quien se sorprenda de que una obra de teatro pudiera tener tanta repercusión subestima el poder de la ficción; piénsese por ejemplo en “El código de Da Vinci”.

La realidad histórica, sin embargo, contradice frontalmente esta caracterización. Ya en 1924, siendo Nuncio Apostólico en Múnich, Pacelli demostró una clarividencia excepcional al telegrafiar a la Secretaría de Estado vaticana: “El nacionalsocialismo es la herejía más grave de nuestro tiempo”. Esta declaración resulta especialmente significativa considerando que, en aquel momento, la Iglesia identificaba al comunismo como su principal amenaza.

Los propios líderes nazis lo consideraban uno de sus enemigos más peligrosos. Joseph Goebbels, en su diario, menciona a Pío XII más de cien veces, siempre en tono de advertencia. Por ejemplo, respecto al discurso navideño papal de 1939, Goebbels anotó: “Lleno de ataques muy mordaces y escondidos contra nosotros, contra el Reich y el nacionalsocialismo”.

El acto de protesta

Un momento crucial en la oposición de Pacelli al régimen nazi se produjo durante su etapa como Secretario de Estado, bajo el pontificado de Pío XI. Fue uno de los principales artífices de la histórica encíclica “Mit brennender Sorge” del 14 de marzo de 1937, cuyo título fue modificado personalmente por él, sustituyendo la palabra “großer” (“Con gran preocupación”) por “brennender” (“Con preocupación ardiente”). Esta encíclica, la única redactada en otro idioma distinto del latín, constituyó el acto de protesta más significativo durante los doce años del régimen nazi. Su distribución clandestina en Alemania permitió su lectura simultánea desde los púlpitos de numerosas iglesias católicas.

La represalia nazi fue inmediata y severa: además de la quema sistemática de ejemplares, más de 1.100 sacerdotes fueron detenidos, y 304 de ellos acabaron deportados a Dachau. Estos acontecimientos dejaron una huella indeleble en la conciencia de Pacelli, quien comprendió que los desafíos públicos al régimen nazi podían tener consecuencias devastadoras para los católicos.

Pío XII y los refugiados judíos

Durante la ocupación alemana de Roma, entre el 10 de septiembre de 1943 y el 4 de junio de 1944, la intervención directa de Pío XII resultó crucial para la salvación de los judíos romanos. El Papa ordenó abrir no sólo los conventos de clausura, sino también el Vaticano y su residencia veraniega en Castelgandolfo para dar refugio a los perseguidos. Las cifras son elocuentes: 4.238 judíos romanos encontraron refugio en 155 conventos de la ciudad, otros 477 fueron acogidos en el Vaticano, y aproximadamente 3.000 más hallaron protección en Castelgandolfo.

En la propia habitación papal, varias mujeres judías embarazadas dieron a luz; cerca de 40 niños nacieron allí, y muchos recibieron el nombre de Eugenio o Pío como agradecimiento. Como señala el historiador Michael Hesemann: “En ningún país de Europa ocupado por los nazis sobrevivió un porcentaje tan elevado de judíos como en Italia; en ninguna otra ciudad fueron tantos como en Roma, gracias a Pío XII y a su prudente iniciativa”.

Las críticas que acusan a Pío XII de no haber protestado suficientemente ante las autoridades nazis ignoran las consecuencias contraproducentes que tales protestas podían tener. El caso más ilustrativo es el del obispo católico de Utrecht en agosto de 1942: su protesta pública contra la deportación de judíos en los Países Bajos provocó que los nazis incluyeran también a los católicos de origen judío en las deportaciones. Entre las víctimas se encontraba Edith Stein, conversa del judaísmo al cristianismo y monja carmelita. 

Ya en 1942 Pío XII comentó a su confidente Don Pirro Scavizzi: “Una protesta por mi parte no sólo no habría servido de ayuda a nadie, sino que habría desatado las cóleras contra los judíos y multiplicado las atrocidades. Quizá hubiera despertado las alabanzas del mundo civilizado, pero a los pobres judíos solo les habría producido una persecución más atroz que la que sufrieron”.

Una investigación histórica

Tras la publicación de “Le Bureau – Les juifs de Pie XII” (edición italiana: “Pio XII e gli ebrei”) por Johan Ickx, director del Archivo Histórico del Departamento para las Relaciones con los Estados de la Secretaría de Estado de la Santa Sede, se han revelado tanto los éxitos como las limitaciones de la diplomacia vaticana durante la Segunda Guerra Mundial. Ickx ha analizado documentos del pontificado de Pío XII (1939-1958), abiertos a la investigación en marzo de 2020. En sus 400 páginas divididas en 18 capítulos, documenta la extensa red de vías de escape para perseguidos organizada por el Papa, junto con una red de clérigos distribuida por toda Europa cuyo único objetivo era salvar vidas.

Una de las revelaciones más importantes de Ickx es que Pío XII estableció, al inicio de la guerra, una unidad específica en la Secretaría de Estado dedicada exclusivamente a gestionar las peticiones de ayuda de judíos perseguidos en Europa. Esta “oficina” centralizó información sobre deportaciones, redadas y el exterminio sistemático en los campos de concentración nazis. La documentación demuestra que esta oficina actuaba bajo instrucciones directas del Papa. Ickx establece un paralelo con “la lista de Schindler”, denominándola “lista Pacelli”, aunque reconoce que la creación de un expediente no garantizaba una intervención exitosa en cada caso.

Un ejemplo significativo fue la protesta de Monseñor Cesare Orsenigo, sucesor de Eugenio Pacelli como Nuncio Apostólico en Berlín, ante las autoridades alemanas en abril de 1940 por el trato inhumano a sacerdotes polacos en campos de concentración, especialmente en Sachsenhausen. En septiembre del mismo año, Orsenigo volvió a intervenir por los sacerdotes católicos en aislamiento. El régimen nazi se negó a liberarlos, temiendo que generaran propaganda antinazi en el extranjero. La única concesión obtenida fue la concentración de los sacerdotes en el campo de Dachau.

El 20 de marzo de 1942, el nuncio en Eslovaquia, arzobispo Giuseppe Burzio, intervino ante el gobierno eslovaco para detener la deportación de judíos, respondiendo a una petición del rabino de Budapest. La oficina papal envió una nota oficial al embajador eslovaco ante la Santa Sede declarando: “La cuestión judía es una cuestión de humanidad. Las persecuciones contra los judíos en Alemania y en los países ocupados o sometidos son una ofensa a la justicia, a la caridad y a la humanidad. El mismo trato brutal se extiende a los judíos bautizados. Por tanto, la Iglesia católica está plenamente autorizada a intervenir tanto en nombre de la ley divina como de la ley natural”. Un mes después, el nuncio en Budapest, Angelo Rotta, informó que las deportaciones se habían intensificado, sugiriendo que las intervenciones vaticanas podían haber exacerbado la represión nazi en algunos casos.

Guerra contra la Iglesia católica

Ickx dedica 23 páginas a un caso que ilustra las tácticas nazis para neutralizar las intervenciones vaticanas. En febrero de 1943, una nota de protesta de la Santa Sede dirigida al ministro de Asuntos Exteriores alemán, Joachim von Ribbentrop, fue interceptada por el secretario de Estado Ernst von Weizsäcker, quien la devolvió al nuncio sin entregarla. Esto permitió a los nazis negar haber recibido protestas oficiales del Vaticano. Sobre este incidente, Ickx concluye: “Quedó claro para la oficina que los nacionalsocialistas habían declarado la guerra a la Iglesia católica. No había nada que la Iglesia pudiera decir o hacer para modificar la política de persecución nazi. No haber comprendido esto explica parcialmente las falsedades que circularon durante décadas sobre Pío XII y su actuación durante la Segunda Guerra Mundial”.

El Vaticano logró algunos éxitos puntuales, como la obtención de visados para profesores judíos alemanes e italianos que escaparon a universidades en Estados Unidos, Uruguay y Brasil. Como atestiguó el diplomático estadounidense Myron Taylor, enviado de Roosevelt a Roma, Pío XII defendió consistentemente a la humanidad sufriente, sin distinción de raza o credo.

La investigación de Johan Ickx permite comprender mejor el papel de la Santa Sede en uno de los períodos más oscuros de la historia reciente, confirmando que Pío XII mantuvo una postura coherente y comprometida en defensa de los judíos y otros perseguidos, en línea con los principios morales que sostuvo durante toda su vida.

Iniciativas

Amigos de Monkole y la juguetera ASÍ ayudan a niños huérfanos con su campaña navideña

Con esta campaña navideña de Amigos de Monkole y la juguetera ASÍ, el 0,8 % de las ventas de los juguetes se destinará a becas escolares para niñas y niños de orfanatos en la República Democrática del Congo.

Teresa Aguado Peña·19 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 2 minutos

La Fundación Amigos de Monkole y la juguetera ASÍ (Asivil) colaboran para hacer una campaña solidaria para estas fiestas navideñas. El 0,8 % de las ventas de las 500 referencias de la juguetera (ASÍ y Así dreams) se donará a orfanatos de la República Dominicana del Congo. Entre los días 24 de noviembre y 24 de diciembre, la marca venderá sus juguetes en sus dos tiendas de Madrid: una en la calle Arenal, nº 20 y otra en Príncipe de Vergara, nº 12.

“Toda la recaudación de esta campaña solidaria irá destinada a financiar 30 becas de escolaridad para niñas y niños de orfanatos ubicados en las periferias de Kinshasa (República Democrática del Congo). Cada beca cuesta 250 euros”, según explica Gabriel González-Andrío, Director de Marketing y Comunicación de la Fundación Amigos de Monkole.

Ayudar a los niños

El presidente de la fundación, Enrique Barrio, destaca que “estamos felices de poder contar con la ayuda de esta importante firma juguetera española para este proyecto solidario. Esperamos que sea el inicio de un acuerdo que dure muchos años, ya que son muchas las necesidades de los niños en el Congo”.

Por su parte, la responsable de Marketing de Asivil, Elena Gómez Eznarriaga, afirma que “es un orgullo poder aportar nuestro granito de arena con esta acción solidaria en beneficio de las niñas y niños de orfanatos en el Congo. Ojalá sea un éxito esta campaña y podamos conseguir muchas becas escolares”.

Amigos de Monkole

Amigos de Monkole llevaba ya 8 años trabajando sobre el terreno de Kinshasa antes de ser fundación. Tiene como objetivo hacer accesible la sanidad en el hospital materno infantil Monkole a personas sin recursos de la capital del Congo, que tiene cerca de 20 millones de habitantes y casi un 70 % son pobres. La fundación también tiene como prioridad ayudar a niñas y niños sin hogar dándoles acceso a la educación. Gracias a Amigos de Monkole, 12 de esos niños han sido becados.

Juguetera ASÍ

Asivil tuvo éxito desde 1942, cuando Josefina Sánchez Ruíz fundó la tienda tienda “Sánchez Ruiz” en la Gran Vía de Madrid, conocida por las muñecas más originales y de mejor calidad importadas de todo el mundo. Hoy está al frente de la firma juguetera la tercera generación de la familia, trabajando junto a sus padres y tíos. “Nuestro compromiso es mantener viva esa magia y llevar nuestras muñecas a todas partes del mundo, con el mismo amor y dedicación que caracterizó a Josefina y Ángela”, explican.

El autorTeresa Aguado Peña

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España

Mons. Argüello: «Ni el Estado ni el mercado pueden salvarnos»

Monseñor Luis Argüello ha inaugurado la sesión plenaria de los obispos españoles recordando la tragedia de la DANA.

Maria José Atienza·18 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 3 minutos

El presidente de la Conferencia Episcopal Española, monseñor Luis Argüello ha inaugurado la sesión plenaria de los obispos españoles con un discurso en el que ha recordado la tragedia de la DANA y algunas de las características de nuestra sociedad actual.

El arzobispo de Valladolid ha desgranado algunos de los principales problemas que la sociedad española afronta en estos momentos. El presidente de la CEE no ha dejado pasar la oportunidad de denunciar los motivos económicos y culturales que destruyen la familia, los matrimonios y han llevado a España a un situación límite en el ámbito demográfico. Junto a esta, el presidente de los obispos españoles se ha referido a la realidad de la inmigración: ”la Iglesia anima a abordar las causas que obligan a salir de la propia tierra, afirmando el derecho a no emigrar, a combatir a las organizaciones que trafican con los emigrantes” y ha hecho además una llamada a la acogida e integración de las personas que huyen a nuestro país en busca de mejores oportunidades.

Dos Españas

Argüello ha lanzado una advertencia ante lo que ha llamado “un ‘déficit’ creciente de vida democrática, caracterizado por la falta de encuentro y de diálogo”. Fijándose en España, el presidente de los obispos ha señalado “dos coordenadas que articulan la andadura de un pueblo: el tiempo, a los españoles nos cuesta reconciliarnos con nuestra historia y, ahora, la lectura “democrática” de la historia es instrumento de polarización (mantenimiento artificial de “las dos Españas”) al servicio de la conquista o mantenimiento del poder; el espacio, nuestro territorio patrio está habitado por “las Españas” que comparten una larga trayectoria de vida social y política expresada en di- versos sones; hoy, de nuevo resuenan las dificultades para armonizar una nación política ‘de nacionalidades y regiones’”.

La tragedia de Valencia

Fijándose en el desastre de la riada ocurrida en Valencia y Albacete, Argüello ha recordado que los sucesos vividos ponen de manifiesto cómo “ni el Estado ni el mercado pueden salvarnos” y ha señalado como “la fraternidad ejercida en estas semanas es un indicador de la bondad que anida en el alma humana como la respuesta adecuada a nuestra vulnerabilidad irremediable. (…) En estos días también hemos visto la rapiña y el populismo de la antipolítica. Por eso, la pregunta sigue en pie: ¿quién nos librará de la culpa originaria de la que brotan la codicia y la dominación?, ¿quién nos dará esperanza ante la muerte? Muchos están descubriendo en estos días que en la entrega de la vida se descubre el secreto de su significado”.

Argüello ha descrito el “círculo vicioso con aparentes perplejidades políticas: los partidos autodenominados progresistas, críticos del sistema económico dominante, promueven y defienden antropologías radicalmente insolidarias en el campo de la vida, los afectos y el «empoderamiento» de identidades parciales y desvinculadas, lo que les hace abandonar de facto una propuesta de verdadera innovación económica y social; mientras los partidos que se resisten a ser denominados conservadores y que, aun con la boca pequeña algunos, dicen defender vida, familia y subjetividad de la sociedad, promueven y defienden un sistema económico y una manera de ejercer la política que promueve la misma práctica antropológica que sus adversarios políticos promueven sin complejos. Una concepción individualista del ciudadano los une, aún sin saberlo o a sabiendas. Y sus prácticas políticas, muy enfrentadas en el foro y en los medios, se complementan y retroalimentan”.

Las preguntas fundamentales

El presidente de la CEE ha realizado cuestionamiento de las raíces de la vida social, cultural y política actual resaltando que la pregunta fundamental siempre es ¿Quien es el hombre?: “La pregunta quizás no sea si el capitalismo funciona, sino qué tipo de humanidad produce; la pregunta no es si la democracia es el mejor de los sistemas de gobierno, sino, unida al estado del bienestar, qué tipo de ciudadanos genera; la pregunta no es si tiene sentido innovar si no qué significa el progreso del hombre. En definitiva, hemos de hacernos la pregunta central: ¿qué es ser hombre, varón y mujer?”

Tras este análisis de la sociedad española, el presidente de la CEE ha centrado su discurso en los temas que se han de abordar en esta Plenaria de los obispos españoles. En relación a la sinodalidad, Mons. Argüello ha recordado que “el anuncio del Evangelio nos concierne a todos y juntos hemos de discernir lo que el Señor nos sugiere para impulsar la misión, tomar las decisiones oportunas, y prever también la evaluación y rendición de cuentas”. El próximo congreso de vocaciones y el impulso de una dinámica vocacional en España será otro de los temas clave de estas jornadas. Estamos llamados a dar un giro en nuestra propuesta pastoral conforme a la antropología vocacional que reconocemos y anunciamos”, ha afirmado el arzobispo de Valladolid, que ha destacado el trabajo de los seminarios españoles sobre cuya reforma y reestructuración se hablará en esta plenaria.

El presidente de los obispos y cerrado su discurso con una llamada a la esperanza, en consonancia con el próximo Jubileo de la Iglesia católica: “el momento que estamos viviendo puede llegar a ser una gran ocasión! Lo será si nuestros ojos iluminados descubren el paso del Señor por la historia”.

Vaticano

La Fundación Ratzinger publica homilías inéditas de Benedicto XVI

En primavera de 2025 verán la luz más de 100 homilías inéditas de Benedicto XVI, recogidas en volumen preparado por la Fundación Ratzinger.

Rome Reports·18 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: < 1 minuto
rome reports88

En primavera de 2025 verán la luz más de 100 homilías inéditas de Benedicto XVI. Gracias a un volumen preparado por la Fundación Ratzinger, estos textos pronunciados por el Papa alemán ante sus amigos y familiares en la Misa del domingo estarán ahora disponibles para todo el mundo.

Según ha adelantado la Fundación Ratzinger, las homilías abarcan varios tiempos litúrgicos, como el Adviento, la Cuaresma y el Tiempo Ordinario.


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España

El cardenal Czerny en Valencia, mientras la Iglesia redobla su esfuerzo

El Prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Integral del Vaticano, cardenal Michael Czerny S.J., comenzó el viernes 15 una visita a las zonas más afectadas por la DANA en Valencia, con el arzobispo Monseñor Enrique Benavent. Mientras tanto, los salones parroquiales se convierten en consultorios, se acoge a personas, y se celebran Misas de campaña.

Francisco Otamendi·18 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 3 minutos

El Prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral del Vaticano, cardenal Michael Czerny, visitó entre el viernes y el sábado diversas zonas afectadas por la DANA, acompañado por el arzobispo de Valencia, Monseñor Enrique Benavent. La visita comenzó en Benetússer, hacia el mediodía estuvo en Picaña y Paiporta, por la tarde tuvo un encuentro con los medios en la iglesia de San Jorge de Paiporta, y el sábado visitó La Torre, también afectada en la ciudad de Valencia.

La presencia del cardenal Czerny supone una muestra más de la preocupación y la cercanía mostrada por el Papa Francisco desde que se produjo la terrible DANA el 29 de octubre de 2024, en la que las provincias de Valencia y Albacete han sufrido las peores inundaciones del siglo, dejando más de 200 personas fallecidas y sus familiares desolados en los pueblos y ciudades afectadas.

Mientras tanto, la Iglesia en Valencia multiplica sus esfuerzos para ayudar a los afectados, e ir restableciendo al mismo tiempo los actos litúrgicos, como la celebración de Misas de campaña fuera de los templos y la conversión de locales parroquiales en consultorios para atender a las personas que lo necesitan.

Salones parroquiales en Aldaia, consultorio médico

Numerosas parroquias de Valencia y de las zonas afectadas por la DANA están habilitando sus espacios para atender las necesidades más urgentes, como el acopio y reparto de alimentos, distribución de ayudas, pero también la asistencia sanitaria, informa la archidiócesis..

Es el caso de La Anunciación de Aldaia, que ha cedido sus salones parroquiales para instalar un consultorio médico, porque muchos de ellos han resultado dañados por la riada. Como asegura el párroco, Francisco José Furió, las consecuencias de esta tragedia van a ser terribles,  por las pérdidas humanas, pero también a nivel material y a nivel de salud física y mental. 

“La gente está agotada, y ahora se está derrumbando. Se va a necesitar mucho apoyo”.  Por eso, la Iglesia “está para ayudar en todo lo que sea necesario”, añade. Por ello, la  parroquia de La Anunciación de Aldaia ha convertido este espacio en un pequeño ambulatorio, donde se están haciendo curas médicas, analíticas y consultas.

Las Hijas de la Caridad acogen 30 personas

Por su parte, las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl de Valencia han acogido a una treintena de personas afectadas por la DANA, procedentes de Catarroja y Massanassa, tras ofrecer sus instalaciones, casas y residencias para ayudar a los damnificados en esta “emergencia tan grande”.

Así lo expresa sor Clara, hermana perteneciente a las Hijas de la Caridad, que han puesto a disposición de la Administración las plazas libres de su residencia de Hermanas mayores de la calle Milagrosa de Valencia, un total de 27; la sede de su Obra social en la calle Beneficencia, y una casa de 80 plazas en Castellnovo, cerca de Segorbe. 

Sor Clara asegura que estas familias están recibiendo todo tipo de ayuda, alojamiento, comida, y también mucho apoyo espiritual y agradece “toda la generosidad de tantas personas, empresas y comercios, que nos acercan mucha ayuda y alimentos”.

Misas de campaña

Según informa la archidiócesis, las parroquias están elevando oraciones por los damnificados por la DANA y han comenzado a celebrar ayer misas de campaña en diversas poblaciones afectadas, cuyos templos siguen dañados o en proceso de limpieza por las inundaciones, o porque la gran mayoría de ellos se han convertido estos días en centros logísticos para el reparto de ayudas de primera necesidad. 

Entre las poblaciones que han celebrado misas de campaña figura Catarroja. La parroquia María, Madre de la Iglesia, en coordinación con el ayuntamiento de la localidad, ha habilitado el templo parroquial para la entrega de alimentos, ropa y productos básicos y están oficiando la misa en el exterior. 

Samic, Cáritas, parroquias valencianas

Por lo demás, el Servicio de Acompañamiento y Mediación de la archidiócesis de Valencia ha lanzado una propuesta de acompañamiento para el fortalecimiento de las comunidades cristianas, sobre todo en las zonas más desfavorecidas tras la DANA.

Cáritas recuerda en su campaña ‘Con la emergencia en Valencia’, que “cientos de familias lo han perdido todo. Te necesitamos para ayudarles a reconstruir sus vidas”, y en parroquias como la de San Josemaría Escrivá, según informa la archidiócesis, su Centro Social reparte más de 3.000 raciones de comida en las zonas afectadas: estos días han llevado platos cocinados en vehículos todoterreno y furgonetas gracias a más de 340 voluntarios.

Historias como la de Susi Mora, técnica en la Fundación José María Haro de Cáritas diocesana de Valencia, conmueven. Susi afirmó: “La primera fortaleza fue el apoyo que nos hemos dado todos los vecinos”.

El autorFrancisco Otamendi

La armonía de los tres lenguajes

El Papa Francisco habla en "Dilexit Nos" de la armonía de los tres lenguajes: cabeza, corazón y manos. Que yo piense lo que siento y lo que hago; que yo sienta lo que hago y lo que pienso; que yo haga lo que pienso y lo que siento.

18 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 3 minutos

Recibí un mensaje de Miguel. Comentando la foto de su familia -en la que aparecían él, su esposa y sus tres hijos- escribió: “Doy gracias a Dios, que escuchó mi clamor, hoy estamos unidos y conviviendo en armonía; superé mi adicción, mi familia pudo perdonarme, mi corazón ya está consagrado al de Jesús. Un día pensé que la única solución a nuestros pleitos era separarnos. Hoy me doy cuenta que esta era una salida falsa, una que el mundo propone porque se cree que todo es desechable, incluso las personas. Gracias al cielo salí de mi error, sentí el amor de Dios, trabajé en mi superación personal, y con Su ayuda, con Su amor, he podido salir adelante; pude cambiar por amor a Él y a los que me dio para amar”.

En un mundo consumista y superficial, es crucial volver a la esencia del corazón para encontrar el sentido de la vida. El Papa Francisco en su reciente encíclica “Dilexit Nos”, nos convoca a emprender un viaje a las entrañas del propio corazón y generar así un milagro social. Nos recuerda que el Divino Corazón de Jesús está encendido de amor por la humanidad y nos llama a amar, a abrirnos al prójimo; a rechazar el estilo de vida hedonista que prevalece en nuestra realidad secular.

Nos invita a reconocer nuestra esencia, a ser coherentes con nuestro diseño original. El Papa habla de la armonía de los tres lenguajes: cabeza, corazón y manos. Que yo piense lo que siento y lo que hago; que yo sienta lo que hago y lo que pienso; que yo haga lo que pienso y lo que siento. Sinceridad para amar, sinceridad para ser felices.

Y para recuperar la centralidad del amor en nuestras vidas, debemos preguntarnos sinceramente: ¿creo?, ¿existe Dios?, ¿hay vida eterna?

El diálogo de los gemelos

El siguiente diálogo imaginario propuesto por el filósofo francés Jacques Salomé, nos puede ayudar a encontrar nuestras respuestas. 

Él nos sugiere pensar que un par de gemelos dentro del vientre materno conversan así: 

– Gemelo A: ¿Crees en la vida después del parto?

– Gemelo B: Por supuesto. Es obvio que la vida después del parto existe. Estamos aquí para fortalecernos y prepararnos para lo que nos espera más allá.

– Gemelo A: A mí me parece una locura. ¡No hay nada después del parto! ¿Cómo imaginar una vida fuera del útero?

– Gemelo B: Bueno, hay muchas historias sobre «el otro lado»… Dicen que hay mucha luz, mucha alegría y emociones, miles de cosas por vivir… Por ejemplo, parece que allí comeremos con la boca.

– Gemelo A: ¡Todo esto no tiene sentido!. Tenemos nuestro cordón umbilical y eso es lo que nos alimenta. Todos los bebés lo saben. ¡Ninguno come por la boca! Y, por supuesto, nunca ha habido un testimonio de esta otra vida… Para mí, todas estas son historias de personas ingenuas. La vida simplemente termina en el parto. Así es, hay que aceptarlo.

– Gemelo B: Bueno, déjame pensar lo contrario. Cierto que no sé exactamente cómo será esta vida postparto, y no podría demostrarte nada. Pero me gusta creer que en la próxima vida fuera del útero veremos a nuestra Madre y ella nos cuidará.

-Gemelo A: ¿»Madre»? ¿Quieres decir que crees en «Madre»? Ah! ¿Y dónde está ubicada?

-Gemelo B: ¡Madre está en todas partes, la siento en todo mi ser!. Existimos gracias a la Madre que nos da vida y es gracias a ella que vivimos. Sin ella, no estaríamos aquí.

-Gemelo A: ¡Esto es absurdo! Nunca he visto a ninguna Madre, así que es obvio que ella no existe.

-Gemelo B: No estoy de acuerdo. A veces cuando todo está en calma, yo percibo el mundo de Madre, escucho susurros cuando nos habla, música cuando nos canta. No me dirás que no sientes cuando acaricia nuestro mundo. Estoy seguro de que nuestra vida real comenzará después del parto…

Anhelo de Dios

Llevamos inscrito en el corazón nuestro anhelo de Dios. Ser coherentes con este llamado es esencial para sentirnos plenos, capaces de recibir y dar amor.

Busquemos sinceramente estas respuestas y, convencidos, abramos nuestra mente para recibir la Palabra de Dios como lo que es, y actuar en consecuencia.

Actualidad

Católicos y vida pública: La respuesta ante la decadencia de Occidente es predicar y vivir el evangelio de la Cruz

La vigésimo sexta edición de este congreso, impulsado por la Asociación Católica de Propagandistas y la Fundación Universitaria San Pablo CEU ha reunido en Madrid a más de un millar de personas con una llamada a tomar la iniciativa y la responsabilidad en la recuperación del sentido cristiano.

Maria José Atienza·17 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 5 minutos

Ayaan Hirsi Alí, escritora y activista somalí fue la encargada de abrir los tres días de reflexión que han conformado el Congreso Católicos y vida pública de esta edición en la que ha cumplido 26 años de vida. Una edición que ha inaugurado una codirección de la mano de Maria San Gil y Jose Masip y que este año se ha celebrado bajo el título: ‘Quo vadis? Pensar y actuar en tiempos de incertidumbre’

El Congreso comenzó el viernes 15 de noviembre con la sesión de apertura en la que participaron el presidente de la Asociación Católica de Propagandistas, Alfonso Bullón de Mendoza, el Nuncio de su Santidad en España, Bernardito Auza junto a los codirectores del congreso.

En su ponencia, Hirsi Alí abogó por la recuperación de un cristianismo comprometido que sea capaz de hacer frente a peligros como las “pseudoreligiones que se presentan como iguales o superiores al propio cristianismo”. Esta somalí recordó también las “restricciones a la libertad de expresión, de religión y el resurgimiento de un racismo válido y legítimo contra los blancos y contra los judíos en Europa y en América en nombre de la justicia social interseccional”.

Hirsi Ali destacó además que la recuperación y el impulso  de modelos sociales que protejan y animen a la creación de familias, el aumento de la natalidad  solo podrá lograrse “recuperando un sentido de unidad basado en valores comunes y no en las diferencias, podremos construir sociedades más fuertes y cohesionadas en estos tiempos de incertidumbre”.

Laicos, motor de evangelización

Diferentes realidades laicales como Comunión y Liberación, Emaus, Hakuna, el Camino Neocatecumenal o Acción Católica General centraron la mesa redonda de la primera tarde titulada  “… Y en todo caridad”. En ella abordaron  los problemas y oportunidades de evangelización en estos tiempos de incertidumbre, como señala el programa del congreso. La moderación corrió a cargo de Carmen Fernández de la Cigoña, secretaria general de la Asociación Católica de Propagandistas (ACdP), quien apreciaría al final que “todos coincidimos”.

Ante la pregunta de la moderadora de sintetizar su aportación para “ir juntos” en las tareas evangelizadoras, Miguel Marcos (Hakuna), señaló la necesidad de la oración, la apertura a la riqueza de cada uno, y la unión a la persona de Cristo, y Francisco Ramírez, “laico de parroquia” (Acción Católica), pidió que esa oración “lleve a salir al mundo, y luego volver a la comunidad”. 

Enrique Arroyo, recién nombrado responsable de Comunión y Liberación en España, señaló que son “momentos apasionantes en los que tenemos el reto de dar la vida”, y la “fragilidad afectiva” existente requiere que los jóvenes de hoy vean que existe un “significado de la vida”, mediante el encuentro con Jesucristo. El sacerdote Segundo Tejado (Camino Neocatecumenal), abogó también por mostrar que “hay un camino a seguir, que es Cristo, y que los falsos profetas no llevan a la gente a la felicidad”. Antes, Ludi Medina (Emaús), había dicho que “Emaús es un retiro, de encuentro con Jesús, camino, esperanza”.

Mons. Munilla: El mundo sufre en su huida del sufrimiento

La mañana del sábado comenzó con la ponencia del obispo de Orihuela Alicante, Mons. Jose Ignacio Munilla. El prelado glosó el lema de este congreso destacando  el significado histórico de ese Quo Vadis, que es “una llamada de atención ante la tentación de huir de la Cruz”. 

Monseñor Munilla subrayó cómo “ el problema está que huimos de la Cruz y la solución, como Pedro, es retornar a ella. A veces pensamos que lo podemos solucionar con la denuncia y la alternancia política, no. Supone un cambio de cosmovisión que lleve a osar de ser enemigos de la Cruz al pueblo de la Cruz. Es una conversión. De esta crisis solo saldremos con una renovación de santidad, un movimiento de conversos”. 

El obispo español realizó un decálogo de lo que él llama “enemigos de la Cruz actuales” entre los que se encuentran el consumismo, la secularización interna de la Iglesia o la vivencia sin compromiso en las relaciones afectivas actuales 

Ante estos enemigos, sutiles muchas veces, Munilla apuntó que la “solución es amar la Cruz. Recibir el espíritu de Dios y comprobar cómo eso empapa toda las partes de nuestra vida”. “ Este mundo sufre muchísimo por no querer sufrir”, afirmó el prelado, que recordó que “la clave no es sufrir o no sufrir, sino hacerlo con sentido o sin sentido. La única respuesta de la Iglesia a la decadencia del imperio romano fue entregarse al martirio. La respuesta ante la decadencia de occidente es predicar el evangelio de la Cruz, y eso acarrea compartirlo, vivir la Cruz y las persecuciones”. 

La segunda parte de la mañana del sábado contó con la mesa redonda en la que la periodista Ana Iris Simon y el filósofo Jorge Freire conversaron sobre la presencia y acción de los católicos en la vida social, política y cultural de España. Una mesa caracterizada por su dinamismo en la que Simon hizo una defensa de la acción que ya está presente en la Iglesia. La periodista y escritora, conversa al catolicismo hace pocos años, señaló, con gracia que quizás en vez del antiguo consejo que nos daban antes de “vive antes de comprometerte, ahora a nuestros hijos les animaremos a comprometerse para vivir grandes cosas”. 

Por su parte, Freire, animó a recuperar un nuevo espíritu misionero, en contra de un espíritu mercenario que parece ser la tónica general en el panorama político. 

Los jóvenes, portadores del primer anuncio

Tras el descanso del mediodía el salón de actos volvió a quedarse sin sitios libres, aunque el público asistente bajó 25 años la media de edad: un éxito organizativo que ha conseguido que el congreso llegue también a un público joven.

La tarde comenzó con una mesa redonda sobre “Evangelizar en las redes. Misioneros digitales”. Macarena Torres, responsable de comunicación de Fundación Hakuna, fue la encargada de moderar a los tres invitados: Carla Restoy (@carlarestoy), directora de la Fundación Bosco Films, Carlos Taracena (@carlos_taracena) de Misión Jatari, e Irene Alonso (@soyunamadrenormal), que entre otras muchas cosas es madre de 12 hijos y comparte sus andanzas familiares en las redes sociales. 

Irene comenzó destacando cómo sus mensajes «tocaban a algunas personas» y les animaba a cambiar. Carlos, por su parte, explicaba cómo esa capacidad de influencia es consecuencia de saberse enamorado, de saberse amado por Dios.

Carla explicó que el actual contexto social tan secularizado tiene un aspecto positivo para la evangelización, pues los jóvenes no han recibido el primer anuncio del Evangelio, pero sí han probado muchas propuestas de sentido que les han dejado vacíos. Por eso, cuando se encuentran con un cristiano auténtico aquello llama mucho la atención y atrae. La autenticidad se convirtió en el eje central de gran parte de la mesa redonda: con independencia de los seguidores que uno tenga en las redes sociales, en el mundo virtual y en el real, lo decisivo es la coherencia entre lo que se es y lo que se muestra.

La tarde concluyó con una serie de testimonios: Álvaro Trigo, Carlota Valenzuela y Lupe Batallán compartieron, con más de un millar de jóvenes reunidos en la sede de CEU sus diversas experiencias vitales que les han llevado a ser testigos de la fe en diferentes ambientes.

Hadjadj apela a la esperanza

El Congreso Católicos y Vida pública de 2024 cerró sus ponencias con la del escritor y filósofo francés Fabrice Hadjadj.

Bajo el título: ‘El reto de vivir en este tiempo’, Hadjadj impartió una conferencia en la que afirmó que “Europa desespera de lo humano y que tiende hoy a constitucionalizar el aborto y la eutanasia; a revisar la historia colonial que mete en el mismo saco al conquistador y al misionero; reivindicaciones posmodernas que muchos se imaginan ligadas a la afirmación de la libertad individual y, en realidad emanan, de la muerte del deseo, corresponden a la agitación de la desesperación”. Un panorama en el que sólo la misericordia divina, apuntó el filósofo, tiene la llave de nuestra salvación.

Mundo

Francia e Inglaterra son los países europeos con más delitos anticristianos

Según el Observatorio de la Intolerancia y la Discriminación contra los Cristianos en Europa durante 2023 tuvieron lugar más de 2.400 ataques contra los creyentes.

Paloma López Campos·17 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 2 minutos

El Observatorio de la Intolerancia y la Discriminación contra los Cristianos en Europa (OIDAC, por sus siglas) ha publicado su informe anual 2024 (referente a 2023). Según la organización, durante ese año tuvieron lugar más de 2.400 ataques contra los cristianos en Europa.

Comparando los datos del año pasado con los de 1013, se observa un ligero aumento de las amenazas y agresiones (verbales y físicas) contra la libertad religiosa. Sin embargo, la falta de aportación de datos por parte de algunos países hace difícil conocer con exactitud la magnitud de este problema cada vez más común en el continente.

OIDAC señala en su informe que los países en los que sucedieron más delitos anticristianos fueron Francia, Reino Unido y Alemania. Estos delitos van desde actos de vandalismo hasta agresiones físicas. Los datos ofrecidos por el Observatorio indican que “las formas más comunes de violencia fueron el vandalismo contra las iglesias (62 %) (…) los incendios provocados (10 %) y las amenazas (8 %).

Los cristianos en la vida pública

Los ataques contra los cristianos también están aumentando en el ambiente laboral, donde cada vez más creyentes consideran sufrir algún tipo de discriminación por su fe. El documento de OIDAC afirma que “según una encuesta de 2024 realizada en el Reino Unido, solo el 36 % de los cristianos menores de 35 años afirmaron sentirse libres para expresar sus opiniones cristianas sobre cuestiones sociales en el trabajo”.

Los ataques particulares no son lo único que preocupa al Observatorio. Denuncian que “el año pasado también se produjeron una serie de restricciones a la libertad religiosa por parte de los gobiernos europeos, desde la prohibición de procesiones religiosas hasta la persecución de cristianos por la expresión pacífica de sus creencias religiosas”.

Además de aportar datos, el informe realizado por OIDAC incluye ejemplos concretos de ataques contra la libertad de los cristianos, en el trabajo, la universidad, en el templo o la calle. Menciona también los ataques realizados en redes sociales y programas de televisión. De hecho, algunos estudios realizados muestran que la religión cristiana es la más criticada en los medios de comunicación.

La falta de libertad

Todos estos sucesos han provocado el aumento del fenómeno “self-censorship”, una tendencia cada vez más acusada, especialmente en cristianos jóvenes, de no dar su opinión en espacios públicos por miedo a las represalias.

Otra cuestión incluida en el informe es la falta de libertad que sufren los padres para educar a sus hijos en la fe cristiana, así como los recortes en la autonomía de la Iglesia que está sufriendo, por ejemplo, Bélgica.

OIDAC concluye que los ataques contra los cristianos van en aumento y que cada vez son más frecuentes las agresiones físicas. Esta violencia muestra un ataque directo contra los valores cristianos, que el Observatorio recomienda paliar a través de la concienciación, la reforma legislativa y la formación de los cristianos.

Recursos

Profundizar en las grandes cuestiones de la vida con Juan Luis Lorda

Omnes lanza el podcast "Grandes cuestiones" de la mano de Juan Luis Lorda. En este programa, el conocido teólogo aborda temas relacionados con el bien, la verdad y la belleza.

Redacción Omnes·17 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: < 1 minuto

Omnes lanza un nuevo podcast de la mano de Juan Luis Lorda, en el que el conocido teólogo aborda temas relacionados con el bien, la verdad y la belleza. “Grandes cuestiones” puede escucharse en todas las plataformas (Spotify, IVoox y Apple Podcasts), donde ya están disponibles los siete episodios.

Cada entrega tiene una duración de entre 10 y 15 minutos, durante los cuales Juan Luis Lorda explica y profundiza en cuestiones esenciales sobre la fe, la filosofía y la espiritualidad.

Los siete episodios son:

1.La verdad

2.El bien

3.La belleza

4.La libertad

5.Dios

6.Hábito y virtud

7.Amor y amistad

Ya puedes escuchar todos los episodios del podcast “Grandes cuestiones” aquí.

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Vaticano

El Papa pide una «atención religiosa privilegiada y prioritaria” para los pobres

El 17 de noviembre se celebra la Jornada Mundial de los Pobres en la que la Iglesia está llamada a rezar con y por ellos.

Teresa Aguado Peña·16 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 2 minutos

 “La oración del pobre sube hasta Dios” es el lema que el Papa Francisco propone este año para la VIII Jornada Mundial de los Pobres que celebra la Iglesia el 17 de noviembre.

El Santo Padre presidirá la eucaristía en la Basílica de San Pedro ese mismo día, seguida de la tradicional comida con algunos pobres en el Aula Pablo VI. 

Esta jornada surgió el 13 de noviembre de 2016, durante el cierre del Año de la Misericordia y cuando el Santo Padre celebraba el Jubileo dedicado a las personas marginadas. Al finalizar la homilía expresó espontáneamente un deseo: “Quisiera que hoy fuera la Jornada de los Pobres”. Desde entonces, se celebra esta Jornada en torno a esa fecha.

“Necesitan a Dios y no podemos dejar de ofrecerles su amistad, su bendición, su Palabra, la celebración de los Sacramentos y la propuesta de un camino de crecimiento y de maduración en la fe “

Mensaje Papa Francisco, VIII Jornada Mundial de los Pobres

En esta octava edición, Francisco exhorta  a hacer nuestra la oración de los pobres y rezar con ellos porque la falta de atención espiritual es “la peor discriminación que sufren las personas en situación de exclusión”.

El Papa añade que la inmensa mayoría de los pobres están especialmente abiertos a la Fe: “necesitan a Dios y no podemos dejar de ofrecerles su amistad, su bendición, su Palabra, la celebración de los Sacramentos y la propuesta de un camino de crecimiento y de maduración en la fe. La opción preferencial por los pobres debe traducirse principalmente en una atención religiosa privilegiada y prioritaria”.

En su mensaje, el Santo Padre también se dirige a aquellos que sufren la pobreza y la exclusión recordándoles que  Dios no se olvida de ellos: “Dios está atento a cada uno de vosotros y está a vuestro lado. No os olvida ni podría hacerlo nunca. Todos hemos tenido la experiencia de una oración que parece quedar sin respuesta. A veces pedimos ser liberados de una miseria que nos hace sufrir y nos humilla, y puede parecer que Dios no escucha nuestra invocación. Pero el silencio de Dios no es distracción de nuestros sufrimientos; más bien, custodia una palabra que pide ser escuchada con confianza, abandonándonos a Él y a su voluntad”.

No dar la espalda a los más pobres

La Jornada Mundial de los Pobres invita a los creyentes a escuchar la oración de los pobres tomando conciencia de su presencia y de su necesidad. Así, Francisco ve esta ocasión como una oportunidad “para llevar a cabo iniciativas que ayuden concretamente a los pobres, y también para reconocer y apoyar a tantos voluntarios que se dedican con pasión a los más necesitados”. 

El Papa también subraya la labor de los sacerdotes, consagrados, laicos y laicas que se ponen a disposición escuchando a los más pobres y que “con su testimonio dan voz a la respuesta de Dios a la oración de quienes se dirigen a Él”.

Los promotores de esta Jornada llaman a la Iglesia a cuidar y alimentar el espíritu de las personas que acompañamos a través de la oración, de una formación o de una lectura sugerente. Plantean así celebrar encuentros para orar en la parroquia, en centros de acogida o en residencias… “Orar juntos para abrir ventanas a Dios, escuchar lo que nos inspira a través de los hermanos, dar gracias y pedir, fortalece la fraternidad y dan sentido a la misión”.

El autorTeresa Aguado Peña

Mundo

La crisis de confianza en la Iglesia siro-malabar

Una tesis doctoral debatida en la Pontificia Universidad de la Santa Cruz analiza algunos acontecimientos relacionados con la antigua Iglesia siro-malabar, que en los últimos años se ha visto envuelta en una serie de polémicas.

Giovanni Tridente·16 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 3 minutos

La Iglesia católica siro-malabar, con sede en Kerala (India), es una de las comunidades cristianas más antiguas de Oriente, fundada según la tradición por el apóstol Tomás. Con más de cinco millones de creyentes y una fuerte presencia institucional, esta Iglesia desempeña un papel importante tanto en la vida espiritual de sus miembros como en el tejido social y cultural del país. En los últimos años, sin embargo, se ha visto abrumada por una serie de escándalos y polémicas que han minado profundamente la confianza de los fieles y puesto en entredicho su credibilidad institucional.

Este clima de desconfianza fue analizado y documentado con detalle por el estudiante Nibin Thomas, que el pasado lunes expuso su tesis doctoral en la Facultad de Comunicación Social Institucional de la Universidad Pontificia de la Santa Cruz, dirigida por el profesor Juan Narbona.

A través del análisis de casos concretos y de las respuestas de una muestra de catequistas de la archieparquía de Ernakulam-Angamaly – 5.332 catequistas, de los cuales 767 son monjas, 14 sacerdotes y 156 seminaristas -, la investigación mostró básicamente cómo la inadecuada gestión de las crisis por parte de las autoridades eclesiásticas ha alimentado un sentimiento de inseguridad y desconfianza entre los fieles, lo que ha provocado la erosión de la confianza en la propia jerarquía eclesiástica.

El impacto de los escándalos en la confianza

La sucesión de escándalos -casos de abusos sexuales, estafas financieras y acusaciones de encubrimiento- ha erosionado devastadoramente la percepción de confianza en la Iglesia siro-malabar, según demuestra la investigación de Thomas. De hecho, el 83,8 % de los encuestados afirmó que estos acontecimientos habían generado una crisis sin precedentes; más del 77 % confirmó que las polémicas habían comprometido su relación personal con la Iglesia, percibiendo una creciente desconexión entre la institución y los valores de transparencia y justicia que debería encarnar.

Un elemento clave que ha contribuido a la erosión de la confianza es la percepción de que la jerarquía eclesiástica ha gestionado mal estas crisis. No en vano, el 73,4 % de los encuestados cree que las autoridades han tratado de proteger a los autores y encubrir los delitos, en lugar de afrontarlos con transparencia y rigor moral. Esta sensación de proteger a los culpables se interpretó como una traición a las expectativas de verdad y justicia. La propia comunicación institucional fue percibida como insuficiente, con un 65,9 % de los encuestados en desacuerdo con los métodos de información utilizados por la Iglesia durante las crisis.

El papel de las redes sociales

De hecho, la revolución digital y las redes sociales han amplificado el impacto de los escándalos. Según el 74,6 % de los catequistas entrevistados, basándose también en su experiencia personal, la difusión de estas herramientas ha agravado sin duda las polémicas, favoreciendo evidentemente la difusión de noticias a menudo negativas de manera viral.

Al mismo tiempo, revela la falta de preparación de los organismos eclesiásticos para responder a estos flujos de información de manera oportuna y adecuada. Un escenario, reza la tesis de Thomas, “que pone de manifiesto la necesidad de un enfoque proactivo y estratégico de la comunicación por parte de la Iglesia siro-malabar, no sólo para desmentir posibles fake news, sino también para fomentar una narrativa transparente que pueda recuperar la confianza de los fieles”.

Para reflexionar

El estudio presentado en la Universidad de la Santa Cruz aporta claramente elementos de reflexión que pueden aplicarse también a otros contextos eclesiales. En un mundo cada vez más conectado y transparente, las instituciones eclesiásticas están llamadas a revisar sus métodos de gestión de crisis y su forma de comunicar en general. La pérdida de confianza, de hecho, es un importante recordatorio para promover una cultura de responsabilidad, diálogo y escucha, elementos cruciales para reconstruir esos lazos de pertenencia comprometidos por lo sucedido.

Sin duda, es necesario aprender a evitar el encubrimiento, a actuar con decisión contra los autores y a comunicar con claridad y transparencia. Elementos que, además de recuperar la confianza, pueden fomentar una auténtica reconciliación en la comunidad.

Intervención de la Santa Sede

En este frente, hay que recordar que las situaciones y divisiones internas que ha vivido la archieparquía de Ernakulam-Angamaly en los últimos años requirieron incluso la intervención de la Santa Sede. En 2023, el Papa Francisco había expresado en un videomensaje su preocupación por la situación conflictiva surgida en torno al modo de celebrar la liturgia, animando al arzobispado a un camino de unidad y renovación.

Anteriormente, en 2021 y 2022, había dirigido dos cartas a obispos, sacerdotes, religiosos y laicos, en las que exhortaba a la comunidad a “caminar juntos con el pueblo de Dios porque la unidad vence todo conflicto”. Unidad que debe reconstruirse de la mano de la recuperación de la confianza.

Artículos

El Sabadell amplía sus servicios para hermandades y cofradías  

La entidad busca dar una respuesta específica a las necesidades financieras de este colectivo, que constituye uno de los movimientos asociativos más grandes de nuestro país.

Redacción Omnes·15 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: < 1 minuto

Banco Sabadell, a través de su área especializada en Instituciones Religiosas y el Tercer Sector, refuerza su compromiso con las hermandades y cofradías ampliando su oferta para brindar un servicio más especializado, ágil y cercano que responda a las necesidades financieras de este colectivo.

Para ello, la entidad ha puesto en funcionamiento un nuevo correo electrónico ([email protected]) donde los clientes podrán contactar directamente con un equipo de expertos con formación específica en este ámbito.

Con esta nueva propuesta, el banco busca continuar respaldando a estos clientes, reconociendo su carácter único, reflejado también en las necesidades financieras específicas que presentan.

En España hay registradas más de 8.000 hermandades y cofradías en el Registro de Instituciones Religiosas, con una estimación de 3 millones de miembros. Este colectivo, con profundas raíces sociales y culturales que se extienden a lo largo de siglos, representa uno de los movimientos asociativos más grandes del país.

Banco Sabadell ofrece condiciones especiales para las hermandades y cofradías con las que colabora, incluyendo una cuenta corriente sin comisiones de administración ni mantenimiento, opciones de renting para bienes de equipo, soluciones de financiación personalizadas y un sistema de donaciones (Sistema Done) con términos muy beneficiosos.

Estados Unidos

Obispos norteamericanos expresan su solidaridad con los inmigrantes del país

Del 11 al 14 de noviembre se llevó a cabo en Baltimore, Maryland, la reunión plenaria de otoño de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB). Uno de los temas predominantes durante las discusiones fue el tema migratorio.

Gonzalo Meza·15 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 2 minutos

Del 11 al 14 de noviembre se llevó a cabo en Baltimore, Maryland, la reunión plenaria de otoño de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB). Uno de los temas predominantes durante las discusiones fue el tema migratorio, esto debido al inminente inicio de la administración del presidente electo Donald Trump quien prometió iniciar en el primer día de su administración una “deportación masiva de miles de inmigrantes, la más grande en la historia del país”.

Ante ello los obispos estadounidenses expresaron su solidaridad con los migrantes por medio de una “declaración de preocupación pastoral” en la cual los prelados alzan “la voz en nombre de las masas apiñadas que anhelan respirar libertad”. En el texto, los obispos piden a la nueva administración del presidente Trump brindar un trato justo y humano a los inmigrantes.

Reforma del marco legal

“Desde la fundación de nuestra nación, los inmigrantes han sido esenciales para el crecimiento y la prosperidad de esta sociedad. Llegan a nuestras costas como extranjeros, atraídos por las promesas que ofrece esta tierra. Siguen proporcionando seguridad alimentaria, servicios de salud y muchas otras actividades esenciales que sustentan a nuestra próspera nación”, aseveran los purpurados.

Asimismo, los obispos reconocieron que es necesario una reforma al sistema migratorio norteamericano para poder contar con un marco legal que dé la bienvenida a los refugiados y ayude a las familias a permanecer juntas, “un sistema de inmigración que mantenga nuestras fronteras seguras y protegidas, que sea capaz de detener el flujo de drogas y poner fin a la trata de personas”.

Otros temas de la asamblea plenaria

Durante los trabajos de esta asamblea plenaria los purpurados también abordaron otros temas, entre ellos, el Sínodo de los Obispos, el Congreso Eucarístico Nacional celebrado en julio; la implementación pastoral de un programa de ecología integral para conmemorar el décimo aniversario de “Laudato Si”;  la aprobación de la traducción de textos litúrgicos en inglés, incluyendo la “Nueva Biblia Americana” para uso litúrgico y finalmente el avance a nivel local de dos causas de beatificación y canonización: la hermana Annella Zervas -natural de Moorhead, Minnesota-, religiosa de la Orden de San Benito y conocida por su bondad, sentido del humor y su devoción a la Eucaristía y a la Virgen María; y la sierva de Dios Dra. Gertrude Agnes Barber, laica nacida en Erie, Pennsylvania quien dedicó su vida a la educación y al cuidado de niños y de la población vulnerable.

Al Cristo embarrado

Te he visto, Señor, embarrado, y me he acordado que del barro nos hiciste. Nos modelaste, pero éramos seres inertes hasta que soplaste en nuestra nariz tu espíritu de vida. Hoy también estamos como muertos, abatidos por la desgracia y por eso necesitamos de nuevo tu aliento.

15 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 4 minutos

Hoy te he visto, Señor, embarrado y muerto, ahogado bajo el cieno de Paiporta, y he querido preguntarte por qué. ¿Por qué Señor? ¿Por qué? 

Cristo de Paiporta

Buscando respuesta en los Salmos te he preguntado: ¿Dónde estabas mientras las nubes descargaban sus aguas, retumbaban los nubarrones y tus saetas zigzagueaban? ¿Dónde mientras nos cercaban olas mortales, cuando torrentes destructores nos aterraban, nos envolvían las redes del abismo y nos alcanzaban los lazos de la muerte?

¿Es que eres sólo del mismo barro que te cubre y no sientes ni padeces? ¿Eres uno de esos seres de polvo que no pueden salvar; que exhalan el espíritu y vuelven al polvo? ¿Uno de esos ídolos de los gentiles que son de oro y plata, hechura de manos humanas, que tienen boca y no hablan, tienen ojos y no ven, tienen orejas y no oyen y no hay aliento en sus bocas?

Algunos se han reído de ti, y de mí por confiar en ti. ¿Por qué me olvidas? ¿Por qué voy andando, sombrío, hostigado por mi enemigo? Se me rompen los huesos por las burlas del adversario; todo el día me preguntan: «¿Dónde está tu Dios?». Nos has hecho el escarnio de nuestros vecinos, irrisión y burla de los que nos rodean; nos has hecho el refrán de los gentiles, nos hacen muecas las naciones.

El Viernes Santo

Mientras seguía tratando de hallar respuesta a estas preguntas, me he fijado bien en tu foto, y en esos rayos dorados, aunque también enfangados, que salen de tu cabeza. Dicen los entendidos en arte sacro que se llaman potencias y que quieren expresar, no tanto tu divinidad, sino tu más alto grado de humanidad. Ellas dicen que tú, verdadero hombre, el ser humano por excelencia, dominaste en grado máximo las tres potencias humanas (entendimiento, memoria y voluntad) para obedecer el mandato del Padre y aceptar, por nosotros, la flagelación; por nosotros, la corona de espinas; por nosotros, la burla y el escarnio; por nosotros, la cruz; y, ahora, también por nosotros, la inundación.

Verte lleno de lodo es contemplar de nuevo tu cuerpo en el sepulcro, a medio lavar pues el sábado se les vino encima a las mujeres aquel Viernes Santo. Mientras lloramos asustados, tú estás descendiendo a los infiernos de cada ser humano, rescatando a los muertos para la vida eterna, haciéndote solidario con toda víctima de la inundación, pero también con todos los arrastrados por las torrenteras de la vida, por las olas de la enfermedad o la discapacidad, por las aguas bravas del desprecio y el descarte, por el violento caudal de la precariedad, el miedo y la incertidumbre. 

Tu foto es un abrazo a toda víctima, a toda persona que ha perdido a un ser querido, a los que han perdido su hogar, y a los que hemos perdido hasta la esperanza. Es un abrazo que nos dice: “estoy aquí, no me he apartado ni un segundo de ti, estuve contigo aquel día y lo seguiré estando todos los días de tu vida, porque no puedo hacer otra cosa más que amarte hasta dar la vida. Cuenta conmigo si hay que mancharse de barro, cuenta conmigo si estás sufriendo, agarra mi mano si te arrastra la corriente que yo no te la soltaré, aunque tengamos que ahogarnos los dos juntos”.

Señor del barro de Paiporta

Hoy te he visto, Señor, embarrado, y me he acordado que del barro nos hiciste. Nos modelaste, pero éramos seres inertes hasta que soplaste en nuestra nariz tu espíritu de vida. Hoy también estamos como muertos, abatidos por la desgracia, aturdidos por el remolino, y por eso necesitamos de nuevo tu aliento. Insúflanos, Señor del barro de Paiporta, tu espíritu de vida.

Hoy te he visto, Señor, embarrado, junto a los pies también embarrados de dos personas que pasan a tu lado en un suelo lleno de pisadas. Y he visto en ellas los pies cansados de nuestros padres, los israelitas en Egipto, pisando el barro para hacer ladrillos para el Faraón. Y me he acordado de cuantos faraones quieren aprovecharse de la desgracia de muchos para su propio interés. Capacita, Señor del barro de Paiporta, a nuestros dirigentes para que, como Moisés, mantengan al pueblo unido y se pongan a su servicio, abran para nosotros las aguas y nos lleven a pie enjuto, a vivir en paz en una tierra que mane leche y miel para todos.

Cristo embarrado

Hoy te he visto, Señor embarrado, sostenido por un brazo anónimo, uno de tantos que estos días, dentro y fuera de tu Iglesia, trabajan por sacar adelante al pueblo. Y he visto, en ese brazo, el del alfarero a cuyo taller bajó Jeremías y que le enseñó que, del mal, tú puedes hacer que salga el bien. De una vasija de arcilla torcida por el torno, si se modela de nuevo, puedes sacar otra bellísima. Ayúdanos, Señor del barro de Paiporta, a reconstruir nuestros corazones malheridos, nuestras familias rotas, nuestros pueblos destruidos y nuestros hogares anegados.

Hoy te he visto, Señor embarrado, y me he fijado especialmente en tus ojos. Y he visto en ellos los del ciego de nacimiento que tú untaste de barro para que recobrara la vista. Ayúdanos, Señor del barro de Paiporta, a abrir los ojos de la fe para poder ver el misterio de tu amor en medio de esta tragedia que parece, sólo parece, no tener sentido. 

Hoy te he visto, Señor embarrado, y me he dado cuenta finalmente del guiño que nos lanzas con tu ojo derecho. No sé si es intención del artista que te plasmó o es solo un efecto casual del barro, pero parece vislumbrarse tu pupila queriendo abrirse paso entre los párpados. ¿Estás burlándote de la muerte? ¿Estás a punto de decir que esta es solo un paso a la vida? Ayúdanos, Señor del barro de Paiporta, a verte como anuncio de la Resurrección, a no perder la esperanza de que volveremos a resurgir, a no dudar de que estás con nosotros en esta historia, de que, de la muerte y el lodo, sacas la vida. Ayúdanos tú, porque sabes que llevamos este tesoro en frágiles vasijas de barro, de barro de Paiporta.

El autorAntonio Moreno

Periodista. Licenciado en Ciencias de la Comunicación y Bachiller en Ciencias Religiosas. Trabaja en la Delegación diocesana de Medios de Comunicación de Málaga. Sus numerosos "hilos" en Twitter sobre la fe y la vida cotidiana tienen una gran popularidad.

Libros

El legado cristiano de Juan Mari Araluce

El 4 de octubre de 1976, tres miembros de ETA asesinaban en San Sebastián a Juan María Araluce, presidente entonces de la Diputación de Guipúzcoa, al conductor de su coche y a los tres policías escoltas. Su mujer, Maité Letamendía, quedaba viuda con 56 años y nueve hijos. Al hilo de una reciente biografía, se esboza aquí su legado espiritual y familiar.

Francisco Otamendi·15 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 7 minutos

Recordaré como si fuese ayer ese 4 de octubre, san Francisco de Asís y cumpleaños, recién llegado a Bilbao, muy cerca de donde nació Juan Mari Araluce Villar (1917) en Santurce (hoy Santurtzi en euskera), en la margen izquierda de la ría.

Tres miembros de la banda terrorista ETA habían disparado más de ochenta proyectiles de metralleta, del calibre 9 milímetros parabellum, marca de la ‘casa’, a Araluce, de 59 años, al chófer y a los escoltas, en la misma Avenida de España (hoy de la Libertad), frente al inmueble en que vivían en San Sebastián (Donosti). Así informaban los medios, y ETA (V Asamblea) asumía la autoría en llamadas a algunos de ellos.

Su mujer y ocho de sus hijos estaban comiendo “un plato de espaguetis, se escuchó atronadoramente el tiroteo. Se asomaron al balcón, desde donde, entre las copas de los árboles, vislumbraron la atroz escena, que aún se desarrollaba a sus pies”, narra el periodista e historiador Juan José Echevarría Pérez-Agua, en su biografía titulada “Juan Maria Araluce. El defensor de los fueros asesinado por ETA”.

Juan Maria Araluce. El defensor de los fueros asesinado por ETA

Autor: Juan José Echevarría Pérez-Agua
Editorial: Almuzara
Número de páginas: 648
Idioma: Castellano

Prácticamente ante su familia

“Cinco de los hijos, Juan, Ignacio, Javier, José y Maite, bajaron a toda prisa por las escaleras”, y mientras un sacerdote pudo dar la Extremaunción a las víctimas, y una ambulancia atendía a un escolta, introdujeron a su padre en el coche y tomaron la decisión de llevarle a la Residencia Nuestra Señora de Aránzazu, hoy hospital Donostia. En torno a las tres de la tarde, certificaron su muerte.

Fue la misma conmoción que tendría el que suscribe con otros asesinatos. Por ejemplo, dos años más tarde, el de José María Portell el 28 de junio de 1978, unos meses antes del referéndum constitucional del 6 de diciembre, cuando dos terroristas le ametrallaron frente a su casa, en Portugalete.

Su mujer Carmen Torres, que había escuchado los disparos desde su casa y se asomó al balcón con sus hijos (5), pudo bajar a la calle y abrazarle antes de que llegasen las ambulancias. Echevarría Pérez-Agua, autor de la biografía de Araluce, cita a Portell en varias ocasiones en su libro.

La semblanza

El trabajo sobre la figura de Araluce del profesor de la Universidad Carlos III, Juan José Echevarría, que ha trabajado en El País y en CNN+, tiene más de 600 páginas, y se podría decir que es también una honda investigación sobre el carlismo, Montejurra, la sociedad vasca y ETA.

“Es mucho más que una evocación biográfica de alguien que fue, ante todo, un buen hombre”, ha escrito en el prólogo Jon Juaristi. Es la “semblanza magnífica de un hombre, de un tiempo y de un país, esto sí que es verdadera Historia, y no ‘relato’, ni ‘narrativa’, ni ‘memoria’ ni otra cualquiera de las máscaras vergonzantes de la mentira y de lo que en los siglos de los medievales llamaban los hidalgos de Vizcaya ‘caloña’, la calumnia injuriosa que se vertía sobre los muertos”, añade el catedrático y ensayista Juaristi, que perteneció temprana y fugazmente a ETA en los últimos sesenta.

Fundamento, el perdón

Tras el atentado, “mi madre quedaba viuda con 56 años y nueve hijos. Mi hermana mayor (María del Mar), y yo éramos los únicos que habíamos terminado nuestros estudios universitarios. Yo, segundo de los hermanos, tenía 23 años, nuestra hermana más pequeña nueve. De un día para otro todo tu mundo se viene abajo”, señala Juan Araluce Letamendía a Omnes.

“Desde el primer momento mi madre, con una entereza inexplicable desde una óptica puramente humana, nos dijo que ‘teníamos que estar alegres porque papá está en el  cielo, que éramos cristianos y que teníamos que perdonar’. En este fundamento nos apoyamos toda la familia”.

Era el primer mensaje del legado de su padre, Juan Mari, que había sido amenazado de diferentes modos y maneras, junto a su familia. El perdón. El autor de la biografía lo recoge antes y en la última página del libro: hay que suponer que de modo no casual:

“Maité Letamendía diría a ‘Informe Semanal’, de TVE: “Estamos muy contentos de que lo tenemos, a Juan Mari, en el cielo, y nos está ayudando desde allá (…). Les perdono a todos los que le han matado y queremos que se termine el odio (…). Estamos rezando mucho por todos ellos y les perdonamos de todo corazón”.

Alejarse del odio y de la falta de libertad

“Permanecimos un año más en San Sebastián, pero en septiembre de 1977 nos trasladamos toda la familia a vivir a Madrid. Mi madre no quiso que sus hijos crecieran en un ambiente de odio, miedo y falta de libertad, como el que se vivía en aquellos años en el País Vasco”, añade Juan Araluce.

“Mi padre era notario de profesión. Toda la familia vivíamos de su trabajo. Consciente de lo que podía suceder, decía que si a él le pasaba algo se llevaba consigo la llave de la despensa. Así fue”.

Cosmovisión cristiana

Juan Mari Araluce y Maite Letamendía se casaron el 13 de junio de 1949 en la iglesia de San Vicente Mártir de San Sebastián, aunque ella había dicho informalmente que era “un pesado”, cuenta el biógrafo. Y el matrimonio Araluce vivió en la localidad guipuzcoana de Tolosa casi dos décadas. “Fueron los años más felices de sus vidas y donde criaron a sus nueve hijos”, desde María del Mar hasta Marta, señala el autor, sin duda basándose en testimonios de sus hijos y amigos. Los domingos, el matrimonio salía a cenar con dos parejas de íntimos amigos, una carlista y otra nacionalista”.

“La cosmovisión de Araluce era religiosa”, escribe el autor, que aborda este asunto, clave en Araluce y su familia, en diversos capítulos, salpicando otras historias. Ya como notario en  la localidad guipuzcoana, “el cristianismo siguió centrando su existencia, como revela su noche de bodas, con la imagen de la Virgen de Fátima”.

Barruntos, familia y vocación al Opus Dei

Allí, Juan Mari llevaba a su hija mayor a la parroquia de Santa María, y vivían los jueves eucarísticos. “Araluce ayudaba con los deberes a sus hijos, antes de salir para la notaría. Los chavales estudiaban en los Escolapios (…), y las chicas en las jesuitinas. Juan, el hijo mayor varón de Araluce, tuvo como compañero en el colegio a Francisco (Patxi) Arratibel, “quien sería asesinado por ETA” bastantes años más tarde, en 1997, apunta el autor.

Juan Mari Araluce era de la Adoración Nocturna, una actividad que organizaba “el arcipreste de Santa Maria, Wenceslao Mayora Tellería, quien el 11 de septiembre de 1949 había celebrado la coronación canónica de la Virgen de Izaskun”, sobre la que había publicado su historia ese mismo año.

Y ahí dio otro paso, cuando en 1961 se incorporó al Opus Dei (un año después lo haría su mujer, Maité). “Fue una decisión meditada y tomada con tiempo, desde que en 1959 se aproximó a la Obra creada por Josemaría Escrivá de Balaguer, a través de su cuñada Ana” (Letamendía), escribe.

Llamada a la santidad en lo ordinario, en el trabajo

“Para Araluce, el Opus Dei ofrecía un mensaje de plenitud religiosa a los padres de familia como él”, escribe el historiador y periodista. “Varios de sus hijos, como María del Mar y Juan seguirían su estela, y José, su sexto hijo, incluso se haría sacerdote, ordenándose en Torreciudad, el santuario mariano edificado por el Opus en Secastilla (Huesca)”.

Tras referirse a la beatificación de Josemaria Escrivá en 1992 por san Juan Pablo II,  luego canonizado en 2002, y a su libro ‘Camino’, el autor describe que “Araluce abrió sus casas de Tolosa y Estella a vecinos para propagar el mensaje de la llamada universal a la santidad y al apostolado” de los católicos, “mensaje que convenció a Araluce, casado y entonces con seis hijos”. Era un segundo mensaje de su legado. Escuchar al Señor, y seguirle.

La ética del trabajo

El biógrafo relata que “el matrimonio Araluce había conocido personalmente a Josemaria Escrivá en una tertulia que el fundador del Opus Dei ofreció en Pamplona, en septiembre de 1960, donde bendijo a Maité, embarazada de su antepenúltima hija, Maite, quien nacería al año siguiente”. El autor relata también en este punto las inquietudes y actividades de un sobrino, Francisco (Patxi) Letamendía, ‘Ortzi’, que charlaba con su tío Juan Mari, y sus hermanos.

En el capítulo que el autor titula “La ética del trabajo”, el profesor Echevarría Pérez-Agua termina esta parte aludiendo a la incorporación de Juan Mari Araluce, ya como presidente de la Diputación de Guipúzcoa, al patronato de la Escuela de Ingeniería de la Universidad de Navarra (Tecnun ahora), y la ayuda al Instituto Superior de Secretariado y Administración (ISSA), fundado en 1963.

“En el planteamiento de llevar a Dios a la sociedad civil para transformarla, eran fundamentales los hombres, pero también las mujeres, en las circunstancias ordinarias del trabajo”, anota el autor al recoger ideas de “Josemaria de Escrivá” (sic), “al entender que el Opus Dei se debía apoyar, ‘como en su quicio, en el trabajo ordinario, en el trabajo profesional ejercido en medio del mundo’. He aquí el tercer mensaje: el trabajo bien hecho, su santificación, y encajaba con él, y con su mujer.

Diputación de Guipúzcoa, Consejo del Reino

En cuanto al legado político, “fue el arquitecto de la reinstauración del Concierto Económico, al interpretar los fueros como un elemento consustancial a la Monarquía restaurada tras la muerte de Franco”, resume el autor. Tras la presidencia de la Diputación de Guipúzcoa, en marzo de 1971 ingresó en el Consejo del Reino: los procuradores en Cortes le votaron como uno de sus dos representantes en el máximo órgano consultivo de la Jefatura del Estado, al lograr 86 votos a favor y ninguno en contra.

El Consejo del Reino formado por 17 miembros, entre ellos Araluce, fue el encargado de pasar al Rey Juan Carlos el 3 de julio de 1976, la terna para la elección de presidente del gobierno español. Y el Rey eligió a Adolfo Suárez sobre Silva Muñoz y López Bravo.

La relevancia de la muerte de Juan Mari Araluce, tres meses más tarde, no escapaba a nadie, y salió hasta en The Washington Pot  y en The New York Times, “destacando el talante moderado del finado y su defensa de una concepción territorial descentralizada”, ha escrito el biógrafo. Pero aquí preferimos concluir con algunos de sus hijos y nietos.

“Una conciencia limpia y sin odio”

Al recordar la figura de su padre y todo lo que sucedió a la familia en esos años, Juan Araluce Letamendía comenta a Omnes: “Han pasado 48 años. Mi madre murió en paz hace 14 años acompañada por el cariño de sus nueve hijos y de sus 25 nietos. Ninguno de ellos conoció a su abuelo. Cuando alguna vez me preguntan cómo pudimos salir adelante, respondo que no me lo explico”.

“Tenemos el orgullo de haber heredado de nuestros padres una conciencia limpia y sin odio, y una fe que nos lleva a confiar rendidamente en una Providencia que va tejiendo nuestra vida con continuos bandazos muchas veces inexplicables. Pero al cabo de 48 años echas la vista atrás y constatas que todo lo que ha ocurrido tiene un sentido. Como dicen los franceses,tout se tient’, todo encaja”.

Su hermana Maite, citada más arriba, es la presidenta de la Asociación Victimas del Terrorismo. Así ha descrito a su padre no hace mucho: “Mi padre se las ingeniaba para traernos a Madrid con él siempre que nuestro calendario escolar o universitario nos lo permitía. Incluso nos enseñó a correr en el encierro de Estella, donde pasábamos los veranos. Era una persona tremendamente generosa, pensando en los demás y un gran conversador. También era un gran escuchador. Sabía escuchar”.

Y su nieto Gonzalo, periodista, ha escrito: “Con ese sentido del humor, mi abuelo trataba de restar importancia a las amenazas. Mi abuela Maite, su mujer, sufría unas migrañas que le hacían quedarse en cama, en silencio: un dolor tan indescriptible como recurrente que desaparecería después del asesinato. Jamás dijo que se debía a esa presión”.

“Si mi abuelo plantó cara a ese terror”, añade, fue por mi abuela Maite, a sabiendas de que ella sería capaz de ocupar todo el espacio que él podría dejar”, asegura.

El autorFrancisco Otamendi

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Cultura

Científicos católicos: Domingo de Soto, teólogo y físico

En noviembre de 1560 fallecía Domingo de Soto, teólogo y físico descubridor de que un cuerpo en caída libre sufre una aceleración constante. Esta serie de biografías breves de científicos católicos se publica gracias a la colaboración de la Sociedad de Científicos Católicos de España.

Ignacio Sols·15 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 2 minutos

El dominico Domingo de Soto (Segovia 1494 – Salamanca 1560), fue uno de los principales eruditos del siglo de oro español. Tras su formación en la universidad de París, fue primero profesor de la universidad de Alcalá y luego de la universidad de Salamanca (entre medio ingresó en la orden dominicana). Su legado intelectual abarca varias disciplinas. En particular, es figura clave en la transición de la prehistoria medieval de la física al surgimiento de la física moderna. Prueba de la amplitud de su erudición es que los estudiantes universitarios de la época decían: “Quien conoce a Soto, lo conoce todo”.

En el ámbito teológico, Soto se distinguió por su aguda exploración del problema de gracia y naturaleza, contribuyendo significativamente a la teología de su tiempo. De hecho, participó en el Concilio de Trento.

Su perspicacia se extendió a la filosofía, la economía y el derecho, donde dejó su huella con el primer tratado sobre los derechos de los pobres y la conformación del Ius Gentium en defensa de los indígenas, base del actual derecho internacional.

En lo que se refiere a la ciencia, Domingo de Soto, fue pionero en la descripción del movimiento, anticipando en un siglo las ideas que posteriormente Galileo establecería experimentalmente.  Su concepción del movimiento de caída libre como uniformemente acelerado en el tiempo, fue de vital importancia para el nacimiento, siglo y medio más tarde, de la mecánica newtoniana, pues ésta postula un movimiento uniformemente acelerado en todo cuerpo sometido a una fuerza constante.

Además, Soto introdujo la noción de masa inerte o resistencia interna al movimiento, concepto fundamental en la mecánica newtoniana. Esta contribución, a menudo atribuida a Galileo, revela la profundidad del pensamiento científico de Soto, cuyas ideas fueron esenciales para el nacimiento de la física.

La difusión de las enseñanzas de Soto se propagó desde la Universidad de Alcalá hasta el Colegio Romano, influyendo de este modo en la formación de Galileo. Hubo de ser el termodinámico francés Pierre Duhem quien, en su investigación de la prehistoria de la física, descubriera la crucial contribución de este ilustre compatriota nuestro, que personifica la sinergia entre fe y razón en la búsqueda del conocimiento.

El autorIgnacio Sols

Universidad Complutense de Madrid. SCS-España.

Libros

Eugenio Corti, la guerra contra el comunismo y “El caballo rojo”

Los estudios de Eugenio Corti sobre el comunismo son muy ricos y extremadamente metódicos, dando a conocer en Occidente la situación del mundo dominado por el marxismo.

Gerardo Ferrara·14 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 6 minutos

Eugenio Corti decía: «El escritor está obligado a dar cuenta de toda la realidad de su tiempo: por eso no puede especializarse (Sertillanges, en su obra “La vida intelectual”, había reflexionado sobre la misma necesidad para el erudito y el escritor). Es el único profesional que no tiene derecho a ser meramente especializado. Sin embargo, hoy en día no se puede saber de todo: hay que adquirir una auténtica competencia al menos en los ámbitos más importantes. Elegí estudiar el comunismo (el mayor peligro para la humanidad en este siglo) y la actualidad católica (porque veo en la Iglesia la mayor esperanza)».

El escritor que “ve”

El resultado de estos estudios será la obra “Juicio y muerte de Stalin”, escrita entre 1960 y 1961 y representada en 1962. Paola Scaglione escribe: «A partir de este momento, Eugenio Corti, a causa de su propio anticomunismo razonado, se ve obstaculizado, de forma sistemática y mal disimulada, por la gran prensa y el mundo de la cultura, que por aquel entonces estaba fuertemente orientado hacia la izquierda».

Corti, en cambio, ilustra claramente lo que no son sus paranoias o temores, sino realidades muy bien documentadas, además de experimentadas en su propia piel, lo que le permite realizar su propio análisis y formular valientemente -y con pleno conocimiento de causa- predicciones para el futuro (que invariablemente se harán realidad).

Eugenio Corti ha visto (“οἶδα”), y quiere contar, los horrores y las masacres llevadas a cabo por los comunistas en Rusia antes y después de la Segunda Guerra Mundial, por los partisanos inmediatamente después de esta última (unas 40 mil víctimas en Italia, por no hablar de la cuestión de la frontera oriental de Italia y de la tragedia del éxodo istrio-dálmata y de las masacres de Foibe, al menos 10.000 muertos y 300.000 exiliados) y de nuevo por el comunismo en general en Rusia (50 millones de víctimas desde la Revolución hasta las purgas de Stalin y más allá), en China (150 millones de víctimas del comunismo en este país) y en el sudeste asiático (Camboya en particular).

Todo ello para construir el «hombre nuevo». Los estudios de Eugenio Corti sobre el tema son muy ricos y extremadamente metódicos. Dan a conocer en Occidente -a quien quiera conocerlos- la situación del mundo dominado por el marxismo incluso antes de que, en 1994, Alexaner Solgenitzin, en un discurso ante la Duma (parlamento ruso) recordara aquellos sesenta millones de muertos causados por el comunismo, cifra sobre la que nadie en ese país tiene nada que decir. Corti considera: «En Italia, semejante masacre, con mucho la mayor de la historia de la humanidad, es como si nunca hubiera existido: muy pocos se han preocupado de averiguar la verdad sobre ella».

Eugenio Corti y el comunismo gramsciano

Igualmente importante es la contribución de Eugenio Corti al análisis de la situación económica, social y cultural de Italia en la posguerra y más allá, especialmente en lo que se refiere al abandono de la esfera cultural por parte de los católicos. Para él, es precisamente la esfera cultural italiana la realidad más perturbada. De hecho», declara Corti, “el diablo tiene dos características principales, la de ser homicida (basta con ver las cifras citadas anteriormente) y la de ser mentiroso”.

«Ahora, terminada la fase de los asesinatos en masa, ha tomado el relevo la fase de la mentira: la llevan a cabo los grandes periódicos, la radio, la televisión, sobre todo con el sistema de las medias verdades, que impiden a la gente corriente hacerse una idea clara de la realidad pasada y actual. Por eso debemos comprometernos a buscar y dar a conocer la verdad. El frente más importante hoy es el de la cultura».

Y es que «el comunismo no ha terminado. El leninista, en el que la dictadura del proletariado se ejercía mediante la eliminación física de los opositores, ha terminado. Hoy en Italia nos enfrentamos al comunismo de Gramsci, en el que la dictadura de los intelectuales ‘orgánicos al comunismo’ (la expresión es de Gramsci) se ejerce mediante la marginación sistemática, en la práctica la muerte civil, de los opositores. La cultura de izquierdas dominante en la actualidad no está desligada del marxismo, como nos han hecho creer: al contrario, es claramente un desarrollo del marxismo. La gran tragedia está en su segundo acto».

La situación en la Iglesia

También está presente en él el pesar por la entrega de gran parte de la Iglesia, sobre todo después del Concilio Vaticano II, a la cultura hegemónica, en particular por la adhesión acrítica de gran parte del mundo católico a algunas de las ideas de Jacques Maritain, figura a la que muchos, incluso el Papa Pablo VI, veían con gran simpatía.

Las ideas de Maritain, contenidas sobre todo en el libro “Humanismo integral”, abrieron de par en par la puerta a las corrientes modernistas en la Iglesia mundial y en Italia, tanto en el ámbito popular y político (el «compromiso histórico») como en el teológico, con la predicación de figuras como Karl Rahner, al que en Italia se opuso en vano el filósofo padre Cornelio Fabro.

El caballo rojo

A principios de los años setenta, Corti tomó la decisión de dedicarse por completo a la escritura: «En 1969/70, decidí resueltamente que, a partir de los cincuenta años, no haría otra cosa que escribir. Y, efectivamente, el 31 de diciembre de 1972, cesé toda actividad económica».

La obra a la que va a dedicarse, “El caballo rojo«, no permite otra ocupación. Y de hecho, los once años de estudio y elaboración de la obra maestra absorben por completo al artista. Por otra parte, al leer la obra, es inmediato percibir el enorme esfuerzo histórico y documental realizado por el autor para ofrecer una novela de absoluta fidelidad a los hechos y acontecimientos (lo que sin duda es una característica fija de toda su producción literaria).

Eugenio Corti, por tanto, dedicó casi todo el período 1972/1983 a su obra maestra. Sólo hubo dos actividades alternativas que le apartaron de su obra: en 1974 se unió al comité lombardo para la derogación de la ley del divorcio, suspendiendo su actividad de escritor durante seis meses; en 1978, en cambio, colaboró para un periódico local y escribió sobre todo acerca de la Iglesia, Rusia y el comunismo (en particular Camboya).

“Entre los cincuenta y los sesenta años», dice Corti, “la experiencia del hombre alcanza su punto álgido (después empieza a olvidar y a confundirse), mientras que su capacidad de crear sigue intacta”.

En 1983, el texto alcanzó su forma definitiva y Eugenio Corti lo propuso a una pequeña pero activa editorial, Ares (cuyo director, Cesare Cavalleri, es amigo y compañero de batallas políticas), que lo publicó en mayo (hace, pues, exactamente 25 años).

La obra se inspira en los caballos del Apocalipsis y se divide en tres volúmenes: «Para el primer volumen elegí el “caballo rojo”, que en ese texto es el símbolo de la guerra. Luego está el ‘caballo verdoso’ (que traduje como ‘lívido’), símbolo del hambre (los lagers rusos) y del odio (la lucha civil). Por último, el «árbol de la vida» (que indica el renacimiento de la vida después de la tragedia).

Según Paola Scaglione, autora de “Palabras esculpidas”, «en la conclusión de la novela, a la vez llena de esperanza y drama, no hay tragedia, porque el árbol de la vida tiene firmes raíces en el cielo, pero tampoco puede haber un final feliz totalmente pacificador. El teatro final de la escena de la novela sólo puede ser el cielo. Para Eugenio Corti, el sentido último de los asuntos humanos sólo se ilumina aceptando la eternidad como punto de vista. De ahí el epílogo de El caballo rojo, aparentemente desconsolado y, sin embargo, realista y lleno de profunda esperanza. El premio, parece recordarnos el cristiano Corti, no es un retorno pasajero a los asuntos terrenales, sino la alegría sin fin de la que es símbolo el árbol de la vida”.

Corti, de hecho, nos enseña que el arte cristiano no puede abandonar el realismo: “Es la filosofía de la cruz: no estamos en este mundo para ser felices, sino para ser probados. Al fin y al cabo, cualquier relación aquí abajo debe terminar con el fin de la vida”.

Scaglione lo dice bien cuando observa que «la cruz -la vida del hombre lo enseña y Eugenio Corti lo ha aprendido bien- coincide también a menudo con la imposibilidad de ver triunfar el bien» (pero también la dura realidad de no encontrar la correspondencia entre la belleza y la verdad perfectas contempladas por el artista y lo que existe, en cambio, en esta tierra).

Cesare Cavalleri se expresa en el mismo plano: «La novela es, en cierto sentido, una epopeya de perdedores, porque incluso la verdad puede conocer eclipses y derrotas, permaneciendo intacta y verdadera». Es el caso del Caballo Rojo y de la historia de los hombres en general, ya que toda «epopeya de perdedores», toda aparente derrota del bien es sólo una verdad a medias: el resto de la historia, que aquí abajo no se nos permite ver, transcurre en el cielo y, en la narración cortesana, se transforma en una «epopeya del Paraíso» que se abre a la miseria humana.

Evangelio

Inscritos en el libro de la vida. Domingo XXXIII del tiempo ordinario (B)

Joseph Evans comenta las lecturas del domingo XXXIII del Tiempo Ordinario y Luis Herrera ofrece una breve homilía en vídeo.

Joseph Evans·14 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 2 minutos

En la primera lectura de hoy, el profeta Daniel anuncia los enormes trastornos que precederán a la segunda venida de Cristo, “serán tiempos difíciles como no los ha habido desde que hubo naciones hasta ahora”. Jesús en el Evangelio nos dice más: “después de esa gran angustia, el sol se oscurecerá, la luna no dará su resplandor, las estrellas caerán del cielo, los astros se tambalearán”. ¿Cuándo sucederá esto? Ni siquiera Jesús lo sabe, dice. Es de suponer que aquí habla según su naturaleza humana, porque como Dios lo sabría.  

La Iglesia nos da esta aterradora visión del final de los tiempos para que no nos pille desprevenidos. “Entonces se salvará tu pueblo: todos los que se encuentran inscritos en el libro”. Este es el libro del juicio que vemos en el libro del Apocalipsis (Ap 20,12-15). Es una metáfora: no es un libro literal, sino que Dios lleva un registro de nuestras acciones buenas y malas. Nuestros nombres estarán en el libro de la vida si hemos buscado la verdadera vida, no la muerte. Las buenas acciones conducen a la vida, las malas conducen a la muerte. 

Probablemente no estaremos allí para ver la segunda venida de Cristo. Por favor Dios que lo veamos desde el cielo y no nos enteremos, aterrorizados, en el infierno. Pero en cierto sentido el fin de los tiempos es el “ahora” de los tiempos. Siempre hay convulsiones mundiales, naciones en guerra entre sí, desastres cósmicos. Si buscamos ahora los fundamentos adecuados, nos mantendremos firmes ahora, y cuando Jesús regrese, nos alegraremos -en la tierra o en el cielo- de su venida. 

Tenemos que aprender de estas lecturas dónde asentar nuestros pies. Ninguna persona sensata pone sus pies sobre arena movediza o barro acuoso. Más bien pone sus pies sobre roca sólida. Nada en la tierra o en el sistema solar permanecerá firme al final de los tiempos. Todas las cosas creadas se desvanecerán y desaparecerán. “El cielo y la tierra pasarán”, nos dice Jesús, “pero mis palabras no pasarán”. ¿Por qué poner nuestras esperanzas en cosas que pasarán?

Aquí Jesús nos indica a qué debemos aferrarnos: a sus palabras, a su enseñanza, que nos llega en la Iglesia, en la Escritura y en nuestra conciencia. Debemos acogerla y compartirla con los demás. Y así, la primera lectura nos da otro consejo para asegurarnos de estar entre los que resucitan a la “vida eterna”: ser sabios nosotros mismos e instruir a los demás en la santidad. “Los sabios brillarán como el fulgor del firmamento, y los que enseñaron a muchos la justicia, como las estrellas, por toda la eternidad”.

La homilía sobre las lecturas del domingo XXXIII del Tiempo Ordinario (B)

El sacerdote Luis Herrera Campo ofrece su nanomilía, una pequeña reflexión de un minutos para estas lecturas del domingo.

Vocaciones

Nathalí. Desde la música y el periodismo

Nathalí es una joven peruana que, a través de la música y de su trabajo como periodista, acerca a miles de almas al encuentro con Cristo. Ella misma conoció esta vocación a raíz de un retiro que cambió su vida por completo.

Juan Carlos Vasconez·14 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 2 minutos

Nathalí es una jóven mujer que muchos le conocemos por su presencia en medios
(@nathali.musica) y en la música. 

Peruana de cepa, expresa una profunda gratitud por todo lo que ha recibido, desde su familia hasta las oportunidades que le han permitido crecer en el camino que le han acercado a Dios. “Somos hijos amadísimos de Dios”, comenta con una sonrisa, reflejando su enfoque en la meta última: el cielo, siempre luchando por superar las dificultades con fe y determinación.

Desde hace más de diez años ha dedicado su vida a servir al Señor a través de la música y el periodismo. Como cantante debutó en el 2014 con un grupo de música católica que se llama Tabor, que comenzó con otros jóvenes de la parroquia San Francisco de Borja en Lima. 

Inspirados por la experiencia vivida en la Jornada Mundial de la Juventud en Río 2013, decidieron utilizar su talento musical para evangelizar. Nathalí recuerda cómo un amigo les sugirió el nombre “Tabor”, y desde entonces han llevado su música a diversas comunidades. Nathalí también es periodista de profesión, y, desde 2019, ha sido conductora de televisión en EWTN Noticias, la cadena de televisión fundada por la Madre Angélica que tiene mucha fuerza en América. Sin embargo, confiesa que su llegada a este medio fue casi accidental. “Yo no quería regresar a los medios, ya había trabajado en un canal antes”, admite. Su objetivo inicial era continuar en el campo de la comunicación empresarial, pero la providencia la llevó a aceptar una oportunidad en EWTN. 

A pesar de que al principio lo hizo con cierta reticencia, Nathalí reconoce que este trabajo ha sido un regalo de Dios, permitiéndole evangelizar a través de su profesión.

Encuentro con Cristo

A lo largo de su carrera, Nathalí ha experimentado momentos de transformación personal. En 2020, durante un retiro llamado “La Novia del Cordero”, tuvo un reencuentro profundo con Jesús. “Fue como si me hubieran quitado una venda de los ojos”, confiesa. Este retiro no sólo revitalizó su vida espiritual, sino que también la llevó a redescubrir su vocación como cantante y periodista. 

Desde entonces, Nathalí ha visto su trabajo en EWTN no solo como una profesión, sino como un apostolado, una oportunidad para llevar el mensaje de amor de Dios a través de la información y la música.

La música ha sido una constante en la vida de Nathalí, y su pasión por componer comenzó cuando era catequista de confirmación. “Quiero adorarte” fue su primera canción, escrita hace más de una década, y sigue siendo una de sus composiciones más queridas. Nathalí menciona que sus canciones nacen de la oración y, aunque no es músico de profesión, considera que cada una de ellas es un don de Dios. “Yo entrego todo lo que el Señor me regala para su servicio”, afirma con convicción.

Una de las anécdotas más conmovedoras de Nathalí ocurrió durante un viaje a Cracovia con su grupo de música Tabor. Allí, después de una presentación en un pequeño pueblo llamado “Manzana Dulce”, el conserje del hotel, que había asistido al concierto, se acercó a los integrantes de de Tabor visiblemente emocionado. Les contó cómo una de sus canciones, “Renuévame hoy”, había tocado su corazón de tal manera que lo ayudó a alejarse de la brujería y a volver a Dios. “Gracias, Señor”  fue todo lo que Nathalí pudo decir en ese momento, reconociendo la magnitud de lo que había ocurrido.

Dios hace maravillas cuando las personas están dispuestas a hacer su voluntad.

España

El 95,5 % de ayudas públicas a embarazadas en España se sitúa en Madrid

De los 63,2 millones de euros que aportaron las Administraciones públicas en España en 2023 de ayuda a las mujeres embarazadas, 60,4 millones fueron en la Comunidad de Madrid, según el Mapa de la Maternidad 2023 presentado por la Fundación RedMadre. El resto de CC. AA apoyaron con 2,7 millones (4,3%), lo que supone 6,50 euros de ayuda media por mujer.

Francisco Otamendi·13 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 2 minutos

La ayuda de las Administraciones públicas españolas a la maternidad ascendió a 63,2 millones de euros el año pasado (2023), lo que supuso 149,42 euros de ayuda media por mujer embarazada, según el 8º informe Mapa de la Maternidad en España presentado hoy por la Fundación RedMadre.

Las ayudas corresponden al apoyo de las Administraciones p­úblicas españolas (CC. AA diputaciones y ayuntamientos capitales de provincia) a la maternidad, prestando especial atención al apoyo a las madres con situaciones de dificultad a causa del embarazo.

Del importe total de 63,2 millones, la Comunidad de Madrid destinó 60,4 millones en su plan de apoyo a la maternidad, lo que supone el 95,5 por ciento. “Descontando esta cantidad, que dispara las cifras, la realidad en España es que las CC. AA sólo invirtieron 2,7 millones de euros en apoyo a las madres, es decir, 6,50 euros de ayuda media por mujer para hacer frente a las dificultades que se pueden presentar por el embarazo”, señala el Mapa presentado por RedMadre.

Se triplican gracias al plan madrileño

En el 7º informe Mapa de la Maternidad en 2022, el volumen de ayudas a la maternidad se situó en 20 millones de euros, por lo que se ha triplicado el importe total, hasta los 63,2 millones. Sin embargo, RedMadre hace notar que este aumento se debe de modo especial al plan de apoyo a la maternidad implantado por la Comunidad de Madrid, que destinó más de 14 millones de euros en ayudas directas a las embarazadas menores de 30 años.

Más CCAA que apoyan

Según el informe, el año pasado aumentaron de 7 a 11 las CC. AA que ofrecen apoyo a las embarazadas. A su vez, sólo 7 diputaciones (de las 42 existentes) y 10 (de 50) ayuntamientos capitales de provincia apoyan a este colectivo. Sólo Madrid y La Rioja ofrecen cantidades significativas a las madres de su Comunidad, señala el informe.

RedMadre señala que “las dificultades que las españolas enfrentan ante la maternidad llevan a que 1 de cada 4 embarazos sea abortado”. A su juicio, “las mujeres menores de 39 años sin hijos piensan que la maternidad influirá negativamente en sus oportunidades laborales, en su realización profesional y en su situación económica”. 

Más de la mitad de personas inactivas en España son mujeres (52,7 %), de las que el 15,4 % dice estarlo por cuidado de hijos o familiares, y el 55 % de hogares encabezados por mujeres madres está en riesgo de pobreza, son algunos de los datos proporcionados.

Gasto 12 veces superior en aborto que en ayudar a mujeres

“Las políticas de apoyo a la maternidad, desde el inicio del embarazo, son insuficientes o inexistentes lo que deja a las mujeres sin el respaldo necesario para afrontar esta etapa crucial de sus vidas. Es incomprensible que en España las mujeres expresen desear tener más de un hijo y las Administraciones Públicas gasten 12 veces más en el aborto que en ayudarlas a ejercer su maternidad”, ha manifestado María Torrego, presidenta de RedMadre.

“Como muestra nuestro Informe, la pérdida de oportunidades laborales, el miedo a empobrecerse y la escasez de políticas que faciliten la continuidad del embarazo, llevan a la mujer a renunciar a la maternidad”, ha añadido la directora general, Amaya Azcona. España registró en 2023 un total de 103.097 abortos o, en terminología estadística, interrupciones voluntarias del embarazo (IVE), lo que representa un aumento del 4,8 % en términos absolutos en comparación con 2022, en el que se realizaron 98.316 abortos, según datos del Ministerio de Sanidad.

El autorFrancisco Otamendi

España

Torreciudad aporta 97 millones de euros anuales a Huesca y Aragón

Según un informe de la Cámara de Huesca, Torreciudad aporta más de 97 millones de euros anuales a la provincia de Huesca y Aragón. Aunque el santuario en sí es deficitario, supone un motor económico clave en la región.

Redacción Omnes·13 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 2 minutos

Según un informe de la Cámara de Huesca, el santuario mariano de Torreciudad aporta más de 97 millones de euros anuales a la provincia de Huesca y Aragón. Los cientos de miles de visitantes que recibe este lugar hacen que Torreciudad tenga un impacto económico directo de 58,2 millones, que se multiplican en toda la provincia cuando se tiene en cuenta el impulso que reciben otras actividades turísticas o culturales que realizan los visitantes.

Aunque el templo y sus aledaños son deficitarios, como destaca su informe anual y corroboran las fundaciones que ayudan al mantenimiento de Torreciudad, la actividad del santuario impulsa un movimiento económico clave para esta zona aragonesa.

Según los datos ofrecidos por la Cámara de Huesca, Torreciudad tiene un impacto indirecto de 28,8 millones de euros en la producción de las empresas aragonesas proveedoras de las empresas que reciben el impacto directo. Por su parte, el impacto inducido es de 10,3 millones de euros, por el aumento de las rentas salariales por el consumo y producción.

De hecho, si Torreciudad dejara de existir el dinero generado bajaría a 17,2 millones de euros, pues se perderían unos 150.000 visitantes que generan alrededor de 80 millones de euros. Esto se debe a que el motivo central por el que los visitantes van a este santuario es precisamente porque es Torreciudad.

El impacto positivo de Torreciudad

El informe de la Cámara de Huesca señala también 14 impactos positivos, más allá del dinero, que se producen gracias a Torreciudad:

-Posicionamiento territorial y turístico en el ámbito del turismo religioso

-Capacidad de desestacionalización

-Ubicación y conocimiento internal

-Complementariedad con los recursos turísticos del territorio

-Actuaciones colaborativas y de responsabilidad social y conservación del patrimonio

-Desarrollo de nuevas experiencias turísticas

-Valor arquitectónico, cultural y patrimonial

-Proyección de los valores provinciales de naturaleza

-Pertenencia a la Ruta Mariana. Rutas locales y rutas transfronterizas / Camino de Santiago ribagorzano

-Capacidad organizativa y desarrollo de eventos

-Experiencia espiritual y personal

-Generación de empleo y contribución a actividades económicas turísticas y de servicios

-Fijación de población y desarrollo poblaciones cercanas

-Oficina de turismo como promotora territorial

El contexto del informe

El informe sobre Torreciudad muestra también datos muy relevantes que ayudan a entender el impacto del santuario en la provincia. Destaca, por ejemplo, el número de visitas anuales, que llega a las 200.000.

El origen del estudio, según señala la propia Cámara de Huesca, se basa en tres razones:

-Interés por conocer el impacto de uno de los sitios más visitados de Aragón

-El 50 aniversario de la construcción del santuario, que se celebrará en 2025

-Vinculación turística y territorial de Torreciudad con sus alrededores

Potencial desarrollo gracias a Torreciudad

Por último, la Cámara de Huesca ofrece en sus conclusiones el potencial desarrollo de Torreciudad:

-Colaboración con agencias de viajes interesadas en el turismo familiar y religioso

-Colaboración con los países de origen de los visitantes extranjeros 

-Desarrollo de otras posibilidades de turismo

-Revalorización del patrimonio local y otras rutas de peregrinación

-Desarrollo de planes de sostenibilidad que impacten positivamente a zonas cercanas a Torreciudad

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España

España se une a la REDWEEK internacional por los cristianos perseguidos

España se une a la REDWEEK, una campaña internacional que quiere concienciar a la sociedad entera de la realidad de los cristianos perseguidos.

Redacción Omnes·13 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 2 minutos

En una rueda de prensa, José María Gallardo, director de Ayuda a la Iglesia Necesitada, ha informada de que España se une por primera vez a la REDWEEK, una campaña que se celebra internacionalmente desde 2015 y que busca concienciar a la sociedad del drama de la persecución a los cristianos.

El lema elegido para esta ocasión es “Abre tus ojos por los cristianos perseguidos”. Con esta máxima, del 18 al 24 de noviembre Ayuda a la Iglesia Necesitada lanzará varias iniciativas para mostrar que “no olvidamos a nuestros hermanos que sufren por la fe”.

El miércoles 20 de noviembre es el día central de esta REDWEEK. A las ocho de la tarde, hora española, cientos de edificios de todo el país se iluminarán de rojo. Entre las fachadas en las que se recordará a los mártires y cristianos perseguidos están la basílica de la Sagrada Familia en Barcelona y la catedral de la Almudena en Madrid.

Otras iniciativas de la REDWEEK

Además de la iluminación de edificios importantes, Ayuda a la Iglesia Necesitada presentará un informe, “Perseguidos y olvidados”. Este documento es un análisis global de la situación de los cristianos en 18 países clave: 

-Arabia Saudí

-Burkina Faso

-Myanmar

-China

-India

-Egipto

-Eritrea

-Irán

-Irak

-Mozambique

-Nicaragua

-Nigeria

-Corea del Norte

-Pakistán

-Sudán

-Siria

-Turquía

-Vietnam

Por otro lado, la organización católica lanzará también el documental “Héroes de la fe”, que recoge historias reales de cristianos en Nigeria, Irak, Pakistán y Sri Lanka. Por último, han organizado una exposición, “La belleza del martirio”, que se abrirá en la catedral de la Almudena. En 3 espacios llenos de testimonios reales, Ayuda a la Iglesia Necesitada ofrece hechos concretos que tienen lugar en Nigeria, Pakistan, Kenia y Libia, mostrando que “muchos cristianos quieren vivir como Jesús y morir por Él”.

Participar en la campaña

José María Gallardo finalizó su intervención invitando a todos a unirse a esta campaña. Todas aquellas parroquias, movimientos y organizaciones que deseen formar parte de la REDWEEK pueden contactar con Ayuda a la Iglesia Necesitada a través de su página web y solicitar los materiales necesarios para unirse en esta semana de apoyo y oración a los cristianos perseguidos.

Vaticano

«Ad Iesum per Mariam», el consejo del Papa en la Audiencia

La Audiencia General del 13 de noviembre de 2024, el Papa ha reflexionado sobre la relación entre el Espíritu Santo y la Virgen María, esposa y discípula de esta persona divina. Esta la decimotercera catequesis sobre el Espíritu Santo, en las anteriores había glosado diversas ideas sobre su acción en las escrituras, los sacramentos y la oración.

Redacción Omnes·13 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 2 minutos

El Santo Padre ha continuado su catequesis sobre el Espíritu Santo, en esta ocasión subrayando la relación entre el Paráclito y la Virgen María. Ha empezado recordando dicho tradicional «Ad Iesum per Mariam», es decir, «a Jesús por María». El Papa ha ha subrayado que «el verdadero y único mediador entre nosotros y Cristo, señalado como tal por el propio Jesús, es el Espíritu Santo», pero sin olvidar que «María es uno de los medios que utiliza el Espíritu Santo para llevarnos a Jesús».

María es la «primera discípula» y su figura cercana puede ser comprendida «incluso por aquellos que no saben leer libros de teología, por esos ´pequeños` a los que Jesús dice que se revelan los misterios del Reino, ocultos a los sabios (cf. Mt 11,25)».

La Virgen, fiel instrumento

El Santo Padre ha destacado «cómo la Madre de Dios es un instrumento del Espíritu Santo en su obra de
santificación. En medio de la interminable profusión de palabras dichas y escritas sobre Dios, la Iglesia y la santidad (que muy pocos, o ninguno, son capaces de leer y comprender en su totalidad) ella sugiere sólo dos palabras que todos, incluso los más sencillos, pueden pronunciar en cualquier ocasión: ´Aquí estoy` y ´fiat`. María es la que dijo ´sí` a Dios y con su ejemplo e intercesión nos impulsa a decirle también nuestro ´sí` cada vez que nos encontremos ante una obediencia que cumplir o una prueba que superar».

Cuando la Iglesia recibió de Jesucristo el mandato misionero de predicar a todas las naciones, se unió en oración en torno a la «María, la madre de Jesús» (Hechos 1,14). El Papa señalaba que aunque «también había otras mujeres con ella en el cenáculo, pero su presencia es diferente y única entre todas. Entre ella y el Espíritu Santo existe un vínculo único y eternamente indestructible que es la persona misma de Cristo, ´concebido por el Espíritu Santo y nacido de la Virgen María` (Credo). El evangelista Lucas subraya intencionadamente la correspondencia entre la venida del Espíritu Santo sobre María en la Anunciación y su venida sobre los discípulos en Pentecostés, utilizando algunas expresiones idénticas en ambos casos».

Ayudar al prójimo como María

Como es habitual en la predicación del Papa Francisco, la meditación de las verdades reveladas ha concluido con una invitación a los creyentes para que su fe se trasforme en obras de servicio al prójimo: «Aprendamos de ella a ser dóciles a las inspiraciones del Espíritu, sobre todo cuando nos sugiere que ´nos levantemos con prontitud` y vayamos a ayudar a alguien necesitado, como hizo ella inmediatamente después de que el ángel la dejara (cf. Lc 1,39)».

Antes de impartir la bendición a los fieles congregados en plaza, el Santo Padre ha hecho un llamamiento por la paz, como siempre hace las audiencias de los miércoles y el ángelus de los domingos.

Mundo

Paul Graas: “El individualismo es un gran reto para la Iglesia en Holanda”

En esta entrevista con Omnes, Paul Graas habla de su último libro “Santidad para losers” y ofrece un análisis sobre la fe y el ecumenismo en Holanda.

Paloma López Campos·13 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 7 minutos

Paul Graas es un joven español-holandés que vive en Ámsterdam desde hace varios años. Trabaja en el “Stichting Instudo” y ha comenzado una iniciativa para conectar a católicos holandeses, con el objetivo de crear una comunidad que haga frente al individualismo predominante.

En esta entrevista, Paul Graas habla de su libro “Santidad para losers” y ofrece un análisis sobre la fe y el ecumenismo en Holanda.

¿Por qué escribió “Santidad para losers”?

– Hay bastante literatura espiritual muy buena en español, tanto para jóvenes como para adultos. Pero en holándes no la hay. Obviamente se traducen libros buenos y clásicos de espiritualidad, pero no hay libros escritos en holandés por holandeses, especialmente para gente joven. Esto tiene su explicación, porque es un país en el que no hay muchos católicos jóvenes, pero es un proyecto que me hacía ilusión para poder llevar a los jóvenes temas de espiritualidad adaptados a su mentalidad.

“Santidad para losers” también es un libro que nace, gracias a Dios, por la educación que recibí de mis padres. Desde joven he tenido un anhelo de santidad y descubrí mi vocación, que se concreta en ser numerario del Opus Dei. Pero notaba que, por el ambiente en el que me he formado, tenía una percepción un poco equivocada de la santidad. Era una percepción según la cual si yo le pongo ilusión y trabajo, al final lograré ser santo. Sin embargo, con el tiempo uno observa que en la vida hay adversidades y que, incluso si cuentas con la gracia de Dios, cometes errores. Al darme cuenta de esto me llevé una desilusión.

Por otro lado, en mi ambiente veía retos de salud mental y heridas que marcan las relaciones entre las personas y notaba que el discurso clásico de lucha ascética no podía llegar a los jóvenes en ese ambiente.

Poco a poco, al profundizar en mi relación con el Señor, Él me hizo darme cuenta de que podemos ser santos, pero tenemos que cambiar la perspectiva. Eso es lo que he querido plasmar en el libro. No digo necesariamente cosas nuevas, pero sí he buscado transmitir el mensaje en un idioma que logre convencer a los jóvenes de que pueden ser santos.

¿Cuál es la actitud de la juventud holandesa con respecto a la religión?

– Tenemos tres grupos. Tenemos el grupo de jóvenes que han sido educados en la fe católica, luego el de aquellos que vienen de un ambiente protestante y, por último, el grupo de los que están totalmente secularizados.

Empezando por el primer grupo, ahí tienes a gente joven católica que siempre ha sido consciente de que es una minoría. No hay colegios realmente católicos en Holanda, por ejemplo. Los hay por el nombre, pero se han secularizado. Lo único que tienen relacionado con la fe católica es un festival de villancicos en Navidad. Por tanto, los jóvenes católicos siempre han estado en un ambiente en el que eran los únicos practicantes y, con suerte, en su parroquia había una comunidad o han podido conectar con algún movimiento católico. Dependiendo de cómo esté arraigada la fe en la familia o en el ambiente social, esa fe se abandona o se forja.

El siguiente grupo es el de los que vienen de ambientes protestantes, que pueden ser puritanos, calvinistas, evangélicos o liberales, hay mucha diversidad. Pero los protestantes están mejor organizados, social y eclesialmente. Hay más colegios con identidad cristiana protestante y parroquias con grupos grandes. El reto que supone esto es que en ciertas partes del país puedes ser educado en una burbuja, en el sentido de que tu ambiente es cristiano mayoritariamente y eso es todo lo que conoces.

El tercer grupo es el del ambiente secular, la mayoría de jóvenes holandeses tiene unos abuelos católicos o protestantes, pero ellos no han recibido formación. No tienen ni idea de la fe, desconocen el Evangelio y no saben quién es la Virgen María. Cristo para ellos es una figura histórica y la Iglesia es algo que pertenece a las noticias o al plano sociológico.

Conociendo ese ambiente, ¿cómo viven los católicos su fe en Holanda?

– Cuando tratas con los católicos notas que muchos de ellos tienen la tendencia de encerrarse en la parroquia. No significa que no tengan amigos no cristianos, sino que la vivencia de la fe es un poco clerical. Se quedan dentro de sus parroquias, grupos o movimientos, conscientes de que pocas personas comparten su fe. La mentalidad clerical sigue presente para muchos en Holanda por esta razón.

Pero aquí tienes también un grupo muy interesante, que es pequeño todavía pero está creciendo. Es el grupo de los conversos, que conocen muy de fondo el ambiente o protestante o secularizado. Han tenido una experiencia vital muy interesante porque suelen convertirse de jóvenes adultos y tienen más conciencia de lo que es ser católico en un mundo secularizado. Saben de base evangelizar y tomar la iniciativa.

¿Cómo se puede evangelizar en un país con esas características?

– Seas católico, protestante o secularizado, lo que notas es que mucha gente joven está desilusionada con lo que se han encontrado en la vida.

Más que convencer de que hay que luchar por vivir tu fe, lo primero que hay que hacer es darse cuenta de que esa desilusión es equivocada. Siempre puedes empezar de nuevo y Dios te quiere incondicionalmente. Tu identidad no está basada en los fallos que has cometido, los vicios que tienes o el ambiente en el que te encuentras. Tu identidad es algo mucho más profundo que hay que descubrir.

Por eso pienso que una de las virtudes más importantes para la formación es la humildad, una reflexión propia basada en el amor de Dios. Esto no tiene mucha diferencia entre católicos, protestantes y secularizados, porque todos vivimos en una sociedad muy individualista y tenemos heridas.

¿En qué consiste la iniciativa de “CREDO”?

– La historia de “CREDO” representa lo que hemos hablado antes de la sociología holandesa. Todo empieza con un chico llamado Albert-Jan, que viene de un ambiente evangélico. Los evangélicos son el grupo cristiano que más crece en Holanda y en el mundo entero. Tienen un tinte carismático y son muy apostólicos. Albert-Jan provenía de ese ambiente pero, al darse cuenta de que los evangélicos no tienen una gran tradición, a él le surgió el anhelo de seguir a Jesucristo y notaba que con ese grupo no podía profundizar más.

Este chico conoció la Iglesia católica a través de un centro del Opus Dei y conectó enseguida con las enseñanzas católicas. Tanto es así que en menos de un año entró en la Iglesia, enamorado de la Eucaristía y consciente de que ahí podía profundizar en su relación con Dios.

Albert-Jan se casó, tuvo una hija y los vaivenes de la vida le hicieron enfrentarse a la dificultad de llevar una vida cristiana en medio del mundo. De pronto, un martes decidió ir a la parroquia a Misa por la mañana y en el templo se encontró a un chico de 20 años. Después de Misa se acercó y le preguntó si iba allí regularmente, pero el chico le contestó que era la primera vez que entraba en una iglesia.

Este joven sintió curiosidad por la fe a través de unos vídeos de Jordan Peterson y del obispo Barron, por lo que escribió un correo electrónico a un pastor protestante y un sacerdote católico preguntando qué tenía que hacer para ser cristiano. El sacerdote le sugirió que acudiera a una Misa y allí es donde se encontró con Albert-Jan. Empezaron a hablar y, finalmente, tras conversaciones y empezar a acudir a una parroquia, el joven se convirtió al catolicismo.

Albert-Jan se percató de que esto pasa con mucha frecuencia. La gente tiene curiosidad por la fe pero no encuentran a nadie que les acerque a la religión. Por eso empezó a organizar reuniones, como ir a tomar algo después de Misa, tener una barbacoa o hacer una fiesta para que la gente se encuentre y puedan preguntar lo que quieran sobre el catolicismo. Así de manera muy asequible los jóvenes se encuentran con otros católicos para aprender más de la fe y compartirla.

Albert-Jan pensó que si las personas llegaban a la Iglesia y tomaban la iniciativa de salir de una “fe digital” basada en la formación a través de vídeos, había que ayudarles a seguir dando esos pasos. Me contactó, proponiendo hacer un proyecto que buscara a aquellos que tienen su “fe digital” para acompañarles y que conozcan a otras personas que también comparten su fe.

A través de otro proyecto mío, tenía contacto con profesionales del mundo de la comunicación del ambiente protestante y ellos son quienes nos han ayudado en la iniciativa. Son un grupo con grandes proyectos cristianos, muchísima experiencia profesional y apertura a las ideas católicas.

En “CREDO” queremos, a través de las redes sociales y de nuestra página web, mostrar testimonios de gente joven holandesa que se ha convertido al catolicismo. Al mismo tiempo, creamos contenido de alta calidad que explique conceptos de la fe católica de forma sencilla. Pero no nos limitamos al contenido, sino que también ayudamos a la gente a ponerse en contacto con otros católicos y con parroquias. Con todo esto, logramos que esta vivencia no se quede en algo digital.

La idea es introducir de manera muy asequible encuentros con la fe católica, que van desde tomar un café a ir a Misa. Nosotros somos intermediarios, buscamos a la gente joven que está online y les ponemos en contacto en el mundo real con otros católicos.

¿Cómo es el ambiente ecuménico en Holanda?

– Yo estoy un poco en la frontera en ese sentido, porque estoy muy en contacto con protestantes, especialmente en el mundo de la comunicación. Cuando tienes un ambiente tan secularizado, encontrar a alguien que comparte tu fe en Jesucristo ayuda mucho a conectar con ellos por esa creencia común. En mi época de estudiante, por ejemplo, más de la mitad de mis mejores amigos eran protestantes.

Sí es verdad que el mundo católico siempre ha estado un poco más aislado en Holanda, pero eso está cambiando porque hay una apertura nueva que tiene dos explicaciones. Por un lado, como estamos en un país tan secularizado nos hemos ido apoyando entre los cristianos. Por otro lado, la Iglesia tiene un atractivo especial para muchos cristianos de otras denominaciones.

Un detalle que ejemplifica esto es la acogida de los monasterios, donde personas de cualquier fe pueden ir a pasar unos días para hacer un retiro. La gente tiene necesidad y curiosidad por ese ambiente místico, por el cuidado de la liturgia y el silencio. En los monasterios hay una espiritualidad que llega a lo profundo del ser humano y eso nos llama la atención a todos, católicos y protestantes.

También creo que hay un interés real por algunos aspectos, como la Virgen María. Hay protestantes que empiezan a interesarse por María y quieren redescubrir su figura desde su propia tradición. Tanto en el ambiente teológico como en el ascético se nota una mayor cercanía entre los católicos y otros cristianos.

¿Qué retos hay para vivir la fe católica y mantener ese ambiente ecuménico en Holanda?

– El individualismo es un reto muy importante en Holanda. También el tema de la educación, porque faltan colegios de auténtico arraigo católico, en ese sentido tienen mejores iniciativas los calvinistas.

Otro reto que hay es la falta de parroquias en las que haya una comunidad real. En ese mismo sentido, faltan personas jóvenes con formación y ganas de salir a evangelizar.

El último reto es la politización de la fe y la polarización que crean cuestiones como el aborto o la ideología de género. Los católicos en Holanda tenemos que abrirnos un poco, algo que dice mucho el Papa Francisco.

Frente a todo esto, hay que destacar la labor de la Conferencia Episcopal de Holanda. Nuestros obispos hacen un gran trabajo en nuestro país y debemos reconocer todo lo que hacen por los católicos holandeses.

Actualidad

El Patronato de Acción Social de la Fundación CARF organiza la 28ª edición del mercadillo solidario

A través del mercadillo solidario, el Patronato de Acción Social busca conseguir fondos para costear las becas de los seminaristas.

Teresa Aguado Peña·12 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: < 1 minuto

Del 26 al 30 de noviembre, en los locales de la parroquia de San Luis de los Franceses, el Patronato de Acción Social de la Fundación CARF celebrará un mercadillo solidario con el fin de aportar fondos para ayudar a los sacerdotes.

La Fundación CARF fomenta e impulsa las vocaciones sacerdotales, apoyando la formación de seminaristas, sacerdotes o religiosos, en Roma o Pamplona: “Trabajamos para llevar la sonrisa de Dios a todos los rincones del mundo a través de los sacerdotes y ayudando a su formación”.

Asociado a esta fundación y con este mismo fin, el Patronato de Acción Social coordina voluntariados parar coser y bordar las albas o lienzos litúrgicos que se entregan, junto con los estuches de vasos sagrados, a cada seminarista que termina su formación y regresa a su diócesis para ser ordenado.

La primera acción del Patronato es rezar por las vocaciones sacerdotales. “Rezar y ayudar a los sacerdotes motiva a muchas personas. Además, ellos también rezan por nosotros, por lo que, en realidad, salimos ganando”, apunta su presidenta, Carmen Ortega.

Además de esta labor, el mercadillo forma parte esencial del Patronato. Para ayudar a las vocaciones se movilizan distintas voluntarias que confeccionan ropa de punto, recogen muebles donados, objetos de decoración y organizan lo necesario para poner todas las donaciones a disposición del público.

En esta edición el 28 mercadillo semestral será del 26 al 30 de noviembre de 11 a 21 en los locales de la parroquia de San Luis de los franceses en la calle Padilla 9, de Madrid.

El autorTeresa Aguado Peña

Zoom

La basílica de san Pedro tiene un «gemelo digital»

Representantes de la Fabbrica di San Pietro, Microsoft y otras organizaciones muestran al Papa Francisco el "gemelo digital" de la basílica de san Pedro, realizado con Inteligencia Aritficial.

Paloma López Campos·12 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: < 1 minuto
Recursos

Trabajar bien. La virtud de la laboriosidad

El texto reflexiona sobre la virtud de la laboriosidad, destacando su valor en el trabajo bien hecho y su impacto en la sociedad. Contrasta ejemplos de trabajo comprometido con casos de negligencia. La laboriosidad implica esfuerzo constante y atención al detalle, lo cual enriquece nuestra vida y contribuye al bien común. Finalmente, el trabajo bien hecho, ofrecido con buena intención, colabora en la obra creadora de Dios y fortalece nuestra autoestima.

Julio Iñiguez Estremiana·12 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 7 minutos

Con la mente en Valencia y el corazón con los valencianos, especialmente con las víctimas, y rezando por el eterno descanso de los fallecidos y por sus familiares, sacamos fuerzas de flaqueza para seguir adelante con nuestro plan. Hoy trataremos de la virtud de la laboriosidad, que estamos viendo tan bien reflejada en tantos voluntarios, junto con muchas otras virtudes. Este artículo ya estaba escrito antes de la terrible tragedia ocurrida en nuestra querida tierra valenciana.

En la iglesia de Ntra. Sra. de la Esperanza, en Alcobendas, al finalizar la Misa de los miércoles un equipo de mujeres, pertrechadas con los diferentes útiles de limpieza, se distribuyen por el templo y, con gran pericia y esfuerzo, lo dejan todo en perfecto “estado de revista”.

En Tenerife, en marzo de 1999, estando el equipo CD Tenerife en la máxima categoría, colocaron la “primera piedra” para el campo de fútbol de su Ciudad Deportiva (en la zona de Geneto-Los Baldíos), con la presencia de las autoridades, la animación de la charanga y un gran aparato publicitario. Desafortunadamente, tres meses después, el equipo bajó a Segunda y, transcurrido más de un año, todavía no se había avanzado nada en esas obras.

En septiembre del 2000 se retomó la actividad para preparar los primeros movimientos de tierra, y descubrieron que había desaparecido la “primera piedra”: un cofre de madera enterrado en un lugar destacado, junto a la placa conmemorativa de que allí había sido colocada la “primera piedra” año y medio antes. Al parecer, unos desaprensivos desenterraron el cofre y se apropiaron de los “tesoros” que contenía: algunas monedas de curso legal, las medallas del 75 aniversario del club, un banderín, una camiseta oficial del Tenerife… Sólo dejaron los ejemplares de los tres periódicos que se editaron en Tenerife el día del célebre evento -‘El Día’, ‘Diario de Avisos’ y ‘La Gaceta de Canarias’-. Narración de D. Luis Padilla el 11 – IX – 2018 en Atlántico Hoy. 

En el caso del equipo de mujeres que limpian voluntariamente el templo de Ntra. Sra. de la Esperanza, no hay trompetas ni tambores que cacareen ni amenicen su labor, pero con su perseverancia y su trabajo callado y eficiente, un miércoles, otro miércoles, y todos los miércoles, mantienen siempre la iglesia limpia, ordenada y acogedora para todos los feligreses. Constituye un buen ejemplo de laboriosidad.

En el caso de la “primera piedra” hubo mucho espectáculo y algarabía, pero luego nadie movió un dedo para realizar los trabajos según lo previsto. Esto no es un ejemplo de laboriosidad, sino más bien, todo lo contrario: un contraejemplo de negligencia y abandono.

La virtud de la laboriosidad

La palabra «laboriosidad» deriva del verbo latino «labor», que significa esfuerzo para realizar algo; se identifica, por tanto, con diligencia y se opone a ociosidad o pereza. Por esta virtud nos sentimos inclinados al trabajo, a cumplir con nuestros deberes y a prestar los servicios -pequeños o grandes- en que se manifiesta el amor.

En tiempos donde la inmediatez y la búsqueda de gratificación instantánea parecen dominar gran parte de nuestras rutinas, desarrollar la virtud de la laboriosidad nos ayuda a organizarnos bien para llevar a cabo las tareas que se nos asignan, o que nos imponemos a nosotros mismos, dedicando el tiempo y el esfuerzo necesarios para realizarlas eficientemente. Pero, contra lo que pudiera parecer a primera vista, no es laborioso quien se entrega ansiosamente a la búsqueda de resultados en el trabajo, convirtiéndolo en una actividad que ya no es un servicio, sino una esclavitud.

Tiene interés mencionar aquí una nueva actitud ante el trabajo que se conoce con término anglosajón «workaholic» -adicción al trabajo-, y que se caracteriza por una excesiva e incontrolable necesidad de trabajar constantemente y puede interferir negativamente en nuestra salud física y emocional, así como en nuestras relaciones sociales. Es evidente que esta actitud ante el trabajo no es compatible con el trabajo bien hecho. La laboriosidad también nos enseña a gestionar bien el tiempo y las prioridades, lo que nos permite alcanzar un equilibrio entre el trabajo y el descanso, evitando caer en los extremos del perfeccionismo o la pereza.

Algunos famosos como referentes

Todos conocemos en nuestro entorno a muchas personas que son un buen ejemplo de laboriosidad. Aquí vamos a mencionar a algunos famosos que destacan por haber sido capaces de organizarse para compaginar el ejercicio de su actividad profesional con sus licenciaturas universitarias. Estos son buenos referentes para comprender, a partir de personas concretas, en qué consiste la laboriosidad.

José Antonio Sainz Alfaro es el director del Orfeón Donostiarra, en el que ingresó como barítono en 1974. Yo lo conocí un poco después, al coincidir en la misma promoción de Ciencias Físicas en la Universidad de Navarra, en el campus de San Sebastián (Guipúzcoa). Compaginó sus estudios universitarios —ambos logramos la licenciatura— con su vocación y afición musical, a la que también le dedicó muchísimo tiempo de estudios, ensayos, etc., en el Conservatorio de San Sebastián. Más tarde, completó su formación siguiendo distintos cursos de dirección coral en el extranjero. Fruto todo ello es la moderna imagen del Orfeón Donostiarra, cada vez más conocido en España y en el extranjero.

Paula Belén Pareto, médica y judoca argentina, se convirtió en la primera mujer argentina en ser campeona olímpica y en la primera deportista argentina que ganó dos medallas olímpicas en disciplinas individuales. Compatibilizó su actividad deportiva con los estudios de Medicina.

José Martínez Sánchez, Pirri, jugó durante 16 temporadas en el Real Madrid. Ganó, entre otros títulos, la Copa de Europa 1965-66 y diez Ligas. Se doctoró en Medicina y, tras su retirada en México, regresó al Real Madrid para formar parte del cuerpo médico del club entre 1980 y 1990. Actualmente, es el presidente de honor del Real Madrid.

Mediante el trabajo, colaboramos con la obra de Dios

Hay una íntima relación entre laboriosidad y trabajo bien hecho. Dios creó al hombre «ut operaretur», para que trabajara:

«Tomó, pues, Yahvé Dios al hombre y lo puso en el jardín del Edén para que lo cultivase y lo guardase.» [Génesis 2, 15]

El trabajo es, por tanto, una actividad digna y noble, mediante la cual el mismo Dios, contando con las cualidades y dotes que cada uno hemos recibido, nos ofrece la apasionante tarea de colaborar con Él y completar la Creación.

Y contamos sobre todo con el ejemplo de Jesús, que se pasó la mayor parte de su vida trabajando, primero aprendiendo el oficio de artesano en el taller de José; y después, cuando seguramente José ya había muerto, llevando Él el taller, tal como relata San Marcos:

«¿No es éste el artesano, el hijo de María…?» [Mc 6, 3]

Jesús, siendo Dios, se hizo hombre para liberarnos de la esclavitud del pecado, y esa Redención la obró durante toda su vida, también con su trabajo. Durante sus años de trabajo en Nazaret, Nuestro Señor Jesucristo puso de relieve dos realidades fundamentales: que el hombre, con su trabajo, participa en la obra creadora de Dios, y que Dios cuenta con nuestro trabajo bien hecho para completar la redención del género humano.

Un trabajo bien hecho –que mejora el mundo y perfecciona a las personas– necesita de cada uno algo más que buena voluntad: requiere, por un lado, competencia profesional –poseer los conocimientos y las técnicas idóneas– y dedicación del tiempo y esfuerzo necesarios para realizarlo eficientemente; y, por otro, que manifieste una intención amorosa: hacerlo por amor a Dios y con deseos de servicio a los demás.

No se trata de trabajar sin más, ni tampoco mucho, sino, sobre todo, de trabajar con atención al detalle, con la voluntad de ofrecer lo mejor de uno mismo en cada tarea, grande o pequeña. El poeta castellano, Antonio Machado, lo expresó de forma concisa y bella: «Despacito y buena letra: el hacer las cosas bien importa más que el hacerlas».

Orientaciones prácticas

El trabajo bien hecho, con la mayor perfección que nos sea posible, se manifiesta en muchos detalles concretos, como son:

· Terminar las tareas en los plazos establecidos, manteniendo hasta el final el mismo interés y ánimo con que se empezaron. Solo las cosas bien terminadas sirven para su fin propio: esas son las que valen y nos impulsan a seguir trabajando con ilusión.

· Tener un horario o plan de trabajo exigente y realista para cada día, y seguirlo, sabiendo que el éxito final depende en gran medida del esfuerzo diario.

· Procurar evitar siempre la chapuza, en el sentido de «trabajo mal hecho o sucio».

· Estar atento y ayudar a los demás, para que también hagan bien su trabajo. 

«Cuando hayas terminado tu trabajo, haz el de tu hermano, ayudándole, por Cristo, con tal delicadeza y naturalidad que ni el favorecido se dé cuenta de que estás haciendo más de lo que en justicia debes.  

«—¡Esto sí que es fina virtud de hijo de Dios!»

San Josemaría Escrivá (Camino, 440)

· Esforzarse por realizarlo con una intención recta; es decir, que agrade a Dios, sea un servicio a la sociedad y sea respetuoso con el medio ambiente.

En el estudio

Para los estudiantes, el estudio es su trabajo profesional, y realizarlo bien también precisa de ciertas cualidades, como por ejemplo, orden, intensidad y profundidad, que se aprenden y se desarrollan con dedicación de tiempo, constancia y esfuerzo. A continuación, algunas sugerencias sobre las actitudes que favorecerán un buen rendimiento en el estudio:

· Interesarse por adquirir técnicas de estudio eficaces, además de las destrezas y los hábitos necesarios: mejorar la rapidez y comprensión lectora, la capacidad para redactar, el uso correcto de las técnicas del subrayado, de hacer resúmenes, etc.

· Realizarlo con interés, sabiendo que es nuestra profesión, vivir el orden cumpliendo el horario previsto sin retrasos y evitar las distracciones que impiden la necesaria concentración.

· Contar con un lugar adecuado para estudiar y dormir las horas necesarias.

Lo importante en el estudio no son las notas, que casi siempre son el resultado de nuestro esfuerzo personal diario por hacer bien las actividades escolares (atender en las clases, las tareas para casa, el estudio de los temas, preparación de exámenes…): eso es lo primordial. La laboriosidad es una ayuda importante para lograr estos objetivos.

Yo tuve el privilegio de tener unos padres que encarnaron muchas virtudes y, entre ellas, la laboriosidad. Agricultores en el fértil regadío de Varea (Logroño), recuerdo que en la huerta nunca se veía una mala hierba, que mi padre madrugaba para regar, antes de que faltara el agua, o para llevar las hortalizas y frutas al mercado -riquísimas fresas y sabrosos tomates, por ejemplo-; también recuerdo que mi madre, además de ayudar en las faenas de la huerta y el mercado, siempre mantenía la casa limpia y acogedora, elaboraba exquisitos mazapanes para Navidad y sacaba tiempo para confeccionar todo tipo de prendas de punto para hijos, nietos, etc. Y recuerdo otros muchos detalles por el estilo de ambos, Julio y Marina, que fueron para mí, ejemplo de laboriosidad. Sirvan estas líneas para rendirles un filial y agradecido homenaje, que ellos corresponderán sonriendo desde el Cielo.

Conclusiones

La laboriosidad nos impulsa a trabajar con esmero, dedicación y constancia en nuestras actividades, sean grandes o pequeñas. Mediante esta virtud, aprendemos a valorar el esfuerzo necesario para lograr objetivos a largo plazo, evitando caer en el desánimo ante las dificultades. Y también sacaremos tiempo para descansar y ocuparnos de los demás. Así estaremos alegres y con la conciencia tranquila.

La laboriosidad y el trabajo bien hecho son dos caras de la misma moneda. Trabajar bien es el resultado natural del compromiso de dedicar el tiempo, el esfuerzo y la atención necesarios a cada tarea. Cultivar esta relación mejora nuestro desempeño profesional, a la par que enriquece nuestra vida personal al encontrar un sentido más profundo en lo que hacemos, fomentando una cultura del esfuerzo que beneficia a toda la sociedad.

Por otro lado, trabajar con esmero y dedicación genera una satisfacción profunda, resultado de un reconocimiento interno de que hemos hecho todo lo posible, que hemos dado lo mejor de nosotros mismos y hemos contribuido al bien común, sabiendo que sólo las obras bien realizadas permanecen, mientras que las realizadas con poco esfuerzo, sin interés y sin cuidar lo pequeño, dejan pronto de servir. Este sentimiento de logro es duradero y refuerza nuestra autoestima.

Además, las obras bien hechas y bien acabadas, siendo finitas, adquieren valor infinito si las ofrecemos a Dios, que le agradan y nos premia. Y con ellas cooperamos con Dios a completar la Creación, participamos en la Redención obrada por Jesucristo.

El autorJulio Iñiguez Estremiana

Físico. Profesor de Matemáticas, Física y Religión en Bachillerato

Bendita y descarada juventud

Bendita y descarada juventud, con su toque de locura, que te hace pensar que puedes hacer algo bueno y grande. Algo como casarte joven, porque sabes que Dios quiere tu matrimonio incluso más que tú. Algo como vivir el celibato apostólico y disponerte, como san Juan, a llegar incluso al Calvario.

12 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 2 minutos

La causa de beatificación de la hermana Clare Crockett se abrirá el 12 de enero de 2025. Esta monja nacida en Irlanda del Norte, que falleció con tan solo 33 años, se une a una lista de jóvenes que, en los últimos años, lideran un camino hacia el Cielo para las nuevas generaciones.

Nombres como el de Clare, Chiara Corbella, Pedro Ballester, Carlo Acutis, Chiara Badano o Marcelo Câmara inspiran a miles de jóvenes en todo el mundo. No es su juventud la que los hace santos, pero es un factor importante y que llama mucho la atención.

Somos muchos los jóvenes católicos que nos vemos en ocasiones remando solos. Cuesta mantener la fe en una sociedad que desprecia los valores que queremos amar, en un ambiente donde reina la hipocresía incluso dentro de los templos. Es difícil vivir la pureza, el desprendimiento y confiar en la Providencia.

Sin embargo, tenemos la oportunidad de pararnos un momento y dejar que la corriente siga mientras nosotros alzamos la mirada, aunque sea un segundo. Y allí vislumbramos la bendita y descarada juventud de quienes nos han precedido en el camino y han alcanzado la victoria.

Bendita su juventud, porque para gente como Carlo Acutis o Pedro Ballester esto no era un impedimento, sino una razón más para sacar fuerzas y seguir adelante en su esfuerzo por vivir las virtudes cristianas de forma heroica.

Descarada su juventud, porque sería absurdo pensar que ellos lo tuvieron más fácil que nosotros y, a pesar de todo, tuvieron la valentía de abrir el camino, demostrando que ser católico hoy es posible, también para nosotros los jóvenes, que el sábado estamos con nuestros amigos no creyentes en una fiesta y el domingo con nuestros amigos de la parroquia en Misa. Y eso es sano, ese es nuestro ambiente.

Bendita y descarada juventud, con su toque de locura, que te hace pensar que tú también puedes hacer algo bueno y grande. Algo como casarte joven, porque sabes que Dios quiere tu matrimonio incluso más que tú. Algo como vivir el celibato apostólico y disponerte, como san Juan, a llegar al Calvario.

Bendita esa juventud de corazón descarado que grita feliz que se entrega a Dios. Porque pueden decir lo que quieran, pero en la Vigilia de la última Jornada Mundial de la Juventud en Lisboa más de un millón de jóvenes pasaron la noche ante Cristo.

Como dijo san Juan Pablo II en 1985 a los jóvenes, a nosotros nos pertenece el futuro. Nuestra es “la responsabilidad de lo que un día se convertirá en actualidad”. Bendita y descarada juventud que quiere hacer de ese futuro próximo una actualidad llena de esperanza en Cristo.

El autorPaloma López Campos

Redactora jefe de Omnes

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España

Vicenta Rodríguez: “Las escuelas de Valencia estamos ya en pie”

“Más fuertes que las olas que arrastran cañas y maleza, que arrastran coches y enseres, son las olas de solidaridad. Las escuelas de Valencia estamos ya en pie”, manifestó en el Congreso de Escuelas Católicas la secretaria autonómica valenciana, Vicenta Rodríguez, quien recordó, “el drama humano, las vidas destrozadas y desaparecidas, y la necesidad de cuidar y acompañar”.

Francisco Otamendi·11 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 3 minutos

El XVII Congreso de Escuelas Católicas celebrado en Madrid ha sido ocasión de manifestar un hondo sentido de solidaridad con las víctimas y afectados por la devastadora Dana de la semana pasada. La secretaria autonómica de Escuelas Católicas Valencia, Vicenta Rodríguez, puso en pie al auditorio con sus palabras en la jornada inaugural, al recordar “más allá de las cifras, el drama humano, las vidas destrozadas y desaparecidas, y la necesidad ahora de cuidar y acompañar”.

Vicenta Rodríguez expresó la importancia de la solidaridad en momentos de adversidad y agradeció todo el apoyo y muestras de cariño recibidas. “Ahora es momento de coordinar apadrinamientos entre colegios”, señaló, “y de que las manos se entrelacen y nos ayudemos. De ahí, la campaña que desde Escuelas Católicas se ha puesto en marcha, con el lema «Escuelas en pie», para la reconstrucción de los colegios afectados”.

“Ayuda de todos”

La secretaria valenciana subrayó que el ánimo que les guía ahora es el propio que se expresa en el himno regional de la Comunidad Valenciana: “Valencianos alcémonos en pie y que la luz salude de nuevo el sol”, y así lo están haciendo los colegios con la ayuda de todos porque “desde Valencia las escuelas estamos ya en pie”, añadió.

Durante la ceremonia de inauguración, los asistentes recibieron un mensaje en vídeo del Papa, grabado recientemente por el equipo directivo de EC durante una visita a Roma. En sus palabras, destacó la importancia de la labor educativa y afirmó: “La educación es una inversión para el futuro”. Con este mensaje, el Papa Francisco subrayó el valor de la educación como pilar fundamental para construir una sociedad más justa y esperanzadora, inspirando a los presentes a continuar su compromiso con la formación de futuras generaciones”.

“Poner a cada persona en el centro”

En alusión al lema del Congreso -“ser, estar, educar… con nombre propio”-, la presidenta de Escuelas Católicas, Ana Mª Sánchez, aseguró que decir nuestro nombre es reconocer nuestra identidad personal, y que pronunciarlo juntos nos recuerda aquello que somos: “escuelas católicas que evangelizan y que hacen de la educación su pasión”. 

Además. al concluir, recordó tener presente el objetivo del Pacto Educativo Global propuesto por el Papa Francisco: “poner a cada persona en el centro, cada día, con nuestra forma de estar y de educar”.

“Id y enseñad”

Por su parte, el secretario general, Pedro Huerta, que clausuró el congreso junto a la directora, Victoria Moya, puso el acento en que el lema del Congreso han sido “tres verbos a los que a lo largo de los meses de preparación de esta cita se han ido incorporando otros atributos, como los complementos directos, complementos indirectos y sujetos, que son “los que dan vida, dan fuerza y se apartan del infinitivo de los verbos para hacerlos realidad”. 

“Sujetos, que son, según sus palabras, los congresistas, los miembros de EC organizadores del Congreso, las familias, los alumnos, las comunidades educativas, parroquiales, religiosas… y preposiciones que “con nombre propio”, pero no en nombre propio, sino en nombre de Jesús que hoy vuelve a decir ‘Id y enseñad’”.

Ministerio de Educación: “carácter complementario de la concertada”

La subdirectora general de Centros y Programas, Librada María Carrera, que acudió en representación del Ministerio de Educación, tuvo unas primeras palabras de consuelo y cariño para las escuelas católicas de Valencia y las familias afectadas. Subrayó que el lema de este Congreso es reflejo de lo que son y deben ser las escuelas católicas, “escuelas que no solo transmiten conocimientos, sino que descubren el potencial de cada alumno con nombre propio, que reconocen la diversidad en las aulas, que guían, acompañan y personalizan el aprendizaje”.

La alta funcionaria del Ministerio, manifestó el compromiso real del Ministerio con la escuela concertada a la que reconoció su labor por la inclusión, la solidaridad, la educación de calidad y por sacar lo mejor de cada alumno, ha informado Escuelas Católicas. 

Librada María Carrera subrayó también “la importancia y el carácter complementario de ambas redes”, pública y concertada, cada una con su singularidad, y siendo conscientes de que para que puedan seguir cumpliendo con su misión la escuela concertada debe dotarse de los recursos necesarios y suficientes, y de una retribución justa de su profesorado. “El Ministerio es consciente de la importancia y del carácter complementario de la educación concertada”, dijo.

Mons. Argüello: “caminar juntos”

En el acto de inauguración participó Monseñor Luis Argüello, presidente de la Conferencia Episcopal Española, quien llamó a compartir camino, a caminar juntos, apeló a la sinodalidad y propuso al auditorio ayudar a cada alumno a descubrir su nombre secreto que está escrito en el libro de la vida que le descubra “quién es” y para “quién es”.La clausura estuvo precedida por la Eucaristía celebrada a primera hora de la mañana por monseñor Alfonso Carrasco Rouco, presidente de la Comisión Episcopal para la Educación y Cultura, y animada por un coro compuesto por representantes de 10 instituciones educativas. En el congreso han participado en torno a dos mil educadores de la escuela católica.

El autorFrancisco Otamendi

Actualidad

Jonathan Roumie, James Mallon y Nicky Gumbel conversarán sobre compartir a Cristo en la cultura actual

Tres figuras de relevancia en el panorama de los movimientos y la cultura católica debaten sobre la manera de acercar a Cristo en la cultura actual.

Redacción·11 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: < 1 minuto

Jonathan Roumie, el actor que da vida a Jesús en la serie The Chosen, el sacerdote católico James Mallon, de la Renovación Divina y el anglicano Nicky Gumbel, desarrollador de Alpha son los tres ponentes del próximo online de Alpha y Renovación Divina que podrá seguirse online el miércoles 12.

Bajo el título «Re-Presentando a Jesús: Compartir a Cristo en la cultura contemporánea», estos tres oradores explorarán lo que significa representar a Jesús en nuestro contexto cultural actual y cómo la Iglesia puede abrazar este momento para cumplir su misión de compartir a Cristo con todas las naciones. Un encuentro que responderá a la cuestión actual de cómo utilizar los nuevos medios y lenguajes sociales para acercar a Cristo a la sociedad.

El seminario está abierto para todas las personas que quieran asistir, de manera digital y la inscripción está disponible a través de las webs de Alpha y Renovación Divina

Roumie se une, en este seminario, al elenco de participantes en estos encuentros organizados por Alpha y Renovación Divina en los que han participado figuras como el obispo Robert Barron o el sacerdote John Adams.

El autorRedacción

Vaticano

El Papa visita la universidad de los jesuitas

El Papa Francisco visitó la universidad Gregoriana. Esta institución, en manos de los jesuitas, cuenta con miles de estudiantes y ha formado a varios Papas a lo largo de la historia.

Rome Reports·11 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: < 1 minuto
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El Papa Francisco visitó la universidad pontificia más antigua de Roma, la universidad Gregoriana. Esta institución, en manos de los jesuitas, cuenta con casi 3000 estudiantes y ha formado a varios Papas a lo largo de la historia de la Iglesia.

Durante su visita, el Santo Padre pidió a los docentes y alumnos que conviertan la institución académica en un lugar donde, a través del conocimiento, se puedan «convertir los corazones y responder a las preguntas de la vida».


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Vocaciones

El testimonio de un matrimonio misionero: “Misión y gracia es una simbiosis”

José Antonio y Amalia comparten en esta entrevista con Omnes las gracias y los frutos que su entrega como matrimonio misionero ha producido.

Maria José Atienza·11 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 5 minutos

José Antonio y Amalia son un matrimonio del Camino Neocatecumenal que se fue de misión en 2011 a Taiwán, tras descubrir que Dios les estaba pidiendo que dejaran todo y diesen un salto de confianza.

Con dudas, sin conocer el idioma y un gran miedo por el futuro de sus hijos, José Antonio y Amalia decidieron fiarse de Dios y ahora, en esta entrevista con Omnes, comparten las gracias y los frutos que su entrega ha producido.

¿Cómo descubrieron que tenían una vocación misionera?

– Pertenecemos al Camino Neocatecumenal en donde continuamente se nos habla de la importancia del anuncio del Evangelio: llevar a Cristo a todas las personas del mundo para que todo aquel que lo acoja tenga la oportunidad de salvarse, como lo ha hecho con nosotros. De esta forma, cada año, en encuentros y convivencias se piden sacerdotes, célibes y familias que libremente estén dispuestos a partir a cualquier parte del mundo y así descubrimos nuestra vocación misionera.

¿Cuál fue el momento clave en su vida en el que sintieron que Dios los llamaba a este camino?

– En 2006, en el encuentro del Papa con las familias en Valencia, teniendo cinco hijos, sentimos por primera vez que el Señor nos llamaba a hacer esta misión. En ese momento no fuimos capaces de levantarnos, pensando que era una locura o un sentimiento pasajero. Pero la llamada persistía y nosotros nos veíamos encadenados en la vida que teníamos: trabajo, casa, familia….pero con un vacío y tristeza interior que nada lo llenaba. Fue en 2010, con el Evangelio de la hemorroísa, cuando quisimos tocar a Cristo con la fe y nos abandonamos a hacer su voluntad, partiendo para el sur de Taiwán, en la zona aborigen. Así, nos fuimos en 2011 con ocho hijos y ocho maletas.

¿Cómo han equilibrado su vida familiar y su labor misionera?

– Nosotros lo único que hacíamos era vivir entre los chinos pero según la Iglesia nos ha enseñado: comiendo juntos alrededor de una mesa con nuestros hijos, lo que ellos no hacen porque están siempre trabajando; celebrar la Navidad, en un ambiente pagano que no conocen lo que es, y teniendo que pedir permiso en el colegio porque nace un tal Jesús que es nuestros Salvador, y así lo damos a conocer, poniendo el Belén en la puerta de la casa para que las personas lo visiten,….. simplemente vivir el día a día.

Es verdad que hemos hecho lo que en el Camino se llama “Misión popular”, es decir, anunciar a Jesucristo y el amor de Dios por calles y plazas, con guitarra, cantos, experiencias, Evangelio… También haciendo catequesis de Iniciación al Camino Neocatecumenal y cursillos prematrimoniales. Pero quizás donde nosotros hemos notado que la labor misionera era más fructífera era en el día a día tanto nuestro como de nuestros hijos, sobre todo en la relación con sus compañeros y profesores, a los cuales hemos invitado a casa y veían cómo vivíamos.

¿Qué desafíos han enfrentado como matrimonio en el campo misionero y cómo los han superado?

– Para nosotros la principal dificultad ha sido el idioma. Hemos comprobado que no hay mayor pobreza que no entender nada y ni poder hablar ni una palabra. Llevar al médico a nuestros hijos y no poder expresar lo que le pasa ni entender lo que te dice o saber el medicamento que hay que darle; comprar y sentirte tantas veces engañado; explicar las dificultades de nuestros hijos a los profesores….

Nosotros partimos sin saber nada de chino, y el Señor poco a poco fue abriendo el oído, empezamos a entender, balbucear palabras, hasta poder llegar a desenvolvernos.

Otra dificultad es intentar entender su cultura tan diferente a la nuestra, y para eso nada mejor que vivir como ellos: comiendo su comida, metiendo a nuestros hijos en sus colegios estatales, trabajando en sus trabajos (descansando los domingos), dando a luz en sus hospitales, manteniéndonos allí cuando había lluvias torrenciales, tifones, terremotos…

¿Cómo lo hemos superado? Evidentemente por la Gracia de Dios y  la oración nuestra y de nuestra comunidad, así como de algún convento de monjas que también rezaban por nuestra familia y misión.

¿Cómo ha fortalecido su relación como pareja el trabajo misionero?

– Nuestra relación como matrimonio ha salido muy muy fortalecida, porque estábamos tan solos, teníamos tantas dificultades alrededor, que la opción que tomamos fue unirnos a Dios y unirnos entre nosotros. No tenía sentido pelearnos, discutir por tonterías que en el día a día surgen y que sólo se trata de una imposición de razón. Lo mejor era ceder, humillarse, hacer feliz al otro y disfrutar de los pequeños momentos. Eso es lo que le hemos trasmitido a nuestros hijos. Nuestro matrimonio dio un giro de 180º.

¿Qué le dirían a otras parejas que sienten el deseo de involucrarse en la misión pero tienen dudas o temores?

– Nosotros entendemos perfectamente los miedos, temores y dudas, pero la experiencia es que Dios da la gracia y nunca nunca prueba por encima de las fuerzas. Claro que es una vida con muchos sufrimientos, no la estamos pintando de color de rosa, pero por encima de todo esta la potencia de Dios que jamás nos ha dejado. Misión y gracia es una simbiosis, que se cumple cuando se dice “sí”.

¿Cómo han visto la mano de Dios obrar en las personas a las que han servido durante su misión?

– ¡Eso es un regalo tan grande que el Señor nos ha permitido vivir! Una de nuestras hijas estaba en el curso de infantil y empezamos cierta amistad con su profesora, pagana evidentemente. Necesitábamos cuidadora para que se quedara con nuestros hijos mientras íbamos a la Eucaristía y se lo pedimos a ella. Así empezó a entrar en nuestra casa, ver cómo vivimos y empezar a preguntar. Se ha bautizado e incluso hace unos meses se ha casado y su marido es ahora quien quiere bautizarse.

También nuestros hijos han traído amigos que al ver cómo vivimos cada vez se han pegado más a nuestra familia y deseado tener algo así en su vida. Hay quien no ha podido romper con las tradiciones de su casa, pero al menos conocen otra forma de vida.

Pero los más beneficiados de la misión ha sido nuestra familia, nosotros como matrimonio según hemos explicado, y nuestros hijos sobre los cuales siempre nos hemos preguntado:¿hemos estropeado la vida de nuestros hijos o será un regalo que dará fruto a su tiempo?. Pero “el Señor ha estado grande con nosotros y estamos alegres”: nuestros hijos han aprendido a vivir de Dios, literalmente, y eso no se aprende en el colegio. Es lo más importante que le hemos enseñado.

Nuestro señor obispo, D. Demetrio nos lo dijo antes de partir y eso es lo que se nos quedó grabado:” no hay mejor escuela para vuestros hijos que la misión”. Pero además el Señor nos está permitiendo ver unos frutos increíbles: nuestra hija mayor, María, está como misionera en Harbin (Norte de China); nuestro cuarto hijo, Jose Antonio, acaba de entrar en el Seminario Diocesano Misionero Redemptoris Mater de Viena; nuestra segunda hija, Amalia, quiere casarse en unos meses y formar una familia cristiana abierta a la vida y en su interior sigue teniendo la inquietud de la misión (eso ya Dios les hablará…). Así que frente a todos los miedos que pudiéramos tener por la vida de nuestros hijos, Dios desborda.

Iniciativas

Expertos buscan las raíces comunes de judíos y cristianos

Un curso en la Universidad Pontificia de la Santa Cruz exploró la conexión entre el judaísmo y el cristianismo a través de un examen conjunto del Decálogo y los Rollos del Mar Muerto. El acto de clausura contó con una conversación entre Adolfo Roitman y Joseph Sievers.

Giovanni Tridente·10 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 3 minutos

Con una sesión abierta al público, concluyó en la Universidad Pontificia de la Santa Cruz el curso de dos semanas en inglés “One Revelation and Two Traditions”, que exploró las interpretaciones judía y cristiana del Decálogo. El acto de clausura contó con la presencia de dos expertos de renombre internacional, el profesor Adolfo Roitman y el profesor Joseph Sievers, que ofrecieron una visión única del Decálogo y los Rollos del Mar Muerto, proponiéndolos como instrumentos de diálogo y reconciliación entre el judaísmo y el cristianismo.

Durante el encuentro, Roitman -desde 1994 y hasta el pasado mes de junio director del Santuario de los Libros del Museo de Israel y conservador de la colección de Rollos del Mar Muerto- subrayó que el Decálogo representa algo más que un conjunto de normas: es un verdadero “pacto con Dios” y un símbolo de unidad entre las dos confesiones. Las Diez Palabras, añadió, «no sólo invitan a judíos y cristianos a vivir según valores que trascienden las diferencias religiosas, sino que también sirven de fundamento ético universal». De hecho, este código ético, compartido entre la Torá y el Antiguo Testamento cristiano, basa ambas tradiciones en principios de justicia, respeto e integridad.

Por su parte, Sievers -profesor emérito del Pontificio Instituto Bíblico- observó cómo el texto sagrado invita a ambas confesiones a vivir orientados hacia el bien común: «una guía moral que resiste la prueba del tiempo y que, a pesar de los milenios transcurridos, sigue hablando a judíos y cristianos como modelo de vida comunitaria, fundada en el respeto mutuo».

A continuación añadió que es crucial que los cristianos comprendan el contexto judío que dio origen a su fe, explicando que «si nos tomamos en serio la Encarnación de Cristo, también debemos tomarnos en serio el contexto judío en el que vivió y predicó».

Una ventana abierta al cristianismo primitivo

Un punto central de la reflexión desarrollada en la Universidad de la Santa Cruz fue entonces la contribución que los Rollos del Mar Muerto ofrecen a la comprensión de las raíces cristianas. Roitman explicó que «Qumrán es un ejemplo excepcional de comunidad judía, donde los Rollos revelan una preocupación única por la pureza y una visión rigurosa de las Escrituras. Esto nos acerca a la fe judía, pero también nos da una idea de la vida y la espiritualidad de la época de Jesús”.

Además del énfasis en la pureza, también emerge un sentido de pertenencia, reflejado, por ejemplo, en la comunión de bienes. «El ideal de una comunidad que vive como una familia y comparte todo», explicó el profesor emérito de Bíblica, “es un concepto que encontramos tanto en Qumrán como en la primitiva comunidad cristiana”. Esto convierte a los Rollos Muertos en «un valioso recurso para comprender las raíces del cristianismo».

El valor del diálogo y el estudio en común

El acto celebrado en la Universidad de la Santa Cruz por iniciativa de la Facultad de Teología y el Instituto Universitario Isaac Abarbanel de Buenos Aires, primera universidad judía de América Latina, mostró precisamente cómo estas fuentes documentales de los primeros siglos, aunque descubiertas recientemente, pueden abrir una «quinta dimensión» para interpretar las Escrituras y comprender mejor tanto el judaísmo como el cristianismo primitivo. El propio Roitman se mostró convencido de que el estudio conjunto de estos textos es una forma valiosa de reflexionar sobre valores espirituales y culturales comunes.

Además, el diálogo no es sólo un enriquecimiento cultural, «sino también una herramienta para la reconciliación y el respeto mutuo», añadió Sievers. La experiencia de descubrir y estudiar los propios Rollos «nos enseña que siempre hay nuevas perspectivas que explorar». Al fin y al cabo, «conocer el judaísmo por su valor intrínseco es una tarea que incluso los cristianos pueden encontrar enriquecedora».

El curso en la Santa Cruz

Los ponentes que se turnaron durante las dos semanas del curso procedían de tradiciones y entornos culturales diferentes, desde Italia hasta Tierra Santa. Las actividades se centraron en análisis comparativos de los textos sagrados, destacando las similitudes y diferencias en las interpretaciones teológicas y la aplicación práctica de los mandamientos en la vida cotidiana y comunitaria.

Los participantes pudieron reflexionar sobre la raíz común de la Revelación y el significado compartido de las normas éticas fundamentales, abriéndose también a debates sobre los contextos culturales que influyeron en sus respectivas interpretaciones. En un ambiente de intercambio y puesta en común, se organizó también una visita a la Sinagoga de Roma y al Museo Judío y, por parte cristiana, a la Biblioteca Vaticana.

Ecología integral

Austeridad responsable y conversión ecológica

La pobreza y la austeridad son virtudes cristianas que estamos llamados a vivir. En estos días de preocupación por la disminución de la biodiversidad podemos afirmar que ambas virtudes son señales de responsabilidad social.

Cristina Casanovas Queralt·10 de noviembre de 2024·Tiempo de lectura: 5 minutos

A los laicos más o menos acomodados a veces se nos olvida que la pobreza y la austeridad son virtudes cristianas que estamos llamados a vivir. En estos días de preocupación por la grave disminución de la biodiversidad y el cambio climático podemos afirmar que ambas virtudes son señales de responsabilidad social y cuidado de las personas y del medio ambiente.

En este artículo damos luz y mostramos el impacto social y medioambiental que tiene un simple acto de austeridad en nuestro día a día apoyados en los Evangelios y en la Doctrina social de la Iglesia.

Pobreza y austeridad: más allá de lo material

La pobreza puede entenderse desde diferentes perspectivas. De primeras, pensamos que es una situación en la que no se pueden satisfacer las necesidades físicas y psicológicas básicas de una persona, pero la Real Academia Española (RAE) ofrece otra definición al describir la pobreza voluntaria de los religiosos como la renuncia a todo lo que se posee y a lo que el amor propio puede considerar necesario. En el Evangelio (Lucas 12, 34) el Señor dice a los primeros cristianos: “Donde está tu tesoro, allí estará también tu corazón” o en Mateo 19, 24 “Es más fácil pasar un camello por el ojo de una aguja que entre un rico en el Reino de los Cielos”. Esto nos muestra que la pobreza tiene también profundas connotaciones morales y espirituales. “Bienaventurados los pobres de corazón, porque de ellos es el Reino de los cielos” (Mateo 5,3).

Para un cristiano, vivir la pobreza no significa ser mísero, ni ir mal vestido o poco aseado, es ser austero. La austeridad no es algo rígido e invariable, sino una cuestión de vida interior, algo que cada uno debe juzgar en cada momento. Es esencial ser sinceros con nuestra conciencia y entender que la condición de ser laicos no nos exime de vivir la austeridad. 

Muchos santos han tratado estos temas, pero destacan por su visión pragmática: santa Teresa de Jesús decía que “el dinero es el estiércol del diablo, pero hace un muy buen abono” y san Josemaría Escrivá de Balaguer hablaba del “materialismo cristiano” como el modo más eficaz de aprovechar para la gloria de Dios ese buen “abono”. Esta dualidad requiere una rectitud de conciencia para discernir cuándo usamos los bienes materiales por apego (estiércol) o como utilidad (abono) para la vida humana.

Los bienes materiales en el Evangelio

El Evangelio nos ofrece una perspectiva clara sobre los bienes materiales y su impacto en nuestra vida espiritual en función de cómo los usemos. Jesús nos advierte sobre el peligro del apego a las riquezas, como se ve en el episodio del joven rico (Mt 19, 21-22). Este joven, aunque cumplía los mandamientos, no pudo desprenderse de sus posesiones para seguir a Jesús, mostrando cómo los bienes materiales pueden atarnos y alejarnos de una vida plena en Dios.

El apego desordenado a los bienes materiales puede llevarnos a la ceguera espiritual y al endurecimiento del corazón, como menciona 1 Juan 3, 17. En este versículo el apóstol nos recuerda que el verdadero amor de Dios se manifiesta en nuestra capacidad de compartir con los necesitados.

Basta hacer una pequeña reflexión para advertir que, sin apenas darnos cuenta, nos creamos necesidades: ver el capítulo de nuestra serie preferida, salir de compras, ropa nueva cada temporada, cambiar el teléfono móvil, la decoración de la casa, cambiar de coche, de abrigo, … cada uno que añada aquello que le ata según su conciencia y que si no lo tenemos nos inquieta porque hemos unido nuestra felicidad a esas necesidades. Esta atadura, aparte de alejarnos de Dios, tiene un impacto en la sociedad que nos debe llevar a una reflexión profunda y relevante sobre la pobreza cristiana y su impacto social. A continuación, ahondamos en ello.

La austeridad, más allá de uno mismo

Los mensajes de Benedicto XVI y el Papa Francisco nos invitan a considerar cómo nuestras acciones y estilos de vida afectan a los demás. Benedicto XVI, en la Jornada Mundial de la Paz de 2009, destacó la creciente desigualdad entre ricos y pobres, incluso en las naciones más desarrolladas, y cómo esto representaba una amenaza para la paz mundial. Por otro lado, el Papa Francisco, en sus encíclicas ”Laudato si’” y ”Fratelli Tutti”, nos llama a una responsabilidad social más consciente. En ”Laudato si’” párrafo 57, subraya que el consumismo excesivo puede llevar a la violencia y destrucción, y que nuestras decisiones de compra tienen un impacto moral y citando a Benedicto XVI dice “comprar es siempre un acto moral, y no sólo económico”. En ”Fratelli Tutti”, también advierte sobre las posibles guerras futuras provocadas por el agotamiento de recursos debido al consumismo.

Estos mensajes nos invitan a reflexionar sobre cómo podemos vivir de manera más sencilla y solidaria, teniendo en cuenta que los recursos son limitados y que deben ser para uso propio, de los demás y de las generaciones futuras. Por ello hay que valorar nuestra capacidad de reutilizar y reducir el consumo innecesario como formas de amor al prójimo y al planeta que nos ha sido confiado. Ver cómo amamos al prójimo llevando a cabo todo lo que el Papa Francisco nos enseña en estas dos encíclicas, es la conversión ecológica que nos invita a realizar.

Impacto del consumo

Algunos ejemplos del impacto de nuestro consumo en el planeta:

  1. La industria de la moda rápida produce 150.000 millones de prendas nuevas cada año, superando con creces la demanda de los consumidores. El 85 % del residuo textil acaba en vertederos en su mayoría en África y Asia, contaminando aguas y suelos. Optar por ropa de segunda mano, intercambiar prendas con amigos o elegir marcas éticas puede reducir significativamente este impacto.
  2. En 2022, se generaron 62 millones de toneladas de residuos electrónicos a nivel mundial, de los cuales solo el 22.3% se recicló adecuadamente. La mayoría acaban en países como Ghana, Nigeria e India, donde se intentan reutilizar, pero de forma poco adecuada, generando la exposición de los trabajadores a plomo, cadmio, mercurio y provocando a su vez contaminación del aire, agua y suelos. Prolongar la vida útil de nuestros dispositivos y reciclarlos adecuadamente cuando ya no los necesitamos es una práctica responsable que puede reducir la contaminación y el desperdicio.
  3. Cada año, se desperdician unos 1.214,76 millones de kilos de alimentos en España (Informe del desperdicio alimentario en España 2023), lo que contribuye en 121 y 242 millones de metros cúbicos de las emisiones de metano de los vertederos al descomponerse la materia orgánica, aparte de suponer una gran falta de caridad frente a muchos de nuestros hermanos en la tierra que no tienen alimento en su día a día. Planificar nuestras compras, consumir productos locales y de temporada, y reducir el desperdicio de alimentos son prácticas que reflejan una vida más responsable.

Por si estos ejemplos no han sido suficientes para ver la relación entre la austeridad y nuestra responsabilidad social, en la “Laudato si’” (párrafo 211) el Papa Francisco nos advierte de impacto social de nuestro consumo y nos dice: “el hecho de reutilizar algo en lugar de desecharlo rápidamente, a partir de profundas motivaciones, puede ser un acto de amor que exprese nuestra propia dignidad”.

Así pues, no dudemos en esforzarnos en reciclar, reutilizar, retrasar una compra … Todo ello son actos de amor al prójimo en pleno siglo XXI y añado, no es cosa de “otros”, ni izquierdas ni de derechas, ni de hippies ni de ecologistas, hablamos de amor al prójimo y en eso los cristianos debemos, siempre, tomar la iniciativa como buenos seguidores de Jesucristo. La pregunta que se hacía san Francisco puede ayudarnos a examinarnos, ¿necesito pocas cosas y las pocas que necesito, las necesito poco?

El autorCristina Casanovas Queralt

Bióloga, postgrado en Gestión Sostenible y Agenda 2030 por ESADE, con amplia experiencia en la dirección de servicios medioambientales en el sector privado