Vaticano

Así es el juramento de secreto de los 133 cardenales electores

Por mandato del Colegio Cardenalicio, el Maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias, arzobispo Diego Ravelli, firmó hace unos días el pequeño libro del cónclave. Ahí se encuentra el juramento que deben prestar los 133 cardenales electores del próximo Papa en la Capilla Sixtina el 7 de mayo.  

Francisco Otamendi·6 de mayo de 2025·Tiempo de lectura: 2 minutos
Chimenea en el Vaticano, conectada con la Capilla Sixtina.

Tras la estatua de San Pablo, arriba, bomberos vaticanos ultimaban hace unos días la chimenea conectada con la Capilla Sixtina, para anunciar el nuevo Papa (Foto CNS/Lola Gómez).

Los 133 cardenales electores del próximo Romano Pontífice deben prestar juramento justo antes del cónclave que comienza el miércoles día 7. Como es sabido, para la elección del Papa se necesitan al menos 2/3 de las papeletas, es decir, 89 votos con su nombre, con unas reglas muy precisas. 

Una de ellas es el juramento. Tras la invocación al Espíritu Santo mediante el himno ‘Veni Creator Spiritus’, el cardenal Giovanni Battista Re, Decano del Colegio Cardenalicio, o el primer cardenal por orden de antigüedad, leerá en voz alta el texto del “iureiurando” o juramento. 

En él, los cardenales se obligan a respetar fielmente las normas del cónclave. Juran que el que sea elegido Romano Pontífice desempeñará finalmente el “munus petrinum” (oficio o misión de Pedro), de Pastor de la Iglesia universal. Y juran también observar el “secreto” sobre todo lo relacionado con la elección.

Texto completo 

El texto íntegro, titulado ‘De ingressu in conclave et iureiurando” (El ingreso en el cónclave y el juramento), es el siguiente:

“Todos y cada uno de nosotros Cardenales electores presentes en esta elección del Sumo Pontífice prometemos, nos obligamos y juramos observar fiel y escrupulosamente todas las prescripciones contenidas en la Constitución Apostólica del Sumo Pontífice Juan Pablo II, Universi Dominici Gregis, emanada el 22 de febrero de 1996, y las modificaciones del Motu Proprio ‘Normas nonnullas’ del Sumo Pontífice Benedicto XVI el 22 de febrero de 2013.

Igualmente, prometemos, nos obligamos y juramos que quienquiera de nosotros que, por disposición divina, sea elegido Romano Pontífice, se comprometerá a desempeñar fielmente el “munus petrinum” de Pastor de la Iglesia universal y no dejará de afirmar y defender denodadamente los derechos espirituales y temporales, así como la libertad de la Santa Sede”.

Durante y después

“Sobre todo”, continúa el juramento, “prometemos y juramos observar con la máxima fidelidad y con todos, tanto clérigos como laicos, 

el secreto sobre todo lo relacionado de algún modo con la elección del Romano Pontífice y sobre lo que ocurre en el lugar de la elección concerniente directa o indirectamente al escrutinio; 

no violar de ningún modo este secreto tanto durante como después de la elección del nuevo Pontífice, a menos que sea dada autorización explícita por el mismo Pontífice; 

no apoyar o favorecer ninguna interferencia, oposición o cualquier otra forma de intervención con la cual autoridades seculares de cualquier orden o grado, o cualquier grupo de personas o individuos quisieran inmiscuirse en la elección del Romano Pontífice”.

Juramento de cada cardenal elector 

A continuación, según el librito de la celebración, “cada cardenal elector, según el orden de precedencia, prestará juramento con esta fórmula:

Y yo, N. Cardenal N. prometo, me obligo y juro.

Y poniendo la mano sobre los Evangelios, añadirá: “Así Dios me ayude y estos Santos Evangelios que toco con mi mano””.  

Después del juramento, el citado Maestro de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias, arzobispo Ravelli, pronunciará el famoso “Extra omnes” y todos los ajenos al cónclave deberán salir de la Capilla Sixtina.

Previamente, ha tenido lugar el lunes día 5 el juramento realizado por los denominados “oficiales y encargados del cónclave”.

El autorFrancisco Otamendi

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