Evangelización

Beata Alejandrina da Costa, y santos Teófilo de Antioquía y Florencio de Tesalónica

La liturgia celebra el 13 de octubre a la beata Alejandrina da Costa, de Oporto (Portugal), que salvó su pureza tirándose por una ventana, con grave daño de su columna vertebral. Tuvo gran devoción a la Virgen de Fátima. Y también a los santos Teófilo de Antioquía (siglo II), y Florencio de Tesalónica, en la actual Grecia, entre otros.  

Francisco Otamendi·13 de octubre de 2025·Tiempo de lectura: 2 minutos
Alesandrina da Costa.

Beata Alejandrina en una antigua estampa, junto a su Santuario en Balazar (autor desconocido, Wikimedia Commons).

La portuguesa Alejandrina María da Costa nació en Balazar (Oporto, Portugal) el año 1904. En 1918, para salvar su pureza amenazada por un hombre, no dudó en tirarse por la ventana desde una altura de cuatro metros, lastimándose la columna vertebral. Su parálisis fue progresando hasta que, en 1925, quedó postrada en cama. Hasta 1928 no dejó de pedir al Señor, por intercesión de la Virgen, la gracia de la curación, pero luego comprendió que el sufrimiento era su vocación.

En ese período la beata Alejandrina tuvo los primeros fenómenos misticos extraordinarios, tras una gran unión con Jesús en el sagrario. Desde 1942 vivió sólo de la Eucaristía. Murió en Balazar el 13 de octubre de 1955, aniversario de la última aparición de la Virgen de Fátima, de la que era muy devota. Fue beatificada en 2004 por san Juan Pablo II.

San Teófilo, sexto obispo de Antioquía

En el año 169, san Teófilo fue el sexto obispo de Antioquía de Siria. Era pagano, y había aceptado la fe en Jesucristo gracias a los ejemplos de los creyentes y al estudio de las Escrituras. Escribió mucho para defender las verdades de la fe contra los errores y las herejías de la época. 

Gobernó con prudencia y sabiduría su iglesia, y escribió varias obras llenas de erudición. Ha llegado hasta nosotros la titulada ‘Los tres libros a Autólico’, amigo suyo pagano, que había criticado su conversión. En ella, Teófilo presenta argumentos para defender la fe cristiana a través de la razón y la Revelación. San Teófilo combatió la herejía de Marción. Murió hacia el año 185.

El 13 de octubre, la liturgia celebra asimismo a San Florencio. En Tesalónica, ciudad de Macedonia (en la actual Grecia), después de someterle  a varios tormentos, le quemaron vivo a causa de su fe cristiana, en el siglo III.

También se conmemora este día a los mártires cordobeses Fausto, Jenaro y Marcial, durante la persecución de Diocleciano, en el siglo IV.

El autorFrancisco Otamendi

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